Hola Jesús, soy la chica del aeropuerto.
-Mía ¿cierto?
-Si.
-Perdón de corazón, por lo de antes, estaba distraído y cansado.
-No pasa nada, yo también lo estaba.
-¿Y desde cuándo eres gemeliers?
-Pues desde que salisteis en Hay una cosa que te quiero decir.
-Valla, no pensaba que había Gemeliers tan guapas.
-Eso se lo dirás a todas.
-Pues no, porque todas sois iguales, pero tu tienes algo que te hace diferente.
-Ya lo se, por lo que me pasó ¿no?
-La verdad es que no, pero ahora quiero saber por que nuestra fan esta triste.
-Mejor que no, no te quiero molestar.
-Que no boba, no es molesta, a demás me gusta que nuestras fans estén felices y sonrientes.
-Pues te digo yo que, de feliz no soy, pero bueno.
-¿Y que le pasa a esta princesita?
-¿Mia estas lista? Tenemos que llegar. -Informó Blas saliendo del baño, listo.
-¡Voy!
-Jesús lo siento, me gustaría seguir pero uno de mis "hermanastros" me dice de que nos tenemos que ir.
-Me encantaría volver hablar contigo, ¿cuando podrás conectarte?
-Supongo que esta noche, pero ¿no tienes que dormir?
-No, me caieste bien y quiero conocerte bien y haber si te veo en alguna firma.
-Eso esperó, por que la tele no es lo mismo.
-Eres muy graciosa, ¿lo sabías? Y eso me gusta.
-¿Porque estoy hablando con mi ídolo y no me lo creó?
-Pues creetelo. Lo siento pero me tengo que ir, espero que nos volvamos a encontrarnos otro día.
-No te preocupes que te buscaré por todo el país.
-Me alagas, pero seguramente no eres la única.
-Lo se, pero seguramente solo yo tengo tu número.
-Pues si, pero por favor no lo publiqué, que es el 5 en estos meses.
-Descuidad no lo haré, esto quedará entre tu y yo.
-¡Mía vemos!
-¡Que si, ya voy!
-Adiós.
-Adiós, esperó verte en algún concierto, guapetona.
Fui con los chicos al coche y me subí, por el caminó estuve con el móvil, para saber en que hotel se quedaba pero nada, las redes no lo dice. Al llegar nos bajemos y los chicos fueron al camerino para prepararse, ya que en medía hora salían, yo me tuve que quedar a fuera ya que no me dejaron entrar porque se tenían que cambiar y la verdad no les quería ver, me largue de ahí y fui a ver como era el plató y tal, al llegar era todo precioso, con muchos cables pero lo normal, butacas y sofas, pantallas y público, vi como lo artistas iban entrando, algunos se esperaban ya que supongo que era un ensayo, fui a buscarlos chicos para avisarles de que tenían que ir, al girar y dar unos pasos, me caí de culo, ya que me volví a chocar con alguien, esta claro, hoy no es mi día.
-Esta claro, hoy no es mi día.
-Lo siento, ¿te hice daño? -Miré a la persona de esa voz y era un chico de unos 17 años, creó, tenía la mano estirada y la cogí, ya que era para ayudarme a levantarme.- Lo siento, estaba con mi móvil y cuándo te vi fue en el suelo.
-No pasa nada, hace unas horas que me paso lo mismo, tranquilo.
-Bueno, me alegro de que estés bien, esperó que la próxima vez que te vea no sea así.
-Ni yo, me llamó Mía y tú?
-Daniel, bueno me tengo que ir, tengo un ensayo. -Dijo marchándose.
Yo seguí mi caminó pensando en lo mono que era y lo bueno que estaba, llegue a la puerta del camerino y toqué, estaba por entrar cuándo caí de que era Daniel, el mismo que mi ídolo, lo había visto y encima me habló como si fuera su amiga, me quedé en shock como en el concierto cuando los vi, sentí como me movían de un lado para el otro y reaccione, me encontré a los chicos.
-Al fin reaccionas. ¿Que te pasó? -Habló Carlos.
-Me, me, me choque...-Todavía seguía en shock, no podía ni hablar.
-¿Y estas bien?-Habló Blas, como si fuera un padre asustado.
