La mañana fue refrescante, probablemente por la esencia de las rosas en el aire.
De todos modos, pedí el desayuno en el «Vía Rosetta», un hotel de clase alta donde pasamos la noche. El ingrediente principal de los platillos fueron las rosas. Me impresio- naron los pétalos de unas rosas comestibles llamadas «avidal», de las cuales se saca un jamón que se sirve sobre rebanadas de pan junto con una bebida floral.
Todo estuvo delicioso pero, particularmente, lo que me gustó más fue el té hecho de rosas. Tenía un refrescante aroma y un fuerte sabor. Una clara señal de un producto de calidad que definitivamente iba acorde con la atmósfera elegante de la que disfrutamos en el desayuno.
Después de comer, empezamos las preparaciones para entrar al [Zoológico de Rosas Azules]. La entrada estaba ubicada en las raíces de la enorme rosa azul en el centro de la ciudad.
Nos adentramos juntos en la rosa azul, notamos muchas miradas a ambos lados del ca- mino, pues ya que básicamente solo hay razas de insectos y plantas, nos veíamos fuera de lugar. Bueno, a menos que se metieran en nuestro camino simplemente los ignoraría- mos. Como de costumbre, solo pasamos de largo.
Habiendo llegado a las raíces, a pesar de ser relativamente temprano, ya había una gran multitud. Perdimos tiempo esperando nuestro turno para entrar, hasta que al final se abrió un camino entre las raíces que se dirigía al interior de la mazmorra.
[Zoológico de Rosas Azules] está clasificada como una mazmorra de tipo subterráneo, aunque eso no significa que tenga muchos pisos, de hecho solo hay dos pisos aquí. El segundo piso es solo para la pelea contra el jefe, por lo que la mayoría de los aventureros no pasa del primero. La estructura es extraña en contraste con otras mazmorras.
Como sea, no hay que subestimar el primer piso, es gigantesco. Dentro, el techo es azul como el cielo, con una imponente altura de un kilómetro y un diámetro de más de unas cuantas decenas de kilómetros. Incluso saltando con todas mis fuerzas no lo alcanza- ría. Además, hay bastante vegetación. Eso es algo normal en este mundo, por lo que es bastante fácil perderse y quedar atrapado dando vueltas por siempre. Simplemente no puedes bajar la guardia aquí; el bosque está infestado de trampas naturales.
Asimismo, dentro del [Zoológico de Rosas Azules] hay una fuerte anomalía magnética que ocasiona un comportamiento extraño en las brújulas. Si no estás preparado con anticipación y de alguna manera tienes un modo para sobrevivir, el porcentaje de muer- te es de casi del 90%, porque la mayoría de los principiantes no alcanzan la salida. No obstante, para mí no es un problema. Considerando el mapa que está en mi cabeza, no me siento amenazado.
Como en estos últimos días, avanzamos con Vengador y compañía al frente. La mayoría de los monstruos que encontramos pertenecía a razas plantoides o insectoides:
Caballero de Rosa: La unión de varias rosas con una forma semejante a la humana. Se defendía con un escudo de rosas y atacaba con espinas.
Lobo Rosado: Una planta carnívora que embosca a sus presas atrayéndolas con un dulce aroma, a la par que simula la forma y los hábitos de los lobos.
Culebra Traidora de Rosal: Unos reptiles que pretenden ser flores en la
pradera y muerden todo lo que se les acerque.
Pitón Traidora de Rosal: Cuando una culebra traidora crece tanto que ya no puede ocultarse, se convierte en pitón traidora.
Abejas Supersónicas: Van volando libremente por el laberinto con una ve- locidad superior a la del sonido y dejando bombardeos aéreos por todos lados mientras recolectan néctar.
Aunque hay un montón de monstruos plantoides también hay muchos insectos dis- frazados de rosas. Debido a la pequeña cantidad de pisos, los monstruos son fuertes y abundantes en número, así que uno debe andarse con cuidado.
A pesar de todo eso, envié a mis subordinados al frente.
Dada la gran variedad de monstruos del tipo planta, si matas un insecto, te suelta artí- culos asociados con rosas o sucedáneos.
Hay un montón de cosas que quiero probar después de conseguir unos cuantos artícu- los. Por ejemplo, las larvas de las abejas y su miel de primera clase. Simplemente no creo que exista nada mejor.
Hoy no nos cruzamos con ningún jefe de piso y tampoco encontramos la entrada al piso inferior. Mala suerte, quizás es porque este lugar es simplemente demasiado grande. Incluso los busqué con mis clones y, cuando al fin encontré uno, no pudimos hacer nada pues ya lo habían derrotado y no apareció de nuevo.
Para cenar tuvimos larvas. ¿Por qué? Pues porque recordé cuando apenas había rena- cido y fui atacado por un enjambre de abejas. Me hizo sentir nostálgico. Pero por aho- ra hablemos del presente. Con la ayuda de [Invocación: Archidemonio] invoqué unos cuantos [Orcos Negros], que me permitieron disfrutar una noche de sueño placentera.