Aurora viajó en el asiento trasero del taxi y mirando el centro de la Ciudad Zerzura, suspiró.
La taxista que conducía, le estaba dando una mirada desde que ella se subió y era muy posible que no se tratara porque la reconoció.
"¿Una cita importante?" Preguntó la taxista y al ver que ella asentía, señaló. "Te ves muy guapa, lo deslumbrarás."
Ella se avergonzó un poco.
"Gracias… Eso espero." Murmuró Aurora en respuesta logrando que la taxista se riera al verla algo ruborizada.
No debió haberle dicho a Nicole que tenía una cita, ya que hizo que esa jovencita demostrara que no solo era una feroz luchadora, sino que también una empedernida romántica.
Tras saber sobre la cita no le preguntó quién era o qué tipo de persona era, solo se conformó cuando ella le dijo que era alguien guapo y muy agradable.
Sin embargo, como una romántica empedernida se acercó a ella y la ayudó a elegir el estilo que ahora estaba utilizando.
Para acentuar su inocencia y su figura 'delicada', Nicole había elegido un vestido blanco que daba la sensación de simplicidad.
Según ella combinaba con sus ojos y su cabello negro, pero Aurora dudaba.
Su estilo era de usar ropa cómoda y era su amiga quien le gustaban los vestidos de esta clase, así que no era una profesional en el tema estético.
Mirándose en su reloj holográfico que proyectaba su imagen, ella volvió a suspirar.
Había querido deslumbrar a Kairos y era por eso que decidió aceptar la ayuda de Nicole, quien era tan novata como ella en estos temas.
Usar el vestido que llevaba, los accesorios y prácticamente todo el conjunto que la otra parte seleccionó, fue el precio que tuvo que pagar para obtener lo que deseaba.
Mirando los edificios pasar, Aurora dio una pequeña sonrisa.
Estaba atardeciendo y si bien era algo temprano para una cita romántica, en realidad era Kairos quien estaba a cargo de dirigir la cita.
Muy posiblemente tenía un itinerario y ella ya se estaba emocionando.
El taxi se movió entre medio de la ciudad con un ritmo más lento debido al tráfico y entonces, se estacionó en la entrada de un gran hotel.
Ella pudo ver al otro lado a Kairos esperándola y cuando él se dio cuenta de que ella estaba en este taxi, se acercó para abrir la puerta.
Aurora bajo lentamente prestando bastante atención a su mirada.
"Gracias." Dijo con su sonrisa más encantadora.
Kairos se quedó en blanco al mirarla, parpadeando con una mirada fascinada.
¿Quién dijo que no tenía puntos de encanto?
Aurora se rio suavemente al ver a ese joven atónito mirándola de forma tan entusiasta y hechizada.
"El taxi debe irse." Le recordó Aurora con una sonrisa.
"Oh, si… Lo siento." Respondió Kairos cerrando la puerta con cuidado y volviendo a mirarla, declaró. "Estás hermosa."
Su tono fue serio y a pesar de que Aurora esperaba que él se sonrojara, en realidad la sinceridad y la fuerza de su halago fue tan serio que su tono cambio por completo.
Era esas clases de pensamientos que salían sin que se diera cuenta.
Aurora se sintió tímida al escuchar ese halago lo que hizo que la otra parte se diera cuenta de lo que acababa de decir y se avergonzara.
"Tú también te ves guapo." Dijo Aurora tratando de volver a tomar cierto control.
Le gustaba liderar y ser quien daba los halagos… Básicamente no le gustaba ser quien se volvía tímida.
Kairos estaba bien vestido, llevando una camisa que estaba en la línea de informal y formal, logrando que se sintiera que asistía a una cita importante, pero no a una reunión de negocios.
Sin embargo, él lograba atraer algunas miradas de los alrededores y todo se debía a que era muy guapo.
Ambos se quedaron mirando entre ellos y luego se rieron.
Aurora notaba que su acompañante estaba tan nervioso como ella y eso la hizo sentir más relajada.
Estaba claro que la otra parte no tenía experiencia y tal pensamiento la alegro.
Sin experiencia hizo que ambos parecieran novatos y exploraran este nuevo camino que era conocer a otra persona.
Con su incomodidad, la vergüenza y el disfrute que ello, conllevaba.
"¿Qué tienes preparado?" Preguntó Aurora y dando una sonrisa, declaró. "Estoy bastante emocionada por hoy."
Tales palabras lograron que Kairos sonriera de forma animada.
