Con el cielo despejado, el primer día del Torneo de Héroes comenzó con el juramen- to del Rey. Temprano por la mañana, explosiones mágicas resonaban sobre la arena a modo de fuegos artificiales, mientras que las personas iban entrando para obtener un asiento. Todo el mundo, desde el campesinado a la nobleza, estaba completamente en- tusiasmado por el evento.
Las familias reales y nobles del Reino Sternbild y el extranjero estaban todas reunidas en habitaciones privadas reservadas, compartiendo una grata conversación ociosa mien- tras observaban el progreso de las contiendas.
El festival tiene más o menos dos días de duración y durará hasta mañana. Hoy es más bien la ronda preliminar del torneo, ya que los participantes que sean heridos hoy no serán capaces de participar en los combates de mañana. Dado que el primer enfrenta- miento era un todos contra todos, me pareció interesante y decidí verlo.
Con un gran número de personas confinadas en un área pequeña, fue bastante el espec- táculo. Hubo momentos dramáticos que causaron grandes aplausos de entusiasmo de los espectadores. Cuando un participante que pensaban que era fuerte era derrotado, su reacción era aún mayor.
También había una gran cantidad de apuestas llevándose a cabo. Un número inesperado de jugadores quiso tomar grandes riesgos al apostar por los concursantes populares. Aunque yo veía claramente y sin dudarlo que iban a perder.
Yo estaba en las gradas de los nobles, como guardia personal de Principesa. Pese a que pensé que tendría que cambiarme de ropa antes de entrar en la habitación, ya que estaba trabajando y tenía la ventaja de llevar una bendición divina, obtuve el permiso para en- trar con mi atuendo habitual. Pude sentir las miradas de los que me rodeaban, y aunque hubo algunas bastante hostiles, en realidad, también hubo muchas otras amables.
Sin embargo, como era de esperar, los de otros países, los nobles del reino, así como el mismo hermano mayor de Principesa, y sus hermanas y hermanos menores, interactua- ban entre sí con solo sutiles emociones mezcladas.
Mientras yo, ya que tenía libertad para comer cualquiera de sus platos, llenos de frutas frescas y otros alimentos de alta calidad, me sentía muy feliz conmigo mismo. No obs- tante, después de comer un plato lleno de comida yo solo, Caballerito me regañó, así que tuve que contenerme. En lugar de eso, me dediqué a observar cómodamente todo el recinto, cuya temperatura se mantenía constante con el uso de un objeto mágico.
Ya que se me había brindado la oportunidad de continuar protegiendo a Principesa en un lugar tan maravilloso, expresé mi agradecimiento.
El resto de gente solo podía utilizar los asientos del público general y no los del área de nobles, así que tuve que estar muy alerta durante mi trabajo como guardaespaldas para que nadie se colara. A pesar de que podría haberme relajado, no lo hice.
Posteriormente, a medida que se acercaba la noche, todos los eventos programados ter- minaron sin incidentes.
Por la noche, habiendo concluido el día con 64 participantes principales que avanzarían a la batalla principal, los espectadores comenzaron a moverse en grupos hacia la capital real. Los puestos de venta de comida y juegos recreativos abrieron hasta altas horas de la noche, una velada festiva mucho más animada de lo habitual.
Mientras los nobles y la familia real asistían a una cena entre la multitud, sus mentes se llenaron de oscuras intenciones. Dado que ese era el caso, y por desgracia yo era el guardaespaldas, no pude participar en el festival como habría querido. En vez de ello, di instrucciones a los otros miembros de disfrutarlo por mí. Ahora bien, Kanami-chan me estuvo acompañando toda la noche. Dábamos un poco el cante.
Entonces, yo estaba hablando casualmente con Principesa mientras le cubría las espal- das, cuando la Primera Reina apareció con una copa de vino en la mano. Supongo que ya la recuerdan, la misma reina que está obsesionada patológicamente conmigo...
Debido a la relación entre la Reina y Principesa, que eran madre e hija, reían entre sí a menudo. Hasta ahí bien. Sin embargo, fue cuando la Reina me miró en una ocasión mientras charlaban, que un escalofrío me recorrió la espalda mientras susurraba algo en el oído de Principesa.
Si tuviera que describirlo, sus ojos eran los ojos de alguien que quería llamar la atención.
Después de ver a Principesa con una sonrisa feliz que obviamente refleja algo perverso,
de repente tuve una mala sensación en el estómago...
Fue inesperado, pero la Primera Reina se fue sin más. Parecía que estaba ocupada salu- dando y negociando con los miembros de la familia real de otros países. No surgieron más problemas después de eso y regresamos al Palacio Ámbar un rato después.
Cuando me hube asegurado de que Auro y Argento, que habían estado pasándolo bien con el resto del grupo, también habían regresado al palacio y ya estaban dormidos, de- cidí disfrutar de la luna junto a Kanami-chan, con una copita de alcohol.
Había comido un poco y tomado unas copas durante mi servicio de escolta, pero eso estaba lejos de ser suficiente. La temperatura se redujo gradualmente en la noche; era el momento perfecto para algo de alcohol fuerte caro de la mazmorra para entrar en calor. No conversamos mucho, simplemente bebimos en silencio a la luz de la luna.
Después, la atmósfera de la cita que comenzó a cambiar. Nos metimos en la cama y... Después de la competición, probablemente estaré ocupado con más cosas estupendas.