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El canino callejero volvió por nostalgia a aquel lugar debajo del puente, estaba realmente contento, por que sabe que ya tiene su premio, solo falta ir para obtenerlo, estaba tarareando una canción en su mente, su sonrisa era de alegría extrema, pero en todo su recorrido en el puente, no evito pensar o imaginar que antes, este lugar estaba lleno de vida, con sus hermanos jugando de esquina a esquina, sus travesuras, sus robos, sus experiencias, su confianza que tenían en el, todos esos momentos se reflejaban en solo imágenes y recuerdos del lugar, al recordar a su familia como esta, cualquiera se pondría nostálgico y hasta echaría unas lagrimas, pero este ser vivo no, estaba con una sonrisa bien marcada, como si no le importara todo esto, por que al fin de cuentas, dejara su vida anterior.
『🎵Hace frío y estoy lejos de casa🎵 Hace tiempo que estoy sentado sobre esta piedra Yo me pregunto🎵¿Para qué sirven las guerras?🎵Tengo un cohete en el pantalón🎵 Vos estás tan fría como la nieve a mi alrededor🎵 Vos estás tan blanca, que yo no sé qué hacer 🎵 La otra noche te esperé 🎵Bajo la lluvia dos horas🎵Mil horas como un perro🎵 Y cuando llegaste me miraste Y me dijiste, "Loco. Estás mojado, ya no te quiero"🎵』
Nuevamente este como lo hizo anteriormente, se estaba bañando en el río, se estaba poniendo de lo más arreglado y elegante posible, por que esta vez si es el día, limpio todos los problemas que tenía, se esforzó tanto que ahora le toca su gran recompensa del cuál tanto a luchado dese que nació, el poder estar con un humano, el de conocer el amor, que solo era camuflaje, el siente amor, claro, amor solo por el mismo, lo demás que no le salga como el quiere, no le importa.
Nuevamente arranco flores de un parque que recién acaban de crecer, nuevamente su boca mordía algo que no era su cuchillo, su fiel compañero que dejo atrás, su vida será diferente a partir de ahora, el sin corazón que era antes, ya no aparecerá más, ahora será un perro como cualquier otro, dispuesto a dar su vida por su humano, o más bien al contrarío, que el humano haga todo por el, el humano que el eligió y no a el, esa era su lógica. Al llegar a la casa de Nori, la puerta estaba cerrada para entrar al domicilio, pero esto no era nada para el, salto hacía el muro, busco por el patío en donde había silencio puro, pero se podía ver como estaba todavía esparcido por el lugar, los juguetes, objetos del antiguo animal mascota que tuvieron.
Como seguro de que le acogerán, este se orino encima de ellos, marcando así que es solo de el y de nadie más. En eso sus orejas se movieron, ya que captaron un sonido en el segundo piso de la casa, era Nori quién todavía seguía en cama, ya se habrá levantado ya hace tiempo, o recién lo estará haciendo, no se sabe.
El canino callejero se alegro de esto, empezó a mover la cola con alegría, quería ladrar pero se detuvo, ya que prefiere darle una sorpresa de frente, que no se lo vea venir, así como lo hizo anteriormente. El canino callejero salto a los muros, para luego de forma fácil saltar al tejado.
Nori estaba recostada en su cama, su mirada estaba perdida, tenía sus brazos al frente, donde empezó a remangarse una y ya se podía ver como de las puntas cocidas que tenía, empezaba a formarse cicatrices. Al ver esto no evito ponerse triste, una porción sea por su apariencia de como quedo, pero lo que más le dolía, era que cada vez que veía estas heridas, era recordar a su antiguo amigo canino, quién era un perro serio incluso de cachorro, pero se esforzaba a mucho a su manera para no hacer sentir mal a los demás, por eso mismo se gano el nombre de Caballero, por que le juro eterna lealtad a la Damisela.
No paso todavía bastantes días desde que se llevaron al Rottweiler, por eso el dolor todavía estaba presente, su desconcierto fue tanto, que no se dio cuenta que por la ventana había entrado alguien muy interesado en ella, quizás este alguien sea quien le haga olvidar todos los problemas que tuvo, pero parece que será muy difícil.