"¿Te gustaría hacer algo en especial?" Preguntó Kairos y al ver su mirada, dio una media sonrisa y señaló. "Tengo algunas cosas preparadas, pero no sé si es de tu agrado."
Seguía bastante nervioso… Aurora se dio cuenta de ello y dio una sonrisa entretenida.
"Podemos hacer lo que desees. Hoy he venido bastante permisiva." Respondió Aurora sin ocultar su emoción.
Normalmente se opondría a acciones que fueran costosas o problemáticas, pero ahora deseaba disfrutar de su cita y divertirse.
Deseaba distraerse, apartarse de las noticias, el trabajo y concentrarse en conocer a ese joven.
"Me han dado bastantes consejos para esta cita." Dijo Kairos y al ver la curiosa, explicó. "Mis asistentes me guiaron. Uno de ellos me dijo que hiciera algo simple y el otro me recomendó ser ostentoso."
Ella no fue la única que logro conseguir consejos y tal pensamiento hizo que su sonrisa se elevara.
Afianzándose cada vez más al ver la expresión seria de Kairos.
Se estaba tomando muy seriamente este 'trabajo' y la dedicación fue algo que a ella le gusto.
"¿Cuál consejo tomaste?" Dudó Aurora sin que su sonrisa se redujera.
"Un poco de cada uno. Esta es nuestra primera cita y quiero que sea agradable, más que memorable." Respondió Kairos y señalando el camino, preguntó. "¿Vamos?"
Está actuando como un caballero que estaba tomando una importante tarea con total dedicación.
Aurora sonrió y lo siguió.
******
Nicole siguió a Alice hacia una mazmorra.
Era una mazmorra temporal que apareció en un almacén cerca del aeropuerto de la Ciudad Zerzura y las autoridades estaban ya a cargo.
Quienes se encargaban de asegurar el área era la policía con usuarios de habilidades, luego estaba los encargados de verificar el peligro del portal y enviar drones al interior para recopilar información.
Al llegar a la entrada un policía verificó la identidad de Alice y la dejo pasar señalando al encargado de la mazmorra.
"¿Ustedes dos serán quienes se encarguen?" Dudó el encargado de la mazmorra y revisando sus historiales al frente de ambas, comentó. "Las dos son de rango A y esta mazmorra es de rango B, ¿podrán?"
Nicole había actualizado su rango, pero Alice todavía seguía sin actualizarlo y el problema fue que ese hombre no la reconoció.
Estudiante de la Academia de Héroes, una de los rangos S en el torneo internacional y aquí en Zerzura, era una de las 'Protectoras de Zerzura'.
Era muy posible que Aurora fuera más conocida que Alice, al menos que esta última dejara ver sus habilidades.
"Tengo autorización del sistema de protección. Puedo hacerme cargo." Respondió Alice proyectando una imagen que hizo que el encargado asintiera con solemnidad.
La Ciudad Zerzura tenía un complejo 'Sistema de Protección' que se encargaba de la protección y seguridad de la ciudad y sus alrededores.
Drones, análisis, satélites, comunicación y decenas de otras tareas eran llevados a cabo por ese sistema controlado por una IA avanzada.
Encargado de la distribución de mazmorras a los diferentes gremios, grupos de aventureros y organizaciones, ese sistema computarizado ayudaba en muchas áreas y mantenía todo en orden.
Ahora con mostrar la autorización del sistema de protección, hizo que el encargado guardara silencio sobre su rango o sobre si se podrían encargar de la mazmorra.
Nicole se preparó con su traje de combate y cuando miró a Alice, ella sacó una bolsa de papitas.
"…"
Ella y el encargado se quedaron en silencio al ver que ese fue su único preparativo.
Esa jovencita le hizo una señal para que la siguiera y ambas entraron al portal.
El encargado le había pasado la información de los drones, pero Alice ni siquiera los miró y se adentró.
Tras unos pasos, su visión se estabilizó y llegaron a una gran cueva verde.
Algunos árboles estaban por los alrededores y había bastantes lianas por todas partes, pareciendo una pequeña selva.
"Gahh…"
Un lémur furioso asaltó directamente a ambas y antes de que llegara a la mitad del aire, una lanza lo dividió a la mitad.
Con el cadáver partido a la mitad, la sombra bajo los pies de Alice se movió y tragó las dos mitades.
"Quiero acabar con esto pronto, así que me encargaré de todo." Dijo Alice con un tono simple.
