Después de que mi madre se fuera, no sin antes de recordarnos, por centésima vez, que tuviéramos cuidado y la llamáramos si ocurre algo, mi amiga y yo acompañamos a mi tía abuela a su cuarto para evitar cualquier desarrollo adicional con el profesor Víctor, además de que ella insistió tanto en volver a dormir a su habitación para recuperarse.
Preocupada por ese asunto, le pregunté si era necesario un ritual para regresar a ese estado y necesitaba algo de nosotras, pero ella me dijo, a través de gestos y su torpe escritura, que ahora tenía la capacidad de hacer dormir su alma a voluntad, también le pregunté si era consciente del artefacto hablado por el profesor, sin embargo, mi tía se limito a mover su cabeza para indicar que no tenía ni idea de lo que él estaba hablando.
Sin más dudas que resolver con ella, nos dirigimos hacia el sótano y la acompañamos hasta la puerta de su cuarto, quería aprovechar ese último momento cuando solo estabamos nosotras tres y le dije "si necesitas algo, avísame, trataré de proporcionarlo".
Al escuchar mis palabras, ella, de repente, tomó de las manos de Sol, la libreta y el lapicero que sostenía y escribió lentamente, arrancó la hoja del cuaderno para doblarla varias veces, después de hacer esa acción, me la entrego y sin esperar a que yo la leyera, entro a su habitación y cerró la puerta.
Me quedé bastante desconcertada por su acción, Sol, en cambio, parecía más interesada por el contenido del mensaje y me instó a leer lo que había escrito. Así que bajo el aliento de mi amiga, decidí abrir la nota y leerla, mientras ignoraba a cierta persona sobre mi hombro, en ella, decía lo siguiente: si quieres ayudarme, solo tienes que decirme cualquier pista que puedas descubrir por casualidad sobre cómo solucionar mi condición. No te sientas obligada a investigar algo, ya ellos hicieron todo lo posible y no encontraron nada, solo la suerte o el destino podrían darte la respuesta que tanto deseo.
"Bueno, eso si es un asunto bastante difícil de hacer ¿Por qué no le preguntamos a Plutón a ver si conoce algo sobre eso?" Dice Sol después de leer la nota escrita.
"No creo que tenga algún conocimiento sobre eso, ya que ni siquiera supo sobre el ritual para dormirla cuando le pregunté hace años" le respondí sin muchas espectativas sobre su sugerencia, bueno, al menos, no se pierde nada por intertarlo.
"Espera, ¿Le dijiste sobre lo que pasó con tu tía abuela antes que a mí?" Inquiere mi amiga indignada y enojada al darse cuenta del significado detrás de mis palabras.
"No le he dicho toda la historia, solo le hice una pregunta "casual" por curiosidad que fue despertada por cierto libro" le respondo para aplacarla y agrego "nadie del club, a parte de ti, lo sabe".
"Me alegro de tu voto de confianza, pero, aún así, deberías decirles sobre la situación. Ellos, por lo general, te cuentan sus secreto" me aconseja después de calmarse de su arrebato imprudente.
Pero ya no le estaba prestando tanta atención a su consejo ya que una cierta palabra, se la robó en su mayor parte "¿Qué quieres decir con que por lo general? ¿Hay algo que me estén ocultando?" Le pregunto mientras la miro con sospecha.
Sol trato de justificar su desliz de lengua, pero al ver mi mirada cada vez más intensa, desistió y me respondió a la defensiva "oye, no tienes derecho a reprocharnos, tú también nos ocultas cosas".
Me quedé sin palabras para refutarle ya que ella tenía toda la razón, aún así, eso no me impidió darle una mirada para hacerle entender que esto no se quedaba así, lo solucionaremos más tarde, cuando todo esto haya acabado.