『(Allí esta! Que bien huele ese cuarto, huele a comodidad, se ve que esta familia tiene la vida fácil, y eso es lo que buscaba, parece que mi Damisela esta triste, y aquí es donde entro yo, dándole felicidad a otros, me pagaran a mi con felicidad)』
El canino callejero salto hacía la cama de Nori, respirando por la boca, con la lengua para afuera y una actitud amigable, estaba el ser infiltrado, dejando su ramo de flores en la cama, este estaba entusiasmado de como saldrán las cosas, en su mente se imagina que Nori rápidamente le atenderá y le amara con todo su ser, pero al pasar minutos y ver que no hubo reacción por parte de Nori, este no evito estar confundido, e inclinar la cabeza, este se acerco y empezó a hacer pequeños empujones a Nori, pero la niña no reaccionaba, el canino callejero rápidamente hizo mostrar su desgano frunciendo el ceño.
『(No me digas que estas rota?.....No....No....Esto no puede ser!! No te estropees cuando es mi momento!!! Haces que todo lo que e hecho hasta ahora!! No valga la mísera pena!!! Has algo!!! Levántate!!! Recompénsame por lo que e hecho por ti!!! Todo lo e hecho por ti!!! Matar a mis hermanos, humanos, y demás perros!!! Todo fue tu culpa y así me las vas a pagar???¿¿¿ Déjame ver tu cara para decirte tus verdades!! No me gusta que estén decaídos!!!! Dame dame dame damee!!!! Dame mi felicidad!!!!)』
El canino callejero que estaba molesto y sacando conclusiones el solo de todo esto, en su enojo al final de sus palabras, Nori se percato de que este perro estaba a su lado, e inconscientemente lo primero que hizo fue abrazarlo, Nori abrazaba con fuerza, como soporte mientras nuevamente lloraba en silencio. El canino quién hace poco estaba molesto, paso a cambiar de emoción, de la ira a la felicidad, su mandíbula marco una sonrisa y sus ojos brillaron.
『(Que es esto!!Queesestoqueesesto!!!Que es!!!! Un abrazo!!! Un humano me esta abrazando con todas sus fuerzas!! Mi corazón no para de latir mil por segundo, y este calor cálido, este olor que puedo percibir mejor, que bien se siente, esto es de los pequeños lujos que tienes al conseguir la felicidad? QUE BIEN!!!!)』
El canino callejero, movía su cola sin control, estaba realmente feliz, Nori desde que perdio a su mascota, no a sido la misma de antes, fue un golpe emocional muy fuerte para ella, por varios días esta falto al colegio, trayendo consigo complicaciones a sus padres, pero ahora sus problemas de ella son peores y siente que sus padres no debieron hacer lo que hicieron. Nori al ver que estaba otro perro a su lado, no evito aferrarse con cariño, por que su amor hacia estos animales es muy grande, el canino callejero vio de cerca el rostro de Nori, lo niña se limpiaba las lagrimas para poder conocer mejor a este canino.
『(Ugg....si que te dejo peor de lo que imagine, quedaste bien fea con esas heridas, pero no importa, yo te quiero de todas formas, mientras seas bueno conmigo, no me importa lo demás)』
El canino paso a lamerle el rostro a Nori con su lengua, este saboreo algunas lagrimas que estaban cayendo, pero también este se alegro todavía más, por que pudo saborear de a primera, las heridas profundas de Nori, aquel sentimiento le hace hervir de gozo.
Rápidamente un estomago rugió en el cuarto, era tanto de Nori como del canino callejero, este perro rápidamente ladraba con fuerza, le estaba pidiendo comida a Nori, donde ella se levanto de la cama, también para comer y no quedarse sin energías, Nori preparo el desayuno no solo para ella, si no para el canino callejero y Mr.Chochi, el perro se maravillo por tener un plato lleno de comida y leche a un lado, era todo un lujo para el, que se lo termino en un par de segundos, pero no había quedado satisfecho, que al voltear al ver la mesa, vio que también había un plato para Mr.Chochi, y pues bueno, los peluche no comen.
El canino callejero salto hasta el asiento de Mr.Chochi empujándolo este al suelo, donde de forma sin control por no haber comido nada por un tiempo, este abría su hocico y empezaba a comer, la mesa al final termino sucia y empapada de los restos de comida, pero el canino este al final sonrío como nunca al por fin poder decir.