Era una mazmorra temporal y si bien era de rango B, se iban a encontrar varios enemigos, Nicole creyó que su participación sería necesaria… Se equivocó.
Alice empezó a moverse y la sombra bajo sus pies se extendió por las paredes, los árboles y entonces cuando los lémures furiosos empezaron su asalto, decenas de brazos salieron.
Atraparon a esas criaturas, la cortaron y despedazaron, tan solo para cuando sus cadáveres cayeran al suelo fueran tragados por la oscuridad.
Sistemático y efectivo, Alice se dirigió por el túnel principal, limpiando todo a su paso.
La sombra se movía con ella y se extendía decenas de metros, lo que hizo que nada se acerca a ellas.
Sin piedad, Alice no necesitó mirar a sus oponentes o tratar de saber qué tipo era, solo los exterminó por completo.
Nicole había seguido a Alice no solo porque la otra parte había aceptado entrenar con ella, por el módico precio de una comida, sino que porque deseaba hablar de Aurora.
Luchar era una razón principal, pero estaba emocionada por la cita de Aurora y deseaba hablarlo con alguien.
Por supuesto, no sabía si Alice conocía sobre la cita, ya que Aurora era demasiado silenciosa.
Era por eso que había decidido hablar cuando la otra parte lo comentara, aun así, era emocionante.
Sin embargo, ahora al ver que Alice se seguía moviendo por los túneles en donde esos lémures salían en docenas, Nicole cambio su pensamiento.
Su concentración se dirigió a la sombra de Alice y a los cadáveres.
La sombra estaba guardando cada vez más cadáveres de esos lémures y eran un número bastante grande, pero el problema no era ese.
El tema que le robaba la atención a Nicole, era que cuantos más cadáveres tragaba, daba la sensación de que la sombra crecía.
La distancia que cubría se extendía y en otro sentido la oscuridad se volvía más sólida.
Lentamente tal idea se hizo más profunda cuanto más observaba.
"La habilidad innata que tienes, no se trata de 'dominio de la oscuridad'. ¿Cierto?" Dudó Nicole con seriedad.
Era imposible de no darse cuenta ahora.
Alice estaba tragándose los cadáveres de esos lémures y luego su sombra estaba creciendo con lentitud.
Tal suceso no se podría tratar de un 'dominio de la oscuridad' como se llamaba su habilidad innata.
"El gremio de mercenarios le puso ese nombre." Respondió Alice y dando una sonrisa, agregó. "Si bien se puede ver de esa manera, en realidad es más profundo de lo que parece."
Con tales palabras siguió avanzando sin detenerse en sus acciones.
Su sombra se había extendido por las paredes, el suelo y el techo, cubriendo los árboles y los lémures no pudieron hacer nada para detenerla.
Tras limpiar los pasillos sin dejar ningún sobreviviente, ambas se dirigieron a la cueva principal que estaba en el fondo.
Era el área del jefe y en ese lugar se encontraba un lémur corrompido por el Caos que media cerca de dos metros de alto.
Era de rango A y sin duda estaría entre las bestias más fuertes de este lugar, ya que todos los demás eran rangos B.
"¡GRAAA!"
Alice sin cambiar de expresión ante el rugido de la bestia, agitó su mano y su sombra se extendió creciendo como si fuera una ola.
Desde esa masa negra empezaron a salir manos, que atraparon al lémur.
"¡GRAA!"
Al principio ese lémur grito rompiendo los brazos con su fuerza.
De un brazo, paso a tres y de tres a cinco, hasta que el número se elevó tanto que empezó a cubrir al lémur por completo.
"¡GRAAAAAAh!"
Desde las palmas de las manos de esos brazos se abrieron bocas al igual que a lo largo del brazo y el chillido de la bestia, se extendió por el lugar.
Temeroso, herido y asustado… Las bocas masticaron su carne lentamente y la asimilaron en la oscuridad de forma aterradora.
Alice abrió otra bolsa de papitas sin cambiar de expresión, hasta que no quedo nada de ese gran lémur.
"Tratas de mejorar." Murmuró Nicole entendiendo lo que la otra parte estaba haciendo.
No sabía de qué se trataba su verdadera habilidad innata, pero eso no era un 'dominio de la oscuridad' y principalmente parecía mejorar devorando a otras criaturas.
"Sí. No me interesa mejorar y no tengo necesidad de ello, pero Aurora es diferente. Ella es imparable y ambiciosa, quiero apoyarla en sus objetivos." Respondió Alice con una media sonrisa.
