Hyoudou Ise a avanzado en su viaje para adquirir el título de Rey del Harem, siendo más que un sueño, una promesa. Ganándose el cariño de sus compañeros, y sus semejantes.
Siendo por mucho, el Sekiryuutei más amable, generoso, considerado y más pervirtiendo en toda la historia.
En estos días de vacaciones, Ise fue a visitar a su Tío Celeris, esperando contarle todo lo acontecido, trayendo le una botella sellada de su licor favorito, mientras el se sienta a hablar frente a la lápida de Kuki Celeris.
Solo, se quedó frente a la lápida todo el día, parecía que había mucho que contar.
Y aunque lo sabia, las chicas habían estado espiando a Ise todo el día, pues no dijo a donde iría, y les hizo pensar que iría a espiar otra vez.
Por un lado, las tres de la Iglesia entendieron que aunque sea un Demonio, le da tributo a los mortales.
En especial a la familia.
Akeno entendía el sentimiento, como él, ella tiene un gran aprecio hacia su madre, y por eso entiende que Ise tiene un gran apego a su tío, que Dios lo tenga en su gloria.
Koneko miraba a su Sempai, y solo veía a un chico que fingía, era como si ella fuera la única capaz de ver como Ise estaba llorando desde adentro de su alma.
Rias por otro lado, jamás había visto o conocido a un Demonio que fuera tan fuerte como para muchas cosas como la guerra, pero para con la familia ser un llorón.
Mientras que del otro lado del lugar, Sona Sitri junto a su Peon Saji, ven a Ise haciendole oraciones a su difunto Tío, otra víctima de la guerra.
Saji quería ir a hablar con el, pero Sona le detuvo con la mano, y con la mirada que se movía en expresión de 'No'.
"¡Sate, sate, sate... creo que ya es hora de regresar a casa!"
Dice luego de estirarse, y dejarle una taza con el licor a la lápida de su Tío.
"Gracias, Tío Celeris, tu siempre has sabido dar buenos consejos!".
Y fue todo.
Al ascender la luz de la luna, Ise fuera casa, sin embargo.... Rias y las demás llegaron antes que el, y lo esperaban con una banquete.
Pero jamás regresó.
¿Por qué?
Eso fue hace tres días.
Ise desapareció regresando a casa.
Rias Gremory hizo todo en su poder para buscarlo en Kuo, mientras su Hermano hizo lo mismo en el Inframundo, Azazel el mundo entero, y Michael en los cielos.
Pero no hubo resultados.
Entonces un día, luego de darlo por secuestrado, o peor, Rias abrió la puerta, e Ose estada del otro lado, estaba hay, tirado en el suelo.
Según la propia Asia, Ise tenía todas sus costillas rotas, el brazo derecho dislocado, la perdida de algunos dientes, muchos raspones, y heridas fatales, quemaduras de tercer grado, una muy agresiva hemorragia interna, así como la posible pérdida del ojo izquierdo.
"Pero, ¿qué significa esto?"
Fue la primera de tantas preguntas por parte de Rias, mientras Azazel trataría de hablar con Welsh Dragón.
Su brazo de Dragón ya era difícil de esconder, pues ya era parte de su piel.
Estuvo así por semanas.
Y fue entonces que Ise en estado comatoso, recibió una visita Divina.
Siendo el cálido toque de una mujer.
"Ise. Haz lo que quieras conmigo. Pero no te olvides de esto. Siempre me tienes a mí. Te prestaré mi fuerza. Por el bien de tu futuro".
Entoces una luz lleno todo el cuarto.

"Ise. Lo que llegue a suceder, yo siempre...".
Robando sus labios, algo se transfirió a él, un resplandor dorado, que causó que la Boosted Gear desapareciera, recuperado su brazo izquierdo.
Mientras la dama desaparece en su luz.
E Ise que se queda así, hasta que sale la luz de día.
Entonces se levantó sin dolor alguna.
"Una determinación inquebrantable".
Eso pensó, e Ise se preparó para lo que viniera, pero....
¿Cómo explicar lo que pasó en esos 3 días?
La respuesta a eso fue; "No tengo idea".
Al abrir las puertas, Ise recibió el inesperado abrazo por parte una desconocida Asia que en cuanto lo vio despierto, y de pie, rompió en llanto.
Llamando la atención en toda la casa.
Con la llegada de los demás integrantes de la Nobleza Gremory.