『Estoy lleno!!! ya no puedo más!!!』
Era la primera vez que comida hasta quedar satisfecho, Nori quien todavía no había tocado su plato, al ver que el perro comió todo lo que había, paso a voltear también a todo el desastre que dejo que ahora toca limpiar, lo normal sería llamar la atención del canino, pero Nori le ofreció de su plato también al canino.
『(Enserio??¿¿¿ para mi??¿¿ pero yo ya estoy lleno, nahhh, me lo como de igual forma!! Todo para mi!!! Si!!!)』
El perro sin control, comería también del plato de Nori, mientras que la niña trataba de mostrar una sonrisa, pero era una sonrisa muy débil, al ver bien a Nori, ella estaba mucho más pálida que antes, al igual que sus brazos se veían más flacos que antes, no había comido por varios días, sus ojos de igual forma se notaban cansados que en cualquier momento se cerrarían. POM!!! Nori sin más cayo al suelo por falta de energía y alimentación, el canino callejero termino de comer, pero al notar el ruido, este no se sorprendió de lo que puede estar pasando a Nori.
『(Vas a dormir ahí? Pero si arriba tienes una buena cama, si que cambiaste mucho desde la última vez que te vi, bueno, no importa, el trabajo de un perro, es estar al lado de su humano, supongo que me recostare contigo, hasta que alguien venga, me dio sueño después de comer mucho)』
Nori no se movía para nada, se podía ver su labio seco y su cuerpo sin fuerzas, pero el canino callejero no le importaba esto, solo su comodidad, pero tal como dijo, este estará al lado de su humano a quien le juro lealtad, este se recostó al lado de Nori mientras también cerraba los ojos, en lo que para el, ya era su nuevo hogar.
En la noche, cuando llegaron los padres, rápidamente se alarmaron al encontrar a su hija tirada en el suelo, donde también encontraron al canino quien este bostezaba por el buen sueño que tuvo. Rápidamente los padres tomaron a su hija en brazos y se lo llevaban al hospital, a los segundos de esto se percato el canino callejero, que lo primero que hizo es enojarse al ver como otros humanos se llevaban a su humana, pero su reacción fue tarde, los humanos habían cerrado la puerta con llave, dejando al perro adentro.
『(A donde se la llevan!!! Devuélvanme a mi humana!!!!)』
Con ira este se escaparía de la casa por la puerta del patio, no le gustaba para nada que le alejen de lo que tanto se esforzó obtener, el canino vio el carro de la familia y como subían todos, este sin más se lanzo para atacar a estos adultos, pero justo la puerta fue cerrada chocando este sin logro alguno.
『(HIJOS DE PUTA!!!! A donde llevan a mi Damisela!!!!No permitiré!!! Que me quiten mi felicidad!!!!!)』
El perro nuevamente mostraba ser alguien hostil y lleno de malicia, este sin importar nada más, correría con todas sus fuerzas para perseguir al carro, donde dentro estaba el padre manejando y Nori en los brazos de su madre que estaba muy preocupado por ella, mientras que detrás del carro, estaba el canino callejero corriendo con todas sus fuerzas, su ira con su expresión era muy notoria.
Pero al final, el auto fue mucho más rápido, llegaron al hospital mucho más antes, donde llevaron a su hija para que el médico la analice y la ponga en buenos cuidados, a los pocos minutos, de forma brusca que nadie del personal se lo esperaba, entro un perro por la puerta principal, corriendo sin contenerse por todo el lugar, con ayuda de su olfato, este estaba buscando a Nori.
『(Donde esta donde esta donde esta!!! Por que me hacen esto!!!! Acaso no puedo ser feliz!!! No me merezco una recompensa!!!! Si lo de hace rato lo fue....VAYA MIERDA POR LA QUE E LUCHADO!!!!)』
El canino callejero logro captar el olor de Nori, donde lo llevo hasta una puerta, pero no podía ser abierta, ni aunque rascara o embistiera con todas sus fuerzas, el canino estaba desesperado en recuperar lo que consiguió, pero luego se detuvo al captar olores similares a las de Nori, volteo a mirar a su detrás, eran los padres de Nori que estaban esperando sentados los resultados, el canino ya parecía captar lo que estaba pasando, este era un hospital donde tratan a los humanos, es la primera vez que esta en uno así que su impresión fue moderada.
