Cuando la madre Tonantzin llegó al comedor se sentó en una mesa mientras Marie estaba recostada en su pecho.
"Marie que es lo que quieres comer?"
Marie abrió sus pequeños ojos "Cualquier cosa está bien madre Tonantzin yo no tengo gustos particulares solo que prefiero la salsa verde que la roja."
La madre Tonantzin negó con su cabeza hasta que se percató que un joven soldado se acercó a ella "Que es lo que desea ordenar diosa."
"Ya es algo noche me gustaría algo ligero para cenar, un cóctel de frutas y un chocolate caliente será todo para mí.
En cuanto a la pequeña Marie traigan una pieza de pollo en mole verde y una agua de horchata."
El soldado asintió y salió hacia la cocina pero en ese momento el tiempo se detuvo por completo.
La madre Tonantzin frunció el ceño "Lucifer sabes que es de mala educación interrumpir a la gente cuando está preparándose para cenar.
Además no tienes un país que supervisar."
Una risa salió de la oscuridad mientras aplaudía "Si te refieres a estados unidos, deje a beelzebub a cargo de la nación.
Además solo vengo a visitar a la hija de un amigo, sabes que encerrar la estatuilla de Amatlein fue un verdadero dolor.
Literal tuve que entrar con el viejo a el limbo una zona abandonada de la mano de cualquier cosa divina o mortal.
Pero en el camino nos encontramos con ella."
Lucifer apareció en una bruma negra a una mujer joven de cabello castaño y piel blanca la cual parecía estar durmiendo.
"Si la analizas un poco sabrás por qué debería ser importante esta mujer para la pequeña Marie y nuestra pequeña invitada acosadora."
De entre las sombras salió Hexe "Eso no es justo Lucifer, por qué pudiste localizarme sin mucho problema."
Lucifer sonrió "Pequeña Hexe te hace falta perfeccionar las técnicas de las sombras de los inmortales que te enseñó tu padre.
Pero vas por el buen camino, ahora me gustaría que pudieras analizar a esta bella mujer que encontramos en el limbo.
Tiene una suerte que incluso puede desafiar los estándares divinos, quedó atrapada entre dos realidades protegida por la piel de una bestia del Limbo.
Las probabilidades de que algo como eso ocurran no existen pero ella muestra que algunas veces pueden pasar las cosas menos inesperadas."
Hexe miro a lucifer con algo de duda y se acercó a la mujer que estaba sobre una mesa y puso su mano en la frente de la mujer.
El rostro de Hexe mostró sorpresa y algo de duda "Madre Tonantzin mi padre tuvo alguna hermana por qué está mujer es hermana de mi padre."
La madre Tonantzin se levantó junto con Marie y tocó la mano de la mujer "Creo que Quetzalcóatl sabrá decirnos a qué se debe esto.
Pero dime lucifer por qué querías darnos a la hermana de Flavio y no pedir nada a cambio."
Lucifer mostró una sonrisa malévola "Claro que no hay nada gratis en esta vida.
La mujer está embarazada y tendrá a mi hijo, me gustó tanto hablar con Flavio que creo que me excedi con su hermana.
Pero más que un cobro es un premio ya que la mujer estará bajo mi protección y su hijo también lo estará, solo que espero que puedas cuidar de ella ya que de otra manera mis hijos pueden matarla.
Los problemas de familia siempre son los peores antes de que se me olvide, Marie y Hexe tengo algunos regalos para ustedes."
Lucifer apareció una pequeña daga de color negro y la puso en las pequeñas manos de Marie para después aparecer una espada y dársela a Hexe.
"La daga pertenecio a su tío Hades desconozco por completo cual sea su función pero debe de ser alguna baratija que no tiene valor para mi.
En cuanto la espada pertenicio a Caos, el dios primordial de ustedes los dioses griegos.
Tampoco tengo idea que pueda hacer esa espada pero es basura sin valor, de ustedes dos dependera saber que es lo que hacen con ellas y recuerden cuidar a su tía.
Las intentare visitar quizá cada que pueda, no garantizo nada pero es hora de irme.
Puedo sentir que dos basuras están peleando en indianápolis, la última vez que pelearon destruyeron la mitad sur de illinois por completo."
Lucifer desapareció en una bruma negra y Hexe y Marie se quedaron viendo a la mujer que estaba en la mesa.
Marie suspiro "Hermana somos de familia numerosa o es normal que aparezcan familiares siempre."
Hexe negó con la cabeza "Si algo como eso pasara quizá tú y yo tendríamos una vida medianamente normal.
Madre que haremos con esta mujer, que sea hermana de mi padre no significa que tenga contacto con ella.
En los recuerdos que pude ver cuando me estaba creando ella no figuraba como su familia."
La madre Tonantzin suspiro "La tendremos que llevar a nuestra casa ya que es un familiar de ustedes y de Flavio.
Solo espero que nos diga de dónde viene y cómo llegó al limbo, ese lugar es la zona más peligrosa que uno pueda visitar."
Marie trago algo de saliva pues la voz de la madre Tonatzin era algo sería "Ese lugar suena más peligroso que dejar la llave del gas abierta con la gente mala.
A un puedo recordar sus pedazos de carne volando y pegándose en las paredes."
La madre Tonantzin le dio un beso en la frente a Marie "No tienes que preocuparte el Limbo es un lugar que no se va a mover la única manera de llegar es alterando algunas cosas de la realidad pero por su seguridad solo cuando sean adultas les enseñare como hacerlo.
No espero que entren alguna vez pero saber entrar al limbo quizá alguna vez salve sus vidas.
Bueno antes que volvamos el tiempo a su cauce normal les enseñaré cómo guardar los regalos que les hizo Lucifer."
La madre Tonantzin tomo el hombro de Marie y de Hexe "Voy a usar mi energía divina para guiar su propia energía con esto ustedes podrán guardar el revólver que les dio Quetzalcoatl y el arma que les dio Lucifer.
Para liberarla después lo harán de la misma manera, recuerden que pueden guardar cualquier cosa incluidos seres vivos pero nesecitaran un control perfecto de su energía divina."
Marie y Hexe pudieron sentir como por sus hombros entraba una energía la cual era cálida y las hacía sentir como si estuvieran en las manos de Flavio, incluso Marie pudo recordar a un joven de cabello negro quien la sostenía en sus manos.
Esto duró por algunos segundos hasta que pudieron sentir como en sus manos se creaba una especie de agujero que absorbió sus dos regalos.
Podían sentir que de alguna manera se encontraban dentro de ellas sus regalos era como si fueran una especie de pensamiento.
La madre Tonantzin sonrió y abrazo a Marie y Hexe "Lo hicieron muy bien ahora solo tienen que pensar en su arma y pensar que la tienen en su mano."
Marie y Hexe asintieron mientras concentraban sus pensamientos en sus manos, al mismo tiempo las dos pudieron aparecer sus armas.
Hexe apareció su espada mientras que Marie apareció su daga, siguiendo las mismas enseñanzas de la madre Tonantzin las dos lograron guardar sus armas usando su energía divina.