Entre ellos, Rias que en cuento se puso frente a el, le dio una fuerte bofetada.
"......"
Todos, hasta Ise se sorprenden por su acción, también fuerte fue la bofetada que le dejó la marca de la mano en su mejilla.
"¡Itte!"
Sobandose la mejilla, este se pregunta, ¿qué carajos?
Nada se dijo, y así estuvo la situación todo el día.
Rias no podía ni verlo a los ojos, pero los demás parecíamos preocupados por el.
Pudo intentar hablar con Rias, pero ella no se lo permitía, y fue entonces que Akeno se metió en este conflicto amoroso.
Esa misma tarde, una hermosa Akeno salió de otra habitación y vio a Ise de pie en la puerta. "¡Hola, Ise-kun! Tengo un té listo para ti." Señaló una taza de té que estaba en la mesa frente al sofá.
"Oh ... Gracias, Akeno-san." - Ise sonrió cuando vio aparecer a Akeno. Se sentó en el sofá y tomó la taza de té. Tomó algunos sorbos. "Entonces, ¿estamos solos aquí hoy? ¿Dónde están los demás?"
Akeno se rió y se acercó al sofá y se sentó a su lado. "Todas las demás chicas fueron de compras y no volverán hasta dentro de unas horas". Hizo algunos remolinos en su mejilla derecha con un dedo. "Kiba salió con algunos de sus amigos. Y Gasper se esconde en algún lugar de su caja."
Ise se sonrojó levemente ante esto. "Oh ya veo." Una vez que terminó con el té, colocó la taza sobre la mesa. "El té estuvo genial."
Akeno sonrió. "Gracias." De repente se levantó del sofá. "Vuelvo enseguida. No te muevas." Salió de la habitación por un breve momento.
Ise se rascó la parte posterior de la cabeza. 'Hmm ... Me pregunto qué pasa con Akeno-san.' De repente, tenía una expresión divertida en su rostro. -¡Quizá tenga algo caliente planeado para mí!
Unos cinco minutos después, Akeno regresó y ahora solo llevaba un sujetador negro junto con bragas negras. "¿Como me veo con mi nuevo atuendo, Ise-kun?"
Cuando la vio, la boca de Issei literalmente cayó al suelo. "¡Genial Moogly Googly!" Ahora tenía un gran bulto en sus pantalones, que era claramente visible para Akeno.
"Hoy va a ser ... diferente. Te recompensaré por todo tu arduo trabajo". Akeno se acercó seductoramente al sofá con una sonrisa sexy en su rostro. Cuando llegó a Ise, se sentó directamente en su regazo, frente a él. Se movió para hacer que el bulto de Ise se moviera hacia las mejillas de su trasero.
'¡M-Mierda ...!' Ise no pudo controlarse. "Yo ... yo uh." Ise no pudo hablar correctamente.
Akeno sonrió y se inclinó para susurrarle al oído. "¿Estás lista para la mejor mamada de mi vida ?"
Ise ahora estaba rojo como un tomate. Miró a los ojos de Akeno y pudo ver lujuria en ellos. Decidió ser un hombre. "... ¡S-Sí, lo soy!" Su bulto se hizo aún más grande. '¡Demonios, sí, finalmente estoy listo para una maldita acción!'
Akeno se rió. Comenzó a frotar el pecho de Issei con ambas manos. Yendo un poco más lejos, plantó dulces besos en Ise, comenzando con su cuello y haciendo un rastro, yendo hasta su vientre. "Espero que estés disfrutando esto". Hizo algunos pequeños rastros de besos más arriba y abajo de su pecho.
"A-Ah ... ¡ah! ¡Oho mierda!" - Ise se estremeció y jadeó por los encantadores besos de Akeno. '¡ ¿Esto realmente está pasando ?!'
"Empecemos ahora, ¿de acuerdo Ise-kun?" Akeno sonrió. Bajó las manos para desabrochar el cinturón de Ise, luego le desabrochó los pantalones.
Ise asintió de inmediato y tenía una gran mirada tonta en su rostro. '¡Mierda! ¡Esto va a ser increíble!
Akeno bajó los calzoncillos de Issei. "Oh mi ... eres tan grande." Ella se rió mientras miraba la gran polla de Ise. Envolvió una mano alrededor del eje y comenzó a moverla lentamente hacia arriba y hacia abajo.
