Fue el tercer día de las rebajas inaugurales de la tienda. Hoy no trabajé allí, sino que centré mi energía en las reformas del primer piso de la mansión. Dado que el capataz y los otros obreros trabajaron durante todo el día ayer, puse a otros miembros del grupo a trabajar con ellos para ayudarles con las tareas más duras. Y parece que todo fue mejor de lo que esperaba. Pese que aún nos tome un poco más de tiempo terminar las refor- mas, puede que lo hagamos antes de lo previsto.
Por cierto, elegí a Samurái como encargada de la tienda y se la confié a ella. Tiene a los dos humanos (hombre y mujer) con las profesiones [Mercader] y [Vendedor], así como los rápidos elfos que poseen la buena imagen comúnmente asociada con su especie, y que los humanos suelen llevar con ellos como ayudantes. Con todo, creo que será capaz de llevar bien la tienda.
Durante la noche, repusimos la mercancía vendida ayer, y todavía nos queda de sobras. No debería haber ningún problema en eso. Ahora que lo pienso, parece que el negocio ha ido mejor que ayer.
Mientras estaba trabajando en las renovaciones, me pareció oír una voz pidiendo ayuda. No obstante, simplemente endurecí mi corazón y permanecí en silencio.
Hoy fue diferente a ayer, vinieron muchos [Alquimistas] a comprar materias primas, y algunos comerciantes ricos a revisar la situación. Intercambiamos gran cantidad de mercancías a la vez.
En este mundo, donde básicamente se compite con las otras tiendas por precio, nos benefició establecer los precios de nuestra tienda un poco bajos para su calidad y reba- jarlos aún más por la inauguración. Quería mantener esos precios, pero dado que hay mucha gente que regatea el precio en este mundo, decidí tolerarlo hasta cierto punto. Debido a esto, al parecer Samurái las pasó un poco canutas. La tenacidad de los merca- deres veteranos es impresionante, ¿no es cierto?
Los otros miembros con profesiones del sistema mercantil tuvieron algunos altibajos también. Para ser honesto, había bastante diferencia en sus niveles de profesión. Esta- ban en completa desventaja y no paraban de perder terreno en todo momento.
El regateo fue constante, y se desarrollaron numerosas batallas de palabras. Sin embar- go, fueron ganando experiencia cada vez que esto sucedía. Usé mis clones para vigilar a Samurái y los otros.
Incluso si la otra parte se acababa saliendo con la suya, la mayor parte de los productos que se vendieron fueron obtenidos en la guerra y todavía no los habíamos usado. Tam- bién teníamos materias primas del Gran Bosque. Por esa razón, obtendríamos ganancias con el simple hecho de venderlos, incluso regateando el precio por debajo de su coste que ya es mucho menor de lo habitual. Siendo esta la situación, esa fue la conclusión a la que llegué.
Como Samurái y los otros miembros parecen haber obtenido experiencia de los eventos de hoy, estoy satisfecho. Además, inesperadamente, a pesar de haber rebajado mucho el precio, no dejaron nada por debajo de su valor. Por este tipo de esfuerzo, creí que su trabajo merecía algún tipo de recompensa.
Por la tarde, mientras pensaba en todo esto, Samurái y los demás cerraron la tienda. Parece que su fatiga es más mental que física.
Después de que las chicas y chicos de Solitud acabaran su entrenamiento, les dejé a ellos la tarea de limpiar la tienda y reponer la mercancía. Más tarde, usé el aceite aromático que me dio Doriane-san hecho especialmente por ella para practicar los masajes con aceite a los miembros de la tienda que trabajaron duro.
Cuando acabemos las renovaciones de la primera planta, abriremos una tienda de masa- jes para nobles y mercantes adinerados. Para evitar problemas cuando abramos, mien- tras aún tenga tiempo, debería terminar de entrenar a los miembros del grupo con ta- lento que podrían ser buenos en ello.
También la usaremos como recompensa para aquellos que trabajen en la tienda, claro está. Yo me encargaré de Samurái, que fue quien más contribuyó hoy. Y para los demás, es cosa suya elegir a sus respectivos compañeros.
Por alguna razón, Kanami-chan y Pelirroja no tenían pensado recibir un masaje en la tienda. En su lugar, empezaron a practicar con Auro y Argento como compañeros a ambos lados de mí.
Dado que no hay leyes en este mundo que digan que alguien necesita licencia nacional para ser masajista, es tan fácil que únicamente tenemos que enseñarles las técnicas de manos básicas y otros puntos a tener en cuenta. Aunque se necesita bastante tiempo y experiencia para que alguien consiga unas manos hábiles, sentí que quizá serían capaces de conseguir profesiones como [Masajista] o [Masajista Especialista] si continuaban practicando. Pregunté por ello a Pelirroja, pero no parece haber oído de ningún oficio como estos. Sin embargo, es posible que exista pero la gente simplemente no lo sepa.
Sí... he decidido que, si sucede, sería un buen descubrimiento.Había muchas camas ali- neadas en una de las habitaciones de la mansión, y cuando practicamos durante aproxi- madamente una hora, la fatiga de los miembros de la tienda se redujo significativamente por los efectos de la combinación entre el aceite aromático especial de Doriane-san y el masaje en sí mismo.
Como la temperatura de la habitación se mantenía a una temperatura agradable gracias a un objeto mágico, la mayoría de los que recibieron el masaje se durmieron a la mitad.
Cuando pregunté a los miembros que aún estaban despiertos, parece que los masajes fueron bastante efectivos incluso entre los que dieron los novatos. Con más entrena- miento, serán útiles en el futuro.
Mientras nos separábamos, les dije a aquellos a los que entrenaba que practicasen por ellos mismos cuando tuviesen tiempo.