El canino decidió en esperar al lado de esta puerta hasta que pueda estar con su humana, pasaron como 20 minutos, las enfermeras que pasaban por el corredor y ver al canino, no evitaron querer echarlo, pero rápidamente este mostraba ser agresivo y gruñía para advertirles que no le van a sacar, al final, el doctor salió para dar la vista buena de que Nori se estaba recuperando de su malestar, pero el primero en ir al lado de Nori, fue nuevamente el canino callejero, que entro de forma rápida y vio a Nori despierta tirada en la cama del hospital, le estaban aplicando una vía intravenosa en el brazo, para que recupere todas las energías, sangre, todo lo que perdio por no alimentarse bien, se escucho un ladrido, era el canino callejero quien se asomaba a la cama con sus 2 patas.
『Por que haces esto!!! No ves lo preocupado que estoy!!! Pero avisa si te sientes mal!!! Yo no voy a saber todo!!!! No quiero perderte!!!! Si te pierdo!!! Si te pierdo....yo....』
El canino callejero estaba ladrando a Nori como si le estuviera hablando, los padres e incluso el medico se quedaron sorprendidos por la acción de este canino, de verdad que el 4 patas estaba muy preocupado, pero a Nori se le brillaron los ojos al ya haber tenido una experiencia igual antes, donde paso a acariciar con su mano, la cabeza del animal, y con un tono de voz suave dijo.
『Gracias *sonríe* 』
Nori estaba sonriendo de corazón después de mucho tiempo, esto incluso para sus padres, que en las noches fueron a revisar como estaba su hija, y siempre la encontraron con una expresión fría, les dolía que ya no sea la hija enérgica y hasta a veces testadura que era antes. También esta noche vieron otra cosa, nadie sabia quien era este perro, tampoco lo sabía Nori, que comento ella que simplemente se le apareció esta mañana, los padres también comentaron que vieron al perro correr tras el carro por el retrovisor y que espero al lado de la puerta vigilando que nadie entre.
El canino callejero, sin importarle nada, se lanzo a la cama para estar más junto con Nori, nuevamente empezó a lamerme el rostro y a jugar con ella, donde la niña resplandecía por la diversión que estaba viviendo.
『Me lo voy a quedar, quiero a este amigo』
Comento Nori al poco rato, el canino callejero siguió lamiéndole, en especial el rostro a Nori, podría verse muy bonito y todo, pero en temas de salud, tener un perro encima de ti no creo que sea lo mejor. El doctor le explicaba a los padres que mejor echen al perro de aquí, pero los padres al ver a su hija poco a poco ser como antes, decidieron no hacerlo, que se quede así unos minutos más.
Con la experiencia ya vivida de tener un perro de raza, aquella familia volvería a empezar pero esta vez con este perro, que parece que es muy cariñoso y leal a Nori, quienes los padres buscaron esto desde el inicio para su hija, y hoy más que nada que el le esta haciendo sacar esa sonrisa tan linda que tiene, tal como dijo el canino esta mañana, hoy consiguió un hogar donde encontró y lucho por su felicidad.
Con el pasar del tiempo la familia se estaba recuperando del desastre que paso con el Rottweiler, pero había un solo problema, ya que este perro, con el único quien era bueno era con Nori, este siempre sospechaba de los demás, incluso de los padres, les gruñía si veían que se acercaban a su hija, con signos de morderlos. Cuando era momento del paseo, Nori salía junto con su nueva mascota para jugar, la vecina de al lado quien siempre saludaba agitando la mano, eso era antes, ahora cada vez que lo hace, tiene que ocultarse rápido a su casa, ya que el canino callejero se iba a lanzar con ira a todo aquel que se dirigía a Nori.