"¡Oh ... oh wow ...!" Ise jadeó y gimió de placer. ¡Esta es la primera vez que una chica me pajea! Tan impresionante ~ '
"¿Te gusta esto? Te lo mereces." Akeno sonrió mientras continuaba acariciando su eje con un movimiento lento y suave. Su lengua provocó la sensible erección de Ise mientras lentamente deslizaba toda su polla en su boca. Chupó la cabeza ligeramente mientras acariciaba el eje de abajo a medio un poco más rápido ahora.
Ise gimió más fuerte ante la sensación de que Akeno lo complacía. '¡Oh mierda ...! ¡Esto se siente genial!' Cerró los ojos para disfrutar de todo el placer.
Akeno lamió arriba y abajo del eje, mientras también masajeaba las bolas de Ise. Ella comenzó a acariciar las bolas de Ise mientras chupaba lentamente la cabeza de su polla. Mientras aún acariciaba sus bolas, Akeno lamió la punta de su polla de un lado a otro. "¿Esta bien?" Ella preguntó esto entre lamidas.
El cuerpo de Ise se estremeció de placer y respiraba con dificultad. "¡Ah, maldita sea ... es increíble ...!"
"Puedo hacerlo mejor. ¿Crees que puedes aguantar?" Akeno comenzó a chupar lentamente la polla de Ise hasta la mitad del eje, luego lamió alrededor de su eje en círculo. Después de eso, movió su boca hacia la punta. Ella repitió esto varias veces, con una mano envuelta alrededor de la parte inferior de su polla para mantenerlo en su lugar.
"A-ah ... ¡Akeno-san! ¡Aahh!" La respiración de Issei se estaba volviendo aún más pesada. '¡Es cada vez más difícil aguantar ...!'
Usando su lengua, Akeno hizo remolinos alrededor de la cabeza de la polla de Ise. Hizo una 'O' con la boca y le chupó la polla como una piruleta. Mientras hacía esto, también acarició las sensibles bolas de Ise.
"¡Oh. Dios. Satanás!" - Ise gimió más fuerte. '¡Esto es AMMAAZZZING!' Se estaba divirtiendo más que nunca en su vida. "¡Oh Akeno-san ...! E-Esto se siente ... ¡oooh mierda, es tan bueno!"
Akeno se inclinó para tomar suavemente la bola izquierda de Ise en su boca, girándola en su boca con la lengua y luego chupándola. Después de hacer esto durante unos segundos, hizo el mismo tratamiento a la bola derecha de Ise.
"No tengo ni puta idea de cómo voy a aguantar tanto, ¡pero estoy muy contento de estarlo!" Ise tenía que agradecer sus poderes diabólicos.
Akeno volvió a poner la polla de Issei en su boca y colocó su mano derecha frente a su boca, bombeando y chupando con fuerza su polla. Usando su mano libre, estaba jugando con sus bolas.
Ise abrió la boca para decir algo, pero no lo hizo. '¡Mierda! ¡Akeno-san es como un maldito profesional en esto! ' Su cuerpo se estremeció más y sus ojos estaban cerrados con fuerza. No podría manejar esto por mucho más tiempo a este ritmo.
Akeno comenzó a lamer hacia arriba y hacia abajo el costado del eje de Ise, mientras ella masajeaba su punta con un dedo. "Te vas a correr, ¿no?" Ella le sonrió.
"¡Urgh! S-Sí Akeno-san ... sí, me voy a correr ... ¡NOOOWWWW!" Ise gritó cuando su cuerpo finalmente cedió. Empujó su larga y dura polla en la boca de Akeno, lista para estallar sin control.
Akeno abrió los ojos con sorpresa por lo que acababa de hacer Ise. Trató de decir algo, pero fue amortiguado por la gran polla de Ise. "Mmmff."
El orgasmo de Ise fue increíblemente fuerte. La sensación de eyacular dentro de la boca de Akeno era algo que Ise no podía describir. "¡NAHAHAHAHA! ¡Oh, mierda, oh mierda! ¡OH M-Mierda!" No pudo mantenerlo dentro de su boca durante más de 5 segundos, porque la sensación era muy intensa.
Akeno intentó tragar la mayor cantidad posible de semen de Ise, pero fue una tarea difícil debido al tamaño de la carga. "Mmmmmppf!
Ise se estremeció y de repente salió de la boca de Akeno y roció lo último de su carga por todo el hermoso rostro de Akeno. "¡Ahhhhhh!"
