Tras un largo silencio, Farrington dijo:
No veo cómo podríamos decirle que no, Sinjoro Podebrad. Y creo que hablo por todos nosotros.
Frigate y Rider asintieron.
Realmente, no nos deja otra elección. No es que tenga nada en contra de que venga con nosotros. De hecho, me agrada. Sólo que... bien, ¿qué ocurrirá si no encontramos a ningún hombre experimentado en dirigibles? Seríamos unos locos si nos fuéramos ahí arriba sin saber cómo se maneja el aparato o sin disponer de alguien que sí lo sepa.
Por supuesto. Pero va a tomar mucho tiempo construir la aeronave. A menos que podamos encontrar algunos ingenieros que sepan como diseñar el aparato, o al menos puedan calcular sus especificaciones, deberemos empezar desde cero.
»Mientras tanto, podemos buscar un piloto. Aunque son muy raros, en algún lugar a lo largo del Río, dentro de un radio de dos mil kilómetros en ambas direcciones, se hallará el hombre al que estamos buscando.
»O quizá deba decir puede hallarse. De hecho, las posibilidades de que lo encontremos están más bien en contra.
Yo practiqué el vuelo en globo dijo Frigate. Y he leído multitud de libros acerca de los aparatos más ligeros que el aire. Subí a un dirigible para dos cortos vuelos. Claro que eso no me hace un experto, por supuesto.
Quizá tengamos que entrenarnos nosotros mismos, Sinjoro Frigate. En cuyo caso, cualquier conocimiento nos será de una buena ayuda.
Por supuesto, eso ocurrió hace mucho tiempo. He olvidado gran parte de las cosas.
No es que inspires confianza precisamente, Pete dijo ásperamente el Frisco Kid.
La confianza viene con la experiencia dijo Podebrad. Ahora, caballeros, empezaremos inmediatamente. Demoraré el anuncio de mi conversión hasta que la nave esté preparada para despegar. Ningún miembro de la Iglesia, nadie que predique la total resistencia pasiva, puede ser jefe de este estado.
Frigate se preguntó cuán profunda era la conversión del hombre. Le parecía que cualquiera que creyera realmente en los dogmas de la Iglesia lo proclamaría inmediatamente. Sin importarle cuáles fueran las consecuencias.
Tan pronto como termine nuestra conferencia, tomaré las disposiciones necesarias para iniciar la producción de hidrógeno. Creo que el mejor método, considerando los minerales disponibles, será por reacción de ácido sulfúrico diluido y zinc. Nuestra industria de ácido sulfúrico ha estado funcionando durante algún tiempo. Fuimos afortunados descubriendo platino y vanadio, aunque no en grandes cantidades.
»Hubiera deseado poder fabricar aluminio, pero...
Las aeronaves SchüteLanz estaban hechas de madera dijo Frigate. De todos modos, un dirigible no necesita mucha madera.
¡Madera! dijo Farrington. ¿Pretendes meterme en un dirigible de madera?
La única madera estará en la quilla y en la cabina dijo Frigate. La envoltura puede ser construida a partir de la membrana intestinal del pez dragón.
Eso requerirá mucha pesca dijo Podebrad. Se puso en pie. Voy a tener que trabajar mucho hoy. Pero les veré de nuevo, caballeros, mañana en la comida. Podremos discutir esos detalles entonces. Mientras tanto, buenas tardes.
Farrington, con aire grave, se dirigió a Rider mientras abandonaban el edificio.
Si me lo preguntas, ¡todo esto es una locura!
A mí me suena a magnífico dijo Tom. A decir verdad, empiezo a estar cansado de tanta vela.
¡Si, pero podemos matarnos mientras estamos dando vueltas por ahí intentando cómo aprender a volar en esa maldita cosa!
»¿Y qué ocurrirá si no encontramos a nadie para manejarla? ¡Habremos perdido un montón de tiempo!
Eso no suena propio de un hombre que conducía a la gente por los rápidos de White Horse en Alaska, una y otra vez, sólo para ganarse unos cuantos dólares. O al hombre que pirateaba ostras...
Se puso pálido. Rider y Farrington se habían detenido, y sus rostros eran duros.
He oído un montón de historias acerca del Yukon dijo Farrington lentamente, pero nunca he oído hablar nada de los rápidos de White Horse. Ni a ti tampoco. ¿Has estado espiando?