Era un cambio brusco, con todo aquel extraño, raro este perro era muy agresivo, pero con solo Nori mostraba ser alguien bueno, pero este fue su último paseo, ya que en el camino, este perro se peleo con otro quién solo olfateo a Nori por curiosidad, mostrando poco a poco lo real como era y que todo lo demás era solo una fachada, este perro no dudaba en defender lo suyo y en exigir lo que quería, ya que cuando tenía hambre, hacía un escandalo, ladraba, si tenía ganas de orinar se orinaba, no importa el lugar, de igual forma defecaba cuando llegaba el momento.
『Dame comida』『Dame agua』『Ráscame la panza』『Tengo ganas de jugar, juguemos』『Pero que rico es lamerte la cara』『Este es mi territorio, lo voy a orinar』
El canino rápidamente imponía sus reglas aún sin importarle todo lo que perjudicaba a los demás, solo le importaba una cosa a este perro, su comodidad y estar con quien la persona se lo da, y esa era Nori, que poco a poco empezó a sentir que algo iba mal, que no era como lo esperaba, pero aún con todos los problemas que traía este perro, lo cuido por unos meses, incluso se vio como el canino callejero quien digamos estaba en su edad adolescente, entro a su adultez.
『Otro día nuevo, rápido humana, que hay que desayunar, me muero de hambre, ah! denuevo hice caca en tu alfombra, límpialo, empieza a oler feo』
El perro estaba insistiendo empujando el cuerpo de Nori, quien para este momento, ya no tenía ningún punto en su cuerpo, pero ahora solo quedaron cicatrices que ya no le duelen, solo son ahora una marca que pese lo feo que fue, para ella fueron los años más bonitos de su vida hasta ahora. El canino estaba moviendo la cola por que podrá comer, caminaba junto a su humano, pero rápidamente Nori tomo su peluche Mr.Chochi y empezó a hablar con el.
『Mira nada más!!! La princesa esta floreciendo!! Cada día más guapa』
『Si que no te guardas nada Mr.Chochi, cuantas habrán caído con tus palabras, déjame adivinar, cero quizás??¿¿ aún así, gracias por tus palabras, lo mejor que uno puede hacer, es seguir avanzando』
Entre risas y una conversación cotidiana, estaban los 2 mejores amigos conversando el uno con el otro, rápidamente esto puso celoso al canino, que desde tiempo este peluche esta ganando más puntos que el mismo, un ser no vivo le esta ganando, y eso le hacía revolcarse, por pensar en todo esto, se había quedado atrás, que le cerraron la puerta dejándole encerrando en el cuarto. Este primero se confundió, inclinando la cabeza, rasco la puerta e incluso ladro, pero nada de esto lograba que le abrieran la puerta.
『(Ahora que lo pienso, yo nunca tuve una conversación con mi Damisela)』
El canino se puso a pensar en lo que acaba de decir, y al compararse con el peluche que últimamente es quien le saca más risas a Nori que el, le hacía hincharse las venas y tomar una postura amenazante ante la ocasión, ya que siente que le están quitando su lugar, su lugar de comodidad, su felicidad, y cualquiera que no este deacuerdo a lo que dice o le disgusta, lo va a pagar caro. En esta noche, mientras Nori estaría durmiendo, el perro como volviendo a ser como antes, se desharía de todo quien se ponga en su camino.
Ya era de noche, incluso los padres de Nori estarían durmiendo, Nori también estaba con su peluche Mr.Chochi en brazos, el único que se despertaría en este noche de luna llena, sería el canino callejero, como si fuera un asesino, que lo es, no hacía ningún tipo de ruido, con sus dientes estaba por tomar con cuidado el peluche. ¡¡¡!!!-----Sintió rápidamente con su olor que había otro perro en la casa, en su territorio, y aquí su instinto de que no le quitaran ni se meterán con lo que es suyo, este abrió la ventana del cuarto, con habilidad bajaría hasta el patio, buscando con ira al perro que se infiltro en su hogar.
『DONDE ESTAS!!! PRESENTATE COBARDE!!!! ESTE ES MI HOGAR!!! NADIE VA A HACER LO QUE QUIERE AQUÍ!!!!! TE VOY A REBANAR COMO LO HACIA ANTERIORMENTE!!!!』
El perro callejero tenía los pelos del cuerpo parados para intimidar más, sus ojos estaban llenos de ira, además que desde hace tiempo que no pelea así que esta también emocionado, cuando por fin logro detectarlo, se percato que el perro que había entrado a su casa, era un Chihuahua, quien se estaba paseando por el patio, rápidamente este empezaría a correr para localizarlo, y cuando lo tenía por fin acorralado, cara a cara, este paso a burlarse de la pequeña raza.
