Emma:
La idea de salir de aquí me está consumiendo la cabeza y me siento como una completa idiota por haberle confesado a Derek todo el sufrimiento que me hizo vivir por tantos años, pero de eso no puedo culpar a nadie más que a mí, esto es lo que sucede cuando no se logra borrar alguien que sabías podría lastimarte. Debí haber hecho algo al respecto en ese entonces.
Kalem no ha dejado de abrazarme desde que Derek se fue y para mi sorpresa no ha hecho ni una sola pregunta acerca de mi llanto, en verdad me alivia estar entre sus brazos pero este momento es crucial, debo tomar una decisión y para eso quiero tener la mente despejada, así que con la fuerzas que me quedan, le pido que salga del cuarto y me deje sola, hace caso sin cuestionarme pero antes de cerrar la puerta me susurra.
—descansa, todo estará bien— sus palabras no me reconfortan, aun así le regalo una sonrisa.
Cuando la puerta se cierra, me siento sofocada por mis pensamientos, la soledad crea un hueco en mi estómago y la indecisión hace que mis entrañas se revuelvan.
Cualquiera pensaría que en el silencio del cuarto es fácil pensar, pero cuando todo esta callado es imposible controlar lo que piensas, es más, los pensamientos son los que te controlan a ti.
Mientras intento centrarme y no ahogarme en la desesperación, escucho un zumbido leve proveniente de mi maleta, me toma unos segundos darme cuenta que se trata de mi Iophone. Cuando lo tomo me doy cuenta que es una llamada entrante de la orden, contesto de inmediato intentando que mi voz no suene entre cortada.
—Hola.
—Emma, ¿Qué sucede? Hemos perdido la señal de sonido por completo desde hace horas— es Madeleine al otro lado de la línea. Suena muy preocupada.
Dudo un momento antes de contestar, me pregunto si debería delatar a Derek, después de todo no parece importarle demasiado el haber desaparecido de mi vida.
—Todo está bien— digo para no alargar más el silencio. Siento un gramo de remordimiento al mentirle a Madeleine.
—Emma, si esto se trata de un secuestro por favor usa el código que te enseñamos e iremos en un segundo por ti— me dice Madeleine aún más preocupada que antes.
—No, tranquila te juro que nada sucede, es probable que haya una interferencia de tipo técnico nada mas— le digo intentando tranquilizarla, al parecer se ha tomado la decisión sola, no voy a delatar a Derek– además Derek ha seguido las ordenes de Gwen al pie de la letra todo está bajo control.
—Gwen está muy preocupada, teme que estén tramando algo y que no estemos enterados, tienes que averiguar que está sucediendo— hace una pausa antes de seguir hablando— es que de verdad Gwen está muy molesta por no poder escuchar nada— me dice nerviosa.
—Está bien, averiguaré todo lo que pueda— le digo sonando segura. Antes de darle oportunidad a que cuelgue, le hago la pregunta que ha estado rondando mi cabeza estos últimos días— Madeleine... ¿crees que pueda irme ya de este sitio?— le lanzo sintiendo mis manos sudar. Ella se queda callada, siento que quizás una eternidad.
—Emma, no puedes desertar, eso significaría tu expulsión de la orden y lo sabes. Además Gwen confía en ti, eres su única fuente de información confiable en ese sitio, Roky es solo una recluta voluntaria, no es de fiar.
—Pero...— Madeleine me interrumpe antes de que pueda seguir la oración.
— Imagina lo que le pasaría a tu familia si renuncias a tu misión. Podrían tomarte como traidora y enviarte a la periferia— siento que su respuesta es una completa exageración, pero en el fondo sé que algo de verdad tiene. – Además Gwen ya sabe que conoces Derek desde antes— me lanza de pronto. Mi corazón se acelera y el sudor en mis manos se duplica.
—Pero... ¿Cómo es que...— Madeleine me interrumpe de nuevo.
—Ella de verdad confía en ti Emma, dijo que a pesar de saber que lo conoces tiene la certeza de que tu lealtad y tu corazón están con la orden, dijo que incluso esto sería un ejemplo para las demás protectoras de como el deber esta sobre cualquier cosa. Emma te lo digo en serio, Gwen tiene todo la confianza puesta en ti— apenas escucho la mitad de lo que me dice, en mi cabeza solo esta una pregunta.
—¿ella sabía que yo conocía a Derek cuando me envió a esta misión?— le suelto haciendo caso omiso a todo el discurso que me ha dado.
—No, ella no lo sabía, lo descubrió cuando tú ya estabas en la periferia, Derek ha sabido camuflar su verdadera identidad muy bien— me dice casi susurrando – Emma, tengo que irme Gwen está cerca y no puede saber lo que te acabo de contar. Solo averigua todo lo que puedas y ni se te ocurra renunciar.
—Madeleine espera, dime ¿cómo se enteró?— cuando finalizo la pregunta Madeleine ha cortado la llamada, una impotencia invade mi cuerpo, solo quiero gritar para sacar toda la tensión, quero dejar de sentirme así. Impulsivamente golpeo con mi puño el armario que esta junto a la cama, doy un respingo cuando un montón de papeles caen al suelo.