Su razón para mejorar era otra persona y se notaba decidida para hacerlo.
Nicole vio como la oscuridad de los alrededores se volvió líquida y luego se transformó en una sombra que retrocedió a los pies de Alice con claridad.
En grupo siguieron avanzando por otro pasillo que no limpiaron antes, yendo directamente a la salida.
Quedaban uno que otro lémur entre los árboles, pero Alice tenía unos sentidos demasiados elevados y ella lo exterminó sistemáticamente, como si se tratara de una peste.
"Víctor me dijo que las habilidades innatas que mejoran rápido, siempre tienen una consecuencia." Dijo Nicole y con una expresión seria, preguntó. "¿Cuál es la tuya?"
No se hablaba demasiado de las consecuencias de las habilidades innatas, pero existían y Alice ahora trataba de mejorar y volverse fuerte.
Eso significaba que trataba de avanzar al rango SS… Y la habilidad innata la afectaría de alguna manera.
"Si no quieres decirme está bien." Añadió Nicole al darse cuenta de su error.
Hablar de las habilidades innatas era para algunos un tema privado y 'tabú', ella se dio cuenta de que fue excesiva al preguntar.
Sin embargo, no podía negar que lo hizo porque estaba preocupada por Alice.
Víctor le había contado sobre algunas habilidades innatas y los cambios que sucedían en el cuerpo y la mente, era por eso que estaba preocupada.
Alice se detuvo y se giró para mirarla.
Sus ojos negros profundos no llevaban ningún atisbo de emoción.
"Mi humanidad." Respondió con un tono plano.
Nicole se quedó en silencio y la siguió cuando ambos volvieron a caminar.
Alice no demostró ninguna emoción y la hizo sentir como una respuesta simple, que ya había asumido.
Caminando a su espalda, Nicole dudó un momento.
"¿Por qué me lo dices?" Preguntó luego de dudar durante unos minutos.
Había sentido que le respondió por una razón y Alice la volvió a mirar.
"Porque siempre hay un costo por obtener poder. Y si deseas quedarte con Víctor, entonces tienes que saberlo." Declaró Alice y dándole una mirada, explicó. "El poder tiene un costo y algunas veces ese costo será pesado. Tal vez perdiéndolo todo. Sin embargo, lo vale si el objetivo es importante."
El poder tenía un costo… Era inevitable.
Tal 'costo' se podía ver de muchas maneras y en algunas situaciones ese 'costo' era más notable.
"En mi caso, ayudar a mi hermana lo vale completamente." Agregó Alice antes de seguir moviéndose.
Nicole la siguió de forma inconsciente.
Entendía que Alice le estaba advirtiendo sobre Víctor… Él era esa existencia que le permitía volverse más fuerte y la ayudaba a progresar.
El 'costo' era pasar sus pruebas y sus enseñanzas y lo que debía hacer era realizar esas pruebas, sin perder sus propios valores y sin ser influenciada de mala manera.
¿Perdería la humanidad con la enseñanza de Víctor?
Ese hombre esclavizó a la mafia, no le importaba las personas y solo seguía sus propios ideales y valores, haciendo lo que deseaba.
Nicole sabía que estar al lado de ese hombre y aprender sus valores, era posible que perdiera su 'humanidad'.
Llegar a un punto que terminara haciendo cosas, en razón de fortalecerse que la llevaran a perder su empatía, sus valores y en cierta forma cambiando su forma de pensar.
Estaba bien aprender, pero no ser 'moldeada' como la otra parte deseaba.
"¿Lo nuestro sigue en pie?" Preguntó Alice de repente y al ver que ella la miraba aturdida, explicó. "Ya sabes, lo de entrenar conmigo y que tú me hagas la cena."
"Claro." Respondió Nicole.
No estaba molesta por las palabras de Alice, solo la había dejado pensando.
Ahora no pudo evitar dar una sonrisa al ver a esa glotona tan seria al hablar de comida.
Aunque no lo dijera, sabía que Alice estaba siendo considerada a su manera al cambiar de tema.
Y no creía que Alice perdiera su 'humanidad'… Siempre fue ligeramente fría, pero algo considerada.
"Eso es bueno." Murmuró Alice y con una expresión seria, declaró. "Aurora se retrasará en su cita y ella cenará por su cuenta."
"¿Los sabías?" Pregunto Nicole sorprendida y dando una expresión tímida, comentó. "Aurora seguramente pensaba que iba a ser silenciosa."