Frigate inspiró profundamente.
¡Infiernos, no necesito espiar! dijo. ¡Os reconocí la primera vez que os vi! Repentinamente, Rider estaba tras él, y Farrington llevaba su mano a la empuñadura
de su cuchillo de pedernal.
Rider habló en un tono bajo y monótono.
De acuerdo: quienquiera que seas, simplemente camina delante mío. Directamente al barco. Y no intentes ninguna travesura.
No soy yo quien anda de incógnito! dijo Frigate. ¡Sois vosotros!
Simplemente haz lo que te digo.
Frigate se alzó de hombros e intentó sonreír.
Es evidente que vosotros dos estáis haciendo mucho más que simplemente ocultar vuestras auténticas identidades. De acuerdo, adelante. Pero no pretenderéis matarme, supongo.
Eso depende dijo Rider.
Caminaron bajando la colina y cruzando la llanura. En el muelle, el único miembro de la tripulación presente era Nur, que estaba hablando con una mujer. Rider le dijo:
Ni una palabra, Pete. Y sonríe.
Frigate, mirando directamente al pequeño moro, hizo una mueca. Esperaba que Nur se diera cuenta de que pasaba algo raro... era tan sensible a las expresiones. Pero Nur sólo lo saludó con la mano. Cuando estuvieron en la cabina del capitán, Frisco cerró la puerta y obligó a Frigate a sentarse en el borde de un banco.
He estado con vosotros veintiséis años dijo Frigate. ¡Veintiséis! Y nunca he dicho a nadie cuáles eran vuestros auténticos nombres.
Farrington se sentó en el sillón tras su escritorio. Jugueteando con su cuchillo, dijo:
Eso parece contra la naturaleza humana. ¿Cómo puedes haber mantenido la boca cerrada durante tanto tiempo? ¿Y por qué?
Especialmente por qué dijo Rider. Permanecía de pie junto a la puerta, con un estilete de pez cornudo en la mano.
Era evidente que vosotros no deseabais ser reconocidos, por una parte. Así que, siendo amigo vuestro, no dije nada... aunque admitiré que me he preguntado a menudo el porqué de tanto secreto.
Farrington miró a Rider.
¿Qué piensas, Tom? Rider se alzó de hombros.
Cometimos un error dijo. Simplemente hubiéramos debido echarnos a reír. Admitir quienes éramos e inventar alguna historia para justificar el porqué ocultamos nuestros nombres.
Farrington dejó el cuchillo y encendió un cigarrillo.
Sí. Esto es fácil de decir ahora. ¿Qué hacemos?
Tras toda esta misteriosa escena, Pete debe estar convencido de que tenemos algo que ocultar.
Ya lo ha dicho.
Rider enfundó su estilete y prendió también un cigarrillo. Frigate se preguntó si no sería ya el momento de intentar la fuga. Sus posibilidades de éxito eran pocas. Aunque ambos hombres eran bajos, eran muy fuertes y rápidos. Además, intentar escapar le haría parecer culpable.
¿Culpable de qué?
Eso está mejor dijo Tom. Olvida salir huyendo. Relájate.
¿Con vosotros dos pensando en asesinatos? Rider se echó a reír.
Después de todos estos años deberías saber que somos incapaces de matar a sangre fría dijo. Incluso a un extraño. Y sentimos aprecio hacia ti.
Bien, si yo fuera quien pensáis que soy, sea quien sea, qué haríais?
Iniciar una buena disputa a fin de no tener que matarte a sangre fría, calculo.
¿Por qué?
Si no eres realmente Peter Frigate, entonces tú sabrás.
¿Quién otro podría ser, infiernos?
Hubo un largo silencio. Finalmente, Farrington aplastó su cigarrillo en un cenicero clavado a la mesa.
El asunto, Tom dijo, es que ha estado con nosotros mucho más que cualquiera de nuestras mujeres. Si fuera uno de Ellos, ¿cómo habría permanecido por ahí durante tanto tiempo? Especialmente puesto que afirma que nos reconoció el día mismo en que nos conocimos.
»Hubiéramos sido embarcados esa misma noche, si fuera uno de Ellos.