"¡Ara ara!" Akeno se rió y le dio a Issei unas cuantas lamidas más. "Hay tanto. Mmmm ... Y es sabroso también. Tan espeso." Besó la punta y alrededor del eje mientras veía cómo se debilitaba.
Ise ahora estaba completamente sin energía. Casi se desmaya en el sofá. "Eso fue ... jodidamente asombroso."
Sin embargo, cuando creyó que era todo, algo llego a su mente, como un flash,
Recordo lo que pasó en esos 3 días.
Y así como lo recordó todo, una última cosa llegó, y se lo llevó ju to con Akeno que estaba cerca.
E Ise recobra la consciencia, tirado en el suelo, y en su brazo derecho, un especie de protector incompleto de brazo, y sujetando firmemente, una espada muy extraña que jamás había visto, ¿verdad?

Levantándose, Ise no sabe dónde demonios, está, solo sabe que está en una colina muy alta, y atrás de él, Akeno dormía inconsciente.
"¡Akeno-san!"
Grita con preocupación en su voz.
Y ella despierta con algo se molestia en la cabeza.
"Ise-kun, ¿Qué sucedió?"
Pregunta e Ise no sabe que decir.
Para cuando se levantan, ella reconoció el lugar.
"¿La Villa de los Héroes?"
"......."
Ise se pregunta como lo sabe. Y ella contesta.
"Solo escuchamos rumores, es un lugar neutral, bendecidos por habilidades que la humanidad jamás tendrá, siendo la espada de los Dioses antiguos".
Contesta Akeno, pero luego se tapa la boca al ver su brazo.
"¿Qué le pasa a tu mano?"
Siendo el brazo que tiene esa armadura.
"Desperte con esto en mi mado".
"¿Y esa espada?"
"No, ¡Ni yo lo se!"
Con muchas preguntas, y sin respuestas, Akeno está asustada por ese brazo, e Ise trataba de ocultarlo para no asustarla.
Sin razón alguna.
Ise escucha una voz en su cabeza que le susurra.
["Bienvenida al Infierno"]
Entonces un dolor se presentó en su cabeza.
Harto de esperar, Ise le dijo a Akeno.
"Akeno-san, iré y veré que sucede hay abajo".
Y ella se asusta.
"¡No! Por favor, no te vayas de nuevo, mi corazón no soportaría que jamás regresarás".
Dijo antes de romper en llanto.
Entonces otra cosa llegó, separándolos.
Ise termina cayendo hacia abajo, mientras Akeno se desmaya por la brutalidad y se queda tirada.
Por las propiedad de un Demonio, Ise se pudo levantar con pocos raspones y algo de dolor.
Y entonces al abrir los ojos, este nota que esa espada extraña le esta llamando.

"¡¡Tu nombre... es Brynhildr...!!"
Luego de razonar sobre su nombre, se llevó la sorpresa de que no estaba solo.
Como un súper instinto, Ie toma la espada y bloquea un ataque enemigo.
"¡Un miembro de la Aldea de los Heroes! ¡Nunca imaginé que vería uno tan lejos!"
"Me confundes, no sé que hago aquí, y no me interesa... solo deseo regresar a.... ¿--casa?"
La gente se sacudió al ver el rostro de su enemigo.
"Espera..... ¿tú eres--?"
Era una mujer, una chica con armadura, y una katana.

"No se que haces aquí, ¡pero debiste mantenerte lejos, Ise!"
Ella hablaba como si ya se conocieran.
"Espera, ¿cómo sabes mi nombre?"
En ese momento, la memoria de Ise se siente como una licuadora, todo mezclado.
Ella noto su sufrimiento, así como su rostro que reflejaba no saber quien era ella.
"¿Ya me olvidaste? No, fueron ellos, fue culpa de esos ancianos que recetearon tus recuerdos".
Entoces Ise hace uso de otra Espada, Ascalon.
Con ambas espadas, Brynhildr y Ascalon, Ise le daría lucha a una fuerte espadachin.
"Tienes que irte, Ise".
Esto no lo esperaba.
Menos que ella guardara su Katana, y le diera un abrazo con lágrimas en los ojos.
"E-espera... ¿quién eres?"
"Cuando nos volvamos a ver, contestaré todas tus dudas, pero tienes que irte, y olvida que estuviste aquí, por favor".
Esta chica lanza a Ise de regreso a la colina mientras el grita.