Estaba segura de que Aurora no le había comentado nada a su amiga y era por eso que ella no había hablado antes.
"Le da vergüenza salir con un pervertido." Señaló Alice con una risa entretenida.
Tales palabras hicieron que Nicole frunciera el ceño.
¿Era un 'pervertido'? Nicole se preocupó por su amiga.
La había ayudado a vestirse y le había dado unos consejos que había visto en las novelas que miraba cuando era joven, pero no deseaba que un 'pervertido' se aprovechara de ella.
Aunque era fuerte, Aurora parecía ser 'ingenua' en temas amorosos.
"¿Estará bien?" Preguntó Nicole de forma inevitable.
Alice le dio una mirada y se rio de forma malvada y traviesa.
"Claro… Ya le envié una advertencia." Respondió Alice con seriedad.
******
En el último piso de la Empresa Apicius se encontraba un gran restaurante y en medio de la sala, Aurora estaba con Kairos.
El pianista tocaba en una esquina, y la luz era ligeramente débil dando una sensación de calma cuando se combinaba con la música.
Todo lo demás estaba vacío y silencioso con la Ciudad Zerzura a la vista por la ventana.
Aurora había venido bastantes veces a este restaurante, pero ahora al ver a Kairos comiendo, no pudo evitar sonreír.
"Tengo que admitir que me agrada lo que has preparado." Dijo Aurora y observando a Kairos, agregó. "Se siente muy romántico, te luciste."
No era que no haya asistido a restaurantes de esta clase y con su glotona amiga era de ir a diferentes restaurantes, incluyendo algunos en las que terminaban comiendo solas.
Pero el ambiente era diferente y su compañero también lo era… Así que no negaba que le gustaba esta sensación romántica.
"Gracias, no deseaba ser demasiado ostentoso y causarte incomodidad." Reveló Kairos rellenando las copas de vino de ambos.
Aurora tomó la copa y bebió un pequeño trago.
Si se dejaba llevar era posible que se embriagara rápido y no deseaba hacerlo, era por eso que actuaba moderadamente… Quería disfrutar esta noche.
"Bueno, esto es ostentoso, pero estoy acostumbrada." Dijo Aurora y recibiendo la mirada de la otra parte, explicó. "Un maestro culinario que podría hacer de una comida un elixir, con ingredientes mágicos de alta calidad y en uno de los restaurantes más caros e importantes. Eso sí es ostentoso."
Kairos la observó con una cierta sonrisa, al verla tan seria señalar la comida y al acertar a todo.
"Estoy algo acostumbrada." Respondió Aurora encogiéndose de hombros.
Sabía quién era el chef que estaba cocinando y lo conocía, ya que había probado varios de sus platos antes con Alice.
Era amiga de una glotona gourmet, era obvio que podría hablar sobre la comida con algo de experiencia.
"La próxima vez me esforzaré mejor para hacer algo más único." Comentó Kairos terminando con su último plato.
Aurora lo observó y dio una sonrisa.
"¿Próxima vez?" Dudó ella, levantando su ceja.
Lo hizo de tal forma que puso en juego la confianza de la otra parte y Kairos quien estaba a mitad de camino de beber, se detuvo y le dio una mirada.
Los labios de Aurora se inclinaron en una sonrisa y se rio.
"Estoy bromeando, me encantaría otra próxima vez." Dijo Aurora y observando que él, respiraba aliviado, señaló. "Me gusto la cita, especialmente la película. Hace mucho que no salgo de esta manera."
La cita fue bastante 'simple' y tal simplicidad le agrado.
Kairos la invitó a ver una película en el cine de la Ciudad Zerzura y no fue comprando todos los boletos o llevándola a un lugar privado para solo los dos, fue una invitación al cine común.
Esperaron, compraron pochoclos y miraron una película a su elección con muchas otras personas.
Ambos tenían una gran cantidad de dinero, pero Aurora le gustaban esas cosas 'normales' y Kairos lo entendió, al invitarla de esa forma.
Ver una película en un cine tradicional sin duda fue agradable y más cuando ella no era de hacer esas cosas normalmente.
"Aunque tengo que disculparme por lo que termine eligiendo." Murmuró Aurora riéndose con suavidad.
Se le dio la capacidad de elegir la película que terminaron viendo y ella seleccionó una película de un nuevo director poco conocido que usaba como seudónimo el nombre de un dios griego.
Hasta ese punto fue normal, pero la situación cambio cuando vieron la película.