Instintivamente reconozco la cara de mi padre en uno de ellos, sin pensarlo dos veces los tomo en mis manos, siento una patada en el estómago cuando comienzo a leer las palabras escritas en los papeles. Horarios, cuentas de banco, el nombre de mi escuela, no puedo creer lo que estoy viendo. Sigo pasando las hojas y de pronto una palabra me deja sin aliento, "asesinato"; me pongo frenética apenas mis ojos se chocan con esas letras, comienzo a hojear con más rapidez, los nervios me están ganando, mis manos tiemblan, en realidad todo mi cuerpo está temblando. En medio de los papeles encuentro una carta de Derek dirigida a mi padre, en ella le dice que su vida ha sido destruida gracias a él y que pronto pagara las consecuencias con la misma moneda.
¿A qué se refiere con todo esto?, no puedo creer que Deek haya querido hacerle daño a mi familia, no es la persona que creí que era, la rabia me inunda, esto no se va a quedar así, yo de aquí me largo pero no sin antes empaquetar un regalito para Gwen.
Derek:
Hay como cincuenta personas frente a mí, sus miradas me juzgan, puedo sentir la desconfianza y el desprecio. En primera fila se encuentran Magy y Diego que me miran de la misma manera que los demás.
—Bien Derek, ya sabes porque estas aquí, así que confiesa la puta verdad, ¡¿Quién es la protectora?!,— me dice Magy con los ojos saliéndose de su órbita. Durante todo el camino he estado pensando en lo que voy a decirles, me ha costado pero finalmente he tomado una decisión, antes de hablar me aclaro la garganta y recorro la mirada por los rostros de todas las personas frente a mí.
—sí, se quién es la infiltrada— digo y siento como un temblor recorre mi cuerpo, se escuchan suspiros de sorpresa entre la multitud, Diego niega con la cabeza mientras me mira decepcionado— pero no puedo decirles quien es, mi familia está en peligro— les digo esperando entiendan la situación.
—¿A qué te refieres con que tu familia está en peligro?, ¿es por eso que me llamaste para lo de los micrófonos?— pregunta Magy acercándose a mí con los brazos cruzados.
—Sí, miren es muy riesgoso que hable de esto, les juro que mi familia está en peligro, tienen amenazada a Carly, en ella hay un localizador imposible de quitar, así que si hago cualquier movimiento en falso en cinco segundos tendrán a todas las tropas del gobierno aquí y se la llevaran para siempre— al contarles lo que sucede siento como mi voz suena desesperada, esto no es lo que había planeado decir.
—Lo hubieras dicho antes— dice Diego preocupado.
—Es que tienen que entender que si Gwen se entera que estoy hablando de esto con ustedes cumplirá sus amenazas.
—Esperaba que esa fuera la razón por la que nos has ocultado semejante información, pero tengo buenas noticias para ti querido Derek. Finalmente he descubierto como sacar los localizadores— me dice Magy sonriente, quiero aparentar emoción por la noticia pero lo único que siento es preocupación, ¿Qué se supone que voy a hacer con Emma?
—¿Y porque no me lo habías dicho?— le pregunto para disimular mi inquietud.
—Porque lo acabo de resolver hace una hora. Trae a Carly de inmediato les sacaremos a ti y a ella el localizador, después a ella la llevaremos a un lugar seguro, entonces podrás contarnos quien es la infiltrada para que la convirtamos en rehén de una vez por todas y así le enseñemos a esas estúpidas protectoras quien manda— dice Magy levantando su brazo derecho en el aire, el resto del grupo imita su acción y la acompañan con gritos de festejo. Por mi parte me siento inmensamente aliviado por poder sacar a Carly de peligro pero Emma sigue siendo un problema, no sé qué voy a hacer con ella, quizás es mejor que se vaya y yo inculpe a Roky, el problema es que estoy completamente seguro de que Gwen no nos dará ninguna información a cambio de la vida de Roky, Emma es quien en realidad vale para ella.
Tengo que decidir entre cumplir mi plan o salvar a Emma de las torturas que planean los protestantes desde hace meses.
Emma:
— ¡ya cállate! — le grito a Carly que no para de llorar.
Por suerte Kalem ha salido de casa eso me da tiempo de sedar a su hermana y sacarla de aquí sin tener que escabullirme, mientras saco las micro agujas y el sedante del compartimento oculto de mi maleta, no puedo evitar sentir satisfacción al pensar en hacer sentir a Derek como él me ha hecho sentir por todo este tiempo: abandonada, sola y traicionada. Maldito psicópata, ¿cómo se le ocurre querer asesinar a mi padre?, ¿Cómo se le ocurre abandonarme y luego quitarme a mi padre? Es tan duro darse cuenta que la persona que más quisiste no es quien pensabas, que desgarrador es pensar que Luke ha pensado en quitarme a mi padre. Maldito, lo odio.
Las micro agujas están cargadas con el sedante, mientras me acerco a Carly ella me mira con los ojos rojos y llenos de miedo, siento lastima por ella pero crecerá mejor al cuidado de la orden, de todos modos nunca recordara a su familia, no sufrirá, esta angustia será solo temporal para ella pero para Derek será una angustia eterna, jodidamente eterna. Una sonrisa se dibuja en mi rostro cuando clavo las agujas en el brazo de Carly.
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Si les está gustando la historia me gustaría que me lo hagan saber para que la siga subiendo 💕 ¡Gracias por leer¡