Ise cayó de nuevo donde había caído anteriormente con más preguntas que respuestas... - "¿Qué carajo sucede?"
Sin mas remedio, busca a Akeno, quien estaba inconsciente, la toma y se dispone a correr, tratando de regresar a casa.
Mientras esa chica extraña lo observa irse acompañado, lo que le dio algo de celos.
"¡Ise.....!"
Más adelante, Ise noto que tanto la Espada Brynhildr como ese guantelete se desvanecieron, pero sin ninguna idea de que era.
No hay forma fácil de explicar lo que pasó en una parte del mundo, entre la India y China.
Regresando a Kuo, Ise y Akeno no dejaron nada... pero antes de regresar a su vida rutinaria, Brynhildr le dijo un susurro.
"Si vas por este camino, iras al infierno".

-"El camino del que tu has elegido, solo llenara tu corazón de veneno".
Esa noche jamás la olvidaremos, fue el día que perdímos a un gran chico.
( ... Cambio de escena)
Todos se habían quedado estáticos frente a la repentina acción de Hyoudou Ise;
[Ise se estaba distanciando de todos, y lo que es peor, ninguno de ambos, ni Ise y ni Rias se dieron el perdón, mucho menos se hablaban]
Habían sido unas semanas complicadas para los chicos Gremory: mucho trabajo y discusiones amorosas, lo que provoco un distanciamiento poco agrato por parte de ambos. Ninguno lo decía pero se extrañaban con locura; ninguno lo admitía, Ise cuando la observaba solo podía pensar en besar eso labios rosas tan tentadores; que a veces no podía evitar mirarlos fijamente sin que ella se diera cuenta, acariciar esa blanca piel como la porcelana que le hacia hervir la sangre y ni hablar de lo que sentía cuando respiraba su perfume cuando llegaba la hora de dormir. Rias tampoco podía negarlo deseaba tonto besar esos labios que la volvían loca, acariciar cada músculo de su pecho, sentir su calido aliento estremecer su cuerpo; amaba que la besara, le encantaba sentir sus caricias y deseaba que...la hiciera suya como tantas veces lo había hecho en el pasado, con pasión loca, con infinita ternura... simplemente suya.
Pero ambos no sabían como tomar la iniciativa para arreglar las cosas con el otro, se amaban mas que nada, pero como decir: "Te extraño, te necesito, te amo"... ¿podría ser orgullo o no saber con aceptar que todo fue un malentendido? Que ya nada importaba, solo estar juntos como siempre desde que se conocieron, desde que se amaron.
Ambos pensaban y sentían lo mismo. Cundo llego la noche después de cenar Ise se dirigió a su estudio para hacer unas llamadas, mientras que Rias acostaba a su sobrino Millicas que vino de visita para luego ir a la habitación que compartía con su amado Ise.
Rias simplemente se cambio la ropa para ponerse su camisón y la bata, se dirigió lentamente hacia el balcón a observar la luna, perdiéndose en sus pensamientos...
-"Ise..."- dijo en un suspiro.
En ese mismo instante Ise luego de terminar de hacer sus llamadas coloco sus manos en su cabeza tratando de sacarse los problemas.
"¿Por qué todo es tan complicado?" - se dijo revolviéndose el cabello con rabia.
Luego de unos minutos se levanto se su escritorio para dirigirse a la habitación. Cuando llego a la puerta apoyo la cabeza en la misma y...
-"Rias..."- suspiro, y en la mente de los dos, más en la de Ise, razona lo único que funciona en su relación... pues ellos han estado unidos, por más que el destino.





Cuando entro la vio allí parada, hermosa y bajo la luz de la luna, pero no se atrevía a acercarse ni mucho menos a hablarla así que ingreso al baño.
Ella solo sintió el ruido de la puerta y se abrazo asimisma, sentía un escalofrío recorrer su espalda. Mientras tanto el se mojo el cabello y mirando su reflejo, unos pensamientos cruzaron por su mente.
-"La amo, me ama. Soy suyo y es mía. Nada mas importa..."- entonces salio y la observo aun contemplando la luna.
Se acerco lentamente adonde se encontraba su mada Rias, la mujer que amaba, abrazándola delicadamente por su cintura. Ella solo se quedo allí sintiendo los brazos de el mientras la rodeaban y el latido de su corazón en su espalda, perdiéndose en ese abrazo. El suspiro en su cabello lo que le provoco un dulce escalofrío a Rias y causo que cerrara sus ojos sintiendo el olor a su perfume inundarla por completo.