Quizá dijo Tom. No sabemos ni una cuarta parte de lo que está pasando. Una octava parte, quizá. Y lo que sabemos puede ser una mentira. Quizá nos tomen por unos Incautos.
Ellos? ¿Embarcados? dijo Frigate. Martin Farrington miró a Tom.
¿Qué vamos a hacer ahora? dijo. No hay ninguna forma de identificarles. Somos estúpidos, Tom. Hubiéramos debido contarle una gran mentira. Ahora no nos queda más remedio que decirle toda la verdad.
Si es uno de Ellos, ya la sabe dijo Rider. Así que no podremos contarle mucho que ya no conozca. Excepto acerca del Etico. Y si es un agente, entonces no hubiera sido
puesto tras nuestro rastro a menos que Ellos sospecharan que hemos sido contactados por Él.
Sí, nos hemos precipitado. Demasiado, creo. ¿Sabes?, si Pete es un agente, ¿por qué nos ha sugerido lo del dirigible? ¿Desearía un agente que llegáramos hasta la Torre?
Eso es cierto. A menos...
Adelante, dilo.
A menos que haya algo que no funcione, y esté tan a oscuras como nosotros.
¿Qué quieres decir?
Escucha, Tom, últimamente me he pasado muchos ratos pensando, cuando hubiera debido estar durmiendo o fornicando. He estado pensando en que está ocurriendo algo misterioso. No quiero decir lo que nos dijo el Etico. Me refiero a este asunto de que repentinamente ya no haya más resurrecciones. ¿Se te ha ocurrido pensar alguna vez que quizá su interrupción no sea parte del plan original... sea cual sea éste?
¿Quieres decir que alguien le arrojó una llave inglesa a la maquinaria? ¿Y que hizo saltar un fusible y dejó a todo el mundo a oscuras?
Sí. Y los agentes ya no saben lo que ocurre más de lo que podamos saber tú y yo. Lo cual quiere decir que Pete, aquí, es un agente. Y simplemente está intentando volver a casa.
¿Quieres decir que puede habernos descubierto pero que no puede hacer nada al respecto? ¿Y que por eso nos ha acompañado durante todo el camino? ¿Y ha propuesto esa idea del dirigible porque esto lo ayudará, a él, no a nosotros, a ir más rápido?
Algo así.
De modo que estamos peor que antes. Pete puede ser uno de ellos.
Si lo es, es como yo digo. No vamos a decirle nada que ya no sepa.
Sí, pero él puede decirnos a nosotros mucho. ¡Mucho!
¿Piensas usar la fuerza con él? ¿Y si realmente es Frigate?
No lo haría de ningún modo. No a menos que supiera que la apuesta era muy alta. Oh, infiernos, ni siquiera entonces.
Simplemente podemos levar anclas y dejarlo atrás dijo Farrington. Tom sonrió torcidamente.
¿Sí? dijo. Te gustaría eso, ¿verdad? No tendrías que confiar tu temblorosa carne y tu aporreante corazón a una aeronave.
Cada vez estás más cerca de volverme loco, Tom.
De acuerdo. No volveré a decir nunca más una palabra sobre ese tema. Además, sé que no hay ni un hueso cobarde en tu cuerpo.
Entonces, ¿qué vamos a hacer? Recuerda, si seguimos con nuestra navegación, cuando lleguemos al Polo Norte, si llegamos algún día, Pete puede haberlo resuelto ya todo.
Oh, infiernos dijo Farrington. ¿Cómo puede ser uno de Ellos? Son superiores a los seres humanos, ¿no? Y puedo asegurar que Pete no es ningún superhombre. No te ofendas, Pete.
Tom miró a Frigate con ojos entrecerrados.
Puede estar pretendiendo ser sólo humano. Pero no creo que nadie pueda mantener una fachada así durante veintiséis años.
Tú siempre has hablado demasiado.
Mira quien habla, el Viejo Jefe Corre-a-contárselo-a-todo-el-mundo en persona. Farrington encendió otro cigarrillo. Rider siguió su ejemplo, y luego dijo:
¿Quieres uno, Pete?
Estáis intentando matarme con humo dijo Frigate.
Extrajo un puro de su bolsa de bandolera. Creo que también necesito un trago.
Todos lo necesitamos. Tom, haz los honores. Luego se contaremos todo. ¡Dios, vaya alivio!