La película se llamaba 'Un Amor Eterno' y trataba de un ser inmortal que se enamoró por primera vez… Pensó que iba a ser un romance dulce y ella lo había elegido para ver como Kairos se comportaba con tal película.
Lamentablemente lo que terminaron viendo fue muy diferente…
"Fue fuera de la exceptiva, pero fue entretenida… Después de todo, la mujer era inmortal, pero no era humana y su forma de pensar no era tradicional. Es normal, que alguien alejado de la humanidad, actué de una manera diferente al estar enamorada por primera vez." Dijo Kairos dando una media sonrisa.
De eso se trataba la película, una mujer inmortal que no era humana se enamoró por primera vez.
Kairos estaba apoyando la idea de que el amor primerizo hacia actuar diferente y lleva a acciones que parecían ilógicas.
Aurora estaba de acuerdo, ahora que tenía una cita no le había avisado a su amiga y en cierta forma lo ocultaba como si fuera un pequeño secreto muy atrevido.
Se avergonzaba con facilidad y mayormente deseaba avergonzar a la otra parte, sin duda no era normal.
Solo que había un problema.
"Creo que es muy poco ortodoxo… Tomar el alma de su amado, apoderarse de él y luego escuchar cada uno de sus pensamientos y secretos." Murmuró Aurora riéndose al final.
Había esperado una película romántica y terminaron viendo una película bastante diferente.
En donde una mujer inmortal controló la persona que amaba, tomando su alma para no perderlo y como si fuera poco, escuchando sus pensamientos y cada profundo secreto… La posesividad y la locura fueron puestos en juego en una película que paso de romántica a de terror.
Kairos dio una media sonrisa.
Él había tratado de ver el lado 'bueno' y romántico, pero esa película fue de tal manera que el 'romance' fue dejado de lado y se demostró la posesividad de un individuo poderoso.
Inmortal, fuerte y con capacidades ilimitadas… Para Aurora fue una excelente película que se adentró en la mente de sus personajes de una forma retorcida.
Además, era la primera película que veía en cine desde hacía ya tiempo y cuando se combinó que fue su primera cita, la verdad que el disfrute solo había aumentado.
Ambos terminaron comiendo dando sonrisas y Aurora disfrutó la sensación que daba cenar con Kairos.
No se sentía incomoda y no era como si no hubiera tema para conversar, pero disfrutaban de la música y la presencia del otro.
El tema paso de la película a los portales abismales, hablando sobre esas razas que se encontraban del otro lado y a la expectativa de los próximos informes, que todavía no eran enviados.
Luego Aurora pudo ver que en el gran televisor del restaurante que estaba en silencio, se pasó un programa de la 'Primera Heroína' y cuando Kairos, observó dio una sonrisa.
Él le había informado la localización del laboratorio y le había pasado todo el informe, entonces unos días después, la 'Primera Heroína' apareció en ese lugar y destruyó todo.
Conectar a esa heroína con su persona no era muy difícil cuando ya había una conexión, pero Kairos mantuvo silencio sin hablar del tema.
Volviendo a cambiar la conversación, ambos pasaron a lo personal… Ella habló de su familia, su trabajo y antes de que se diera cuenta estaba conversando sobre esto último.
Kairos tras terminar de comer la observó hablar con una media sonrisa, atrapado por sus palabras como si escuchara una gran historia única.
Estaba hablando de su trabajo y si bien lo hizo con un tono ligeramente motivado, él le prestó bastante atención.
"Escuche que la Empresa Cosmos ha tenido algunas críticas sobre la tecnología clasificada." Dijo Aurora cambiando de tema.
Fue su turno para darle una mirada atenta a él.
"Si, pero es algo que sucede frecuentemente cada algunos años. Cuando creamos los portales cosmos sucedió lo mismo y cuando desarrollamos robots constructores y drones avanzados, también sucedió. Ahora que se muestra armamento avanzado, vuelve a suceder." Respondió Kairos y dándole una sonrisa, agregó. "Es posible que vuelva a suceder en el futuro."
Ella había apuntado a ese tema, ya que las armaduras de poder aparecieron durante el asalto del portal y fue en ese momento que él, fue a apoyar.
Sin embargo, Kairos redujo el tema a un asunto insignificante y con ello, trató de borrar cualquier sentido de devolución.
"Y si soy sincero a veces, algunas pequeñas consecuencias valen la pena, si se hace por la persona correcta." Declaró Kairos con una sonrisa.
Era un coqueteo descarado que la tomó por sorpresa, pero Aurora dio una sonrisa.