Mientras que su esposo rozaba tenuemente su cabello con sus labios para bajar por su cuello hasta su hombro. Esta débil caricia causo una ola de sensaciones en ella, los calidos labios de su marido recorriendo su piel.
Lentamente Ise la volteo para que lo mirara, se perdieron en la mirada del otro, mientras el acaricio tiernamente la mejilla de su mujer. Sin decir nada, ninguno pronuncio ni una sola palabra...la verdad no hacia falta en ese instante.
- "Dios eres tan hermosa, que no resisto el no tenerte..."-pensó el cuando con su dedo bordeo los labios rosas de Rias mientras los miraba fijamente. Ella se ruborizo ante la intensa mirada de Ise.
Ninguno soportaba estar alejado del otro, así que se besaron. Fue un beso lleno de amor y ternura de parte de ambos, un beso donde transmitieron todo el amor que se profesaban.
-"Te amo...solo quiero estar contigo." -fugazmente se dijo a si misma mientras se entregaba mas a ese beso llevando lentamente sus manos al fuerte cuello de su esposo para así rodearlo.
Cuando se separaron; porque necesitaban aire, y se miraron a los ojos vieron un brillo especial en la mirada del otro; un anhelo... mas que eso un deseo, buscaron una vez mas los labios de otro casi con desesperación, con una pasión incontenible. Un suspiro de alegría se hizo presente cuando sintió que su esposo levantaba su cuerpo para conducirla hacia el lecho que compartían sin romper el apasionado beso.
Ise la deposito con sumo cuidado en la cama mientras la miraba profundamente y se perdía en esa mirada esmeralda que tanto adoraba desde que la conoció en su infancia, mientras tiernamente apartaba los mechones de cabello castaño de su rostro. Rias por su parte acariciaba lánguidamente la espalda del hombre que amaba, a la vez que tenuemente se sonrojaba al notar la mirada de marido. Ambos deseaban perderse en el otro sin miedos, dudas y rencores... solo amarse.
"Me miras tan fijamente que me siento desnuda ante tu mirada. Te extrañe tanto todo este tiempo que estuvimos alejados que sentía que moría, como vivir sin ti si eres mi propia vida. Suspiras y me provocas escalofríos, dulces escalofríos en mí; tu mano recorre mi piel y la siento arder.
Siento tu cuerpo sobre el mío, siento el latir acelerado de tu corazón junto al mío. Se que nadie me haría sentir todo este océano de sensaciones que haces surgir en mi.
Aunque ya son años de casados, de estar juntos siempre es como la primera vez, como la primera noche que demostramos nuestro amor.
Eres mi amado, mi vida eterna...mi amante".
Con leves caricias Ise comienza a despojar a su mujer del camisón de seda que usaba, besando su cuello, hombros y cada centímetro de piel que va quedando expuesta a el. Mientras que las gentiles manos de Rias empiezan a desabotonar la camisa de el, acariciando dulcemente el pecho de este casi soñadoramente.
El camisón y la camisa yacen en el piso, las manos de joven, recorren la exquisita figura de su joven esposa produciendo ligeros gemidos de parte de ella, que son como música para sus oídos. Mientras deposita apasionados besos en su frágil cuello y hombro.
Por parte de Ise.
"Te adoro. Nunca hubiera pensado que terminaríamos así cuando nos conocimos siendo niños, pero no puedo ni quiero evitar sentir lo que siento por ti.
Siento tu aliento en cuello y me vuelvo loco, loco por hacerte mía y que de alguna manera ser tuyo. No soporto el estar lejos de ti sin ver tus ojos, sin besar tus labios sin tenerte en mis brazos. Darte todo lo que soy, mi ser te pertenece. Perderme en tu cuerpo sin importarme el ayer o el mañana. Solo vivir este momento contigo.
Estos interminables días solo han sido sufrimiento para mí y juro que jamás permitiré que nos alejemos otra vez. Porque nos pertenecemos.
Mi compañera, mi mujer...mi amante".
Rias se aferro a sus hombros y sintió como el mundo a su alrededor desaparecía. Los pechos expuestos de la mujer se encontraron con las palmas anhelosas de Ise que no tuvo la menor duda de acariciarlos y besarlos dulcemente, mientras ella arqueaba su espalda por el contacto de su esposo.