『Jjajajaja que eres tu? Enserio eres un perro? Que perro más pequeño y mierda eres, literalmente estas diciendo que la vida te joda, y esos ojos saltones, pareces de todo menos un perro, que asco me das al simplemente verte, será fácil acabar contigo, nadie se mete conmigo』
El perro callejero se encontraba confiado por la diferencia de tamaño, fuerza y de seguro agilidad que hay entre estos 2, el chihuahua simplemente se quedo callado, donde sin perder el tiempo, el perro callejero se lanzo con sus dientes para acabar con el, rápidamente el chihuahua salto a su cabeza logrando esquivarlo, para después lanzarse a su cola para morderlo con sus dientes pequeños pero filudos.
El perro callejero resistió el dolor, donde rápidamente como si fuera un tonto, empezaría a girar en su propio eje para poder alcanzar al pequeño chihuahua. Pero mientras esto estaba pasando en el patio, al haber dejado la ventana abierta, un visitante similar al perro callejero, entro al cuarto de Nori, donde la niña se despertaría, y se sorprendería de lo que al inicio era un simple comentario tonto, se convertiría de alguna forma real.
El perro callejero volvió a pensar con la cabeza, donde junto fuerzas en su cola para agitarlo, así liberándose del chihuahua, se pudo notar como el chihuahua sonrió por algún éxito que tuvo, donde pasaría a escapar de la casa saltando a los muros. El único cansado parece que era el perro callejero, y se dio cuenta que toda la habilidad que tuvo, a desaparecido por tener una vida muy fácil, almenos lo único que no perdio fue su agilidad para subir a las casa, pero cuando llego al cuarto de Nori para ahora si deshacerse de Mr.Chochi, se topo con una escena peculiar, Nori estaba atento e impactada delante de otro perro de la calle como el, le estaba haciendo mímicas, algo muy raro, incluso ni el entendía que estaba sucediendo delante de el.
Solo veía a otro perro mover la cola delante de Nori, como si le estuviera comunicándole algo, sea lo que sea que le este diciendo, dejaba una gran impresión a Nori, y de lo que pasaría más adelante, el otro perro se veía de la calle, desarreglado y que sabe lo duro que es vivir en todo aquello, entre su comunicación de cola hacía Nori, este se vio interrumpido por el ataque repentino del perro callejero que no dudo en proteger lo que es suyo. Pero rápidamente este fue humillado, ya que hubo una pelea en el cuarto de Nori, pero más que pelea, fue todo un arte que ver, el perro que se infiltro, estaba esquivando al otro, mientras seguía comunicándose por medio de la cola, diciendo verdades mayores.
『Que es lo que dices???¿¿¿¿ Deja de mover la cola como un idiota!!!! Esto es una pelea!!!!』
POM!!! Producto de su propia fuerza y despiste, el perro de Nori se golpeo contra la pared, mientras que el perro infiltrado salto hacía la ventana, parece que ya dijo todo lo que tenía que decir, y se retiraba sin más del lugar, el perro callejero se agitaba la cabeza para evitar el mareo, rápidamente tomaba posición de ataque, ya que sentía una sensación que desde hace tiempo siente, el cuál es la desconfianza hacía el, en su mente todo violento se decía quien era.
『(Quien es!!! Quien es el que me esta negando!!! Quien no esta deacuerdo conmigo!!! Que aparezca sin más!!!! Le voy a destruir!!! Nadie me contradice!!!!)』
Sentía nuevamente esa desconfianza hacía el, es de las peores sensaciones que odia en todo este mundo, que tengan algo contra el, pero cuando volteo de forma agresiva, lo único que vio fue como Nori, la niña que recuperaba su sonrisa, le miraba de forma indignada, como si supiera la verdad de todo.