"Al parecer el vino hizo efecto." Dijo Aurora agitando su cabeza falsamente y dando una mirada juguetona, agregó. "Si no tienes cuidado, tal vez me terminé aprovechando de ti."
Usando el tono del caballero galante que ocultaba Cithrel, ella consiguió que sus palabras salieran con un tono coqueto y a la vez juguetón, muy ambiguo.
Ella sentía vergüenza, pero verlo a él, desviar su mirada de forma tímida, fue satisfactorio.
Estaba por seguir jugueteándolo, cuando un mozo se acercó.
"Discúlpenme. Aurora Campbell ha recibido un mensaje." Avisó el mozo con un tono respetuoso.
Aurora miró a Kairos para ver si era algo de él, pero ese joven agitó su cabeza.
Su curiosidad despertó y Aurora siguió al mozo hasta la cocina, en donde pudo ver al maestro culinario y chef de esta noche.
Era un anciano vestido como chef y cuando la vio, la saludo cómodamente.
Aurora le devolvió el saludo y siguió al mozo, que la dejo en una mesa en el que se encontraba una pequeña caja cerrada.
Era una caja de regalo y cuando leyó quien lo enviaba, su expresión cambio.
Quien le había enviado la caja como si fuera un regalo no fue nadie más que su glotona amiga.
Aurora no le había informado sobre su cita a su amiga, ya que le daba vergüenza y que llamara a Kairos pervertido, fue aún más vergonzoso.
Sin embargo, se debió dar cuenta de que era imposible ocultarle a su glotona amiga lo que estaba haciendo.
Ella era la dueña de este restaurante y aunque parecía indiferente, estaba claro que sabía de sus llamadas nocturnas y sus videollamadas privadas.
Abriendo la caja con cuidado, pudo ver el interior muy bien arreglado y luego la carta sobre una cubierta que cubría algo en su interior.
Aurora sintió un mal presentimiento de inmediato.
"Ella no debe estar molesta, ¿cierto?" Dudó en voz baja.
Le había ocultado la cita de hoy y prácticamente la había dejado sola sin avisarle, pero también le estuvo ocultando que hablaba con Kairos.
Una parte de ella se sintió como un marido que estaba engañando a su esposa… Y el problema era que su 'esposa' la necesitaba solo para que ella le cocinara.
Tratando de ocultar su vergüenza, abrió el sobre con cuidado y leyó la carta.
—Perdón por interrumpir tu cita, pero como tu hermana mayor tengo algunas responsabilidades familiares. Advertirte sobre los peligros de salir con pervertidos, es lo más importante. Sin embargo, en caso de que la cena se retrase hasta muy tarde, tengo que decirte que te cuides. —Alice Campbell.
Era una carta bastante simple, pero Aurora pudo sentir el énfasis en la palabra 'cuidar' y también la ambigüedad.
¿Qué pasaba si la cena se retrasaba hasta muy tarde?
Aurora trató de detener ese pensamiento, pero no funciono.
Sus mejillas se recalentaron y sus ojos se desviaron a la cubierta dentro de la caja, y al momento siguiente sus manos se movieron para revelar el interior.
"¿Sucede algo?"
Al mismo momento que ella vio el contenido, escuchó la voz de Kairos a su espalda y ella tembló como una hoja en un huracán.
Guardando la caja en su anillo espacial a una velocidad inhumana, sus mejillas se volvieron extremadamente rojas y su rubor se extendió por todo su rostro.
A veces las citas se extendían y entonces sucedían… Aurora cortó su pensamiento antes de que su imaginación diera lugar.
¡Su amiga le había enviado lo que necesitaba para cuidarse en caso de que la noche se alagara!
Claramente era su forma de venganza y esa glotona fue despiadada al enviar el objeto en medio de su cita.
Aurora se giró sutilmente para observar a Kairos y su expresión tembló.
Él la estaba observando con atención y esta vez Aurora, no solo miró sus ojos que tanto le gustaba, sino que su rostro delicado que la única forma de describirlo era 'guapo' y luego su físico que, si bien no estaba sumamente esculpido, se notaba que estaba en forma.
Su imaginación se combinó con el vino y la hizo preguntarse cómo era bajo de esa camisa.
"¿Debes irte?" Preguntó Kairos acercándose con cierta curiosidad.
Aurora se volvió tímida y bajo la cabeza.
¡No podía levantarla, ya que sabía que su rostro estaba todo rojo!