Mientras se tocaban el uno al otro, recorrieron sus cuerpos, reconociéndose en cada caricia recibida, en cada beso dado con arrebato. Entonces la fuerza de la pasion, amor y deseo se apoderaron de ellos, como siempre ocurría. Y es que era una danza que siempre les salía muy bien.
Recorriendo el increíble torso de su esposo, Rias llego hasta su cadera para desabrochar la hebilla del cinturón, despojándolo de las últimas prendes que tenia. Estaban amándose mudamente, porque no necesitaban más que al otro no había necesidad de palabras, al menos en ese momento.
Cuando el momento decisivo llego sin dejarla de mirarla a los ojos lentamente Shaoran se fue adentrando en su cuerpo provocando que Rias respirara agitadamente y soltara leves gemidos. Mientras pensaba...
-"No sabes cuanto te eche de menos"
Lentamente Ise aumento la velocidad de sus envestidas haciéndolos suspirar a ambos de placer, mientras Rias de aferraba fuertemente a la espalda de el soltando jadeos en su cuello lo que lo enloquecía. Mientras que Ise escondía la cabeza en el hueco entre el cuello y el hombro de la esmerarla sin poder reprimir los jadeos provocados por sentir el húmedo y calido centro de ella oprimiéndose en su miembro.
Cuando el clímax llego ella dejo salir un sonoro gemido, aunque algo ahogado por el beso del castaño. Ise se desplomo sobre el cuerpo de su mujer, por supuesto sin lastimarla tratando de recobrar el aliento. Rias solo busco besar el lugar más cercano del rostro de su marido que tenia, así que beso tiernamente su mejilla cerca de su oído. El movió levente la cabeza para rozar ligeramente sus labios con los de la castaña.
Minutos después el joven esposo estaba acostado boca arriba con la castaña sobre su pecho, entrelazando sus dedos sobre el estomago de este, mientras acariciaba con su mano libre la espalda de Rias. Luego de unos momentos Rias soltó su mano para alzar un poco su rostro para poder mirar a Ise.
-"Ise, yo..."- intento decir pero el la callo poniendo un dedo sobre sus labios.
-"shhh"- dijo el mientras acariciaba sus labios-"no digas nada, ya no importa"
_"pero..."
Entonces el ambarino la estrecho mas contra su cuerpo, mientras ella cerraba los ojos por la cercanía de este. En un rápido moviendo del joven, y para sorpresa de su esposa, este quedo aprisionando el cuerpo de ella entre el suyo y el lecho.
-"No voy a permitir que te vuelvas a alejar de mi"- dijo con una voz ronca mientras acaricia la mejilla de la esmeralda.
_" No tengo intenciones de hacerlo"- pronuncio en un suspiro cuando sintió las calidas caricias de Ise nuevamente sobre su cuerpo.
Se miraron intensamente diciéndose todo lo que sentían, mientras sus manos recorrían el cuerpo de otro con tenues caricias, se siento morir cuando noto la sonrisa de su amado mientras este se acercaba lentamente hasta sus labios por instinto cerro sus ojos esperando que la besara, pero el beso se hacia esperar así que Rias abrió los ojos notando que su marido aun sonreía. Solo lo contemplo por un segundo hasta que rodeo su cuello y lo obligo a que la besara.
-"No creo que durmamos demasiado esta noche, ¿no crees?"- dijo cuando se separaron por aire mientras la miraba dulcemente.
-"No tengo objeción con eso"- dijo picadamente acariciando su trozo.
Definitivamente ninguno dormiría seria una noche de amor y entrega para los amantes. Una noche de pasión y anhelos...no había razón para dormir, no había razón para dejar al otro dormir, se harían el amor hasta caer rendidos...seria una maravillosa noche demostrándose su amor.
Tal vez maté el momento, pero al dormir, Ise empezó a recordar todo lo paso en esos 3 días.
Entoces Ise escucha esa voz fastidiosa diciéndole.
"Tienes que elegir, no puedes tener los dos, elige;
¿tu familia? O ¿tu amada?"
"¡No! Tu no me das a elegir, yo soy quien decide, yo decido... y los elijo a todos... prefiero tenerlos a todos... los quiero a todos... es mi capricho, lo quiero todo, quiero mujeres, dinero, el mundo, y lo que yacía más haya del mundo".
Inconsciente, su decisión activo algo, a lo que Ise llamo.
"¡¡Mi Propia, Espada de Damocles!!"