-¡¿Si estoy bien?! Claro, me crucé con mi amor imposible y me habló, ¿como quieres que éste?
- Mía, tranquila, respira hondo y despacio, no queremos llevarte al hospital. -Esta vez fue Álvaro.
-No puedo, a unos metros esta él, me crucé con él en el aeropuerto, bueno más bien con su hermano, pero podría pasarse por él y en el hotel vi mi sudadera firmada, como ¡¿quieres que éste?!
-Hay el amor, pero no es para tanto.-Dijo Carlos marchándose.
-Ya me dirás tu cuando le veas.
-No si ya les vi y el próximo disco que saquemos, una de las canciones posiblemente las cantamos con ellos.
-¿Esta de broma, no?
-No, anda vamos que tenemos que salir.
Fui con ellos hasta el plató y ellos estaban allí ensayando su canción, preciosa, pero ellos más, los tengo tan cerca que no lo creó. Cuándo terminaron, bajaron del escenario y se subieron los chicos no si saludarles, si es que son geniales, vi que Jesús me vio y comenzó a caminar hacia mí, y por detrás los 6 se quedaron mirando la escena, yo no sabía que hacer y mi corazón latía más, con cada paso suyo. Su varita de ángel
-¿Estás bien?-Preguntó, mama mía, no se cuántas veces escuché esas palabras y señalado mis muñecas, por cierto las vendas no las llevaba y tenia las heridas al aire, así que me las vio.
-Si, solo fue un tontería.
-Pero me preocupa, ¿por que lo hiciste? Las princesas no deben de hacer esas cosas.
-Puff. Son tantas cosas, que no lo soporte más. -Dije al recordar lo de mis padres y unas lágrimas caían.
-Bueno, pero eso es lo último que tenías, seguramente tenías más salidas.
-Creeme, no la había por entonces, hasta hoy.
-¿Y por que lloras? ¿Sabes? No me gusta que nadie sufra, y menos una chica y si es por bullying, eres hermosa, no hagas casó a lo que te digan y si es por chico, el se lo pierde, seguramente eres simpática, generosa, valiente, sincera, abierta pero a la vez tímida.
-Pues no es nada de eso, ojalá si lo fuera, perdona seguramente tienes prisa.
-No tranquila, queda mucho para que salga, ven vamos algún sitio y me lo cuentas.
-No, estoy bien, además dentro de nada tendrás que salir.
-Bueno, nosotros es para el final, siempre lo bueno para el final, ¿no?
-Si, que rabia da eso.-Dije limpiando me algunas lágrimas que se han colado.
-Anda, ven y dame un abrazo, y alegra esa cara.
-Lo haré pero necesitó un momento estar sola.-Dije llenado me del plató y dejándolo solo.
La verdad no quiero que me vea llorar, me escondí en el camerino de los chicos y me puse a llorar, a mares, debería de ser feliz, pero no puedo, es muy duró, no tengo padres, ni mucho menos hermanos, solo a un tío que esta de viaje todo el tiempo y me deja con unos chicos que tendrán sus cosas, ¿que hago aquí haber? Lo único que hago es estorbarle, no puede hacer nada, lo mejor sería, ir y no volver, y el mejor lugar es estar con mis padres, pero eso lo intenté pero no funcionó, a demás no me puedo ir ahora que conocí a mis ídolos, bueno solo a uno, pero parece que el destinó sea feliz y esta dando en el clavo, sentí la puerta abrirse y vi a Carlos entrar, preocupado.
-Te estábamos buscando, ¿por que te marchaste?
-Por que no quería que mi ídolo me viese llorar.
-Hey, no importa, todos hemos llorado, incluso la persona más feliz llorar, venga -cuénta le a tu hermano, que te pasa.
-Que estaba hablando con el cuando me preguntó lo que me pasaba y recordé lo de mis padres.
-Bueno, pero sabés que siempre estarán contigo. No dejes que la culpa y la tristeza te guíe, anda vamos, lavarte esa preciosa cara que tienes y salimos, a demás a uno le dejaste muy preocupados.
-¿A uno o a más de uno?
-No viene al caso, un tal Jesús te busca por todo el recinto.
-¿A mi porqué?
-No se,pero le dejaste tocado.
-No entiendo.
-Qué esta por ti. ¡Amor a primera vista!