Y lo peor era que su imaginación no ayudaba.
Esta era su primera cita y si bien para ella, el acto que su amiga decía que debía 'cuidarse' estaba lejos, al menos pensaba sobre un beso.
¿Era necesario? ¿Debía hacerse?
Ella se volvió demasiado consciente de la otra parte y a pesar de que respiraba tratando de calmar su corazón palpitante, no funciono.
Respirando hondo de forma decisiva, volvió a levantar su cabeza sorprendiendo a Kairos debido a su rubor.
"A pesar de que la cita me ha encantado. No es suficiente para recibir mi beso." Declaró Aurora con el tono más serio del que pudo, pero sus mejillas se recalentaron de vuelta.
"¿Beso?" Dudó Kairos mirando sus ojos y cuando desvió la mirada a sus labios, su expresión cambio.
Se sonrojó a una velocidad mayor que la de ella y Aurora al darse cuenta de que estaba disfrutando de la vista, se rio de forma juguetona.
¡Ella no iba a ser la única avergonzada esta noche!
Su glotona amiga le había enviado esa carta y 'ese' objeto para avergonzarla en forma de venganza y si bien ella se vengaría en el futuro, ahora necesitaba no sentirse tan sola con la vergüenza.
Nunca tuvo parejas y no deseo ninguna, así que ahora que estaba dando pie a una relación, tenía bastantes preguntas.
Si le preguntaban qué clase de relación era su ideal, entonces sin duda señalaría a sus propios padres quienes estaban juntos desde décadas.
Eso significaba que tenía que pensarlo bien antes de dar cada paso y estar segura en cada momento.
Observando a Kairos que estaba ruborizado, Aurora se rio suavemente obteniendo fuerza de su expresión tímida.
"Sin embargo, creo que como voy en el camino correcto, debo mostrar mi aprecio." Anunció ella, tratando de calmar su corazón palpitante.
Sin dudarlo, se acercó directamente hacia él que estaba tieso, entonces cuando sus rostros se acercaron hasta el punto de que podían sentir la respiración de la otra parte, Aurora se desvió y beso lentamente su mejilla
Ella sintió su corazón latir con fuerza.
Era la vergüenza, la timidez y la emoción combinada con unas copas de vino, pero también lo sintió agradable.
Un beso en la mejilla en algunos países era un saludo… Eso era lo que se dijo a sí misma para calmarse.
Aquí fue diferente y ambos lo sabían.
Sintiendo que la otra parte estaba rígida entre la sorpresa y la emoción, igual de avergonzada que ella e incluso más sorprendido, Aurora se rio suavemente y se distanció de forma lenta.
"…"
Ella recibió su mirada.
Esos ojos de color zafiro brillaban con fuerza y daban la sensación de que contenían la infinidad en ellos… Un universo entero.
No obstante, había algo más que belleza y felicidad, era una fuerza que lograba que ella se sintiera tímida.
"Me esforzaré para que sigas por este camino." Declaró Kairos con una sonrisa natural.
No estaba adoptando una fachada de alguien fuerte y carismático, estaba muy avergonzado.
Su rostro rojo lo demostraba, pero ella le había dado la razón para superar su vergüenza y eso hizo que ahora su declaración, se escuchara fascinante.
"…"
Aurora se quedó en silencio.
Que estuviera tan cerca y que fuera tan guapo a la vez que sincero, hizo que sus palabras fueran un golpe crítico para ella.
"Creo que debo irme… Si se retrasa demasiado la cita, mi 'hermana mayor' pensara en algo sucio." Bromeó Aurora con un tono medio serio.
La expresión de Kairos tembló y si bien su vergüenza aumentó, asintió con una sonrisa.
Había roto su límite de vergüenza y ahora ni siquiera con su broma ambigua, pudo lograr avergonzarlo más de lo que había hecho.
Antes de que Kairos pudiera preguntar si deseaba que la lleve, Aurora se equipó con su armadura nueva usando 'cambio rápido'.
¡Estaba muy avergonzada y ahora mismo estaba poniendo un frente fuerte!
Activando el viaje espacial de su armadura, Aurora pudo ver que Kairos le daba una sonrisa de despedida mientras que su rostro estaba rojo.
El espacio se distorsionó y ella logró llegar al patio del jardín de la casa en la Ciudad Zerzura y…
"…"
Toda su fachada fuerte se rompió cuando el rubor se extendió por su rostro y lo peor, era que ella dio una sonrisa.
Sin arrepentirse de nada.