Cuando el perro infiltrado apareció, este se notaba que tenía más habilidad que los demás, ya que su forma de pensar podía ser similares a los humanos, con su cola empezó a comunicarse de forma perfecta con Nori, contándole que esta viviendo actualmente en una mentira y que todo fue un plan, de que el que pasará todo esto, es producto de las acciones del perro al que llama mascota, le contaba a detalle todo, como si hubiera estado ahí en cada delito cometido de este canino, todo encajaba, desmintiendo muchas casos que sucedieron, pero lo que más le hizo creer que lo que decía este perro, era la palabra "Caballero"
『Logramos rescatar a quien llamas Caballero, actualmente esta en una jauría, haciendo lo que siempre a hecho, ayudar y ser leal a todos, aunque tiene unos problemas por sus traumas, esperamos que un día se recupere, el me pidió que te dejara un mensaje "mi acto que te hice nunca lo podre remediar, lo siento si te hice llorar, ahora aunque es difícil, estoy nuevamente intentado acercarme a los humanos, no te preocupes, todos nuestros recuerdos, junto con Mr.Chochi siempre los atesorare, gracias por todo Damisela, se que volverás a avanzar si te quedaste estancada, me hubiera gustado decírtelo yo mismo, con mis orejas como tu comentaste, hasta luego" 』
Al entender esas palabras Nori, supo que todo lo que le contaba este perro infiltrado de la calle, era real, ya que nadie más sabría de cosas tan personales que paso con su Caballero, con alguien quien mucho confía al frente de todas las demás verdades, Nori se percato que todo lo de ahora, fue un plan malévolo del peor canino de la historia.
Nori miraba indignada, traumada por saber la verdad y todas las cosas que hizo este canino para llegar donde esta, recuerda que con este perro, no hubo un lazo como los demás humanos con su mascota, este perro simplemente se aprovecho de ella para conseguir todo fácil, la comodidad de un hogar, todo era por el, siempre fue por el, lo único que le importaba era su propia felicidad y de nadie más, arrebatarlo de otro para tu propio beneficio, era lo que más le indignaba a Nori.
『Vete.....』
Nori susurro con miedo, donde el canino, sus orejas se movieron, y como si hubiera sido una escena del pasado, este preguntaba nuevamente si escucho perfectamente, Nori con fuerza pasaría a decirle todo lo que quería en este momento.
『QUIERO QUE TE VAYAS!! NO PIENSO TENER MÁS A UN SER TAN EGOISTA COMO TU!!! COMO PUEDES SER TAN MALO? NO TE DUELE LO QUE HICISTE!! Y TODA PARA QUE! PARA TENER DONDE COMER, RECIBIR CARIÑO, UNA CAMA COMODA, MATASTE PARA TENER SIMPLEMENTE UNA VIDA FACIL, LO QUE BUSCASTE, TU FELICIDAD!! ES SOLO TU BIENESTAR, DAS ASCO!! sin duda eres el peor perro que conocí, no quiero volver a verte, lárgate, fuera!!!! Devuélveme a mi Caballero!!!』
Nori desato toda su ira, que incluso los padres de Nori se estaba despertando por los gritos de esta, el canino callejero, al escuchar como le decían todo esto en la cara, empezó a llenarse de ira como un volcán, le acaban de decir toda la verdad y que no valía nada sus esfuerzos, le negaban lo que a hecho toda su vida. El perro tomo pose de ataque, ya que no aceptaría a nadie quien le trate de esa forma.
『Y que tiene de malo!!! Para mi esa es mi felicidad!!!! Tener una vida cómoda!! Todos quieren eso!!!! Que de diferente hay entre lo que yo quiero y los demás no!!!! Ya me cansaste!! tu también me rechazas!!! Te voy a matar!!!』-『La vida de un perro no es para darle lealtad a otro!!! Es para darse lealtad a si mismo!!! Los queremos por nuestro propio bien!!!! No somos nada si no es por ustedes quien nos toman!!! Que asco de verdad posible para mi hay!!!! AAAAAAHHHHH!! Estoy contigo para recibir todo lo que tienes, mi lealtad siempre fue solo para mi y nadie más』-『Todas estas pasar de eras junto con ustedes, no hizo dependientes de los humanos!!!! AAAhhh!!! Tan bajo cayo nuestra especie!!!!』
Uno se esfuerza de manera honrada, mientras que otros usan la manera más rata e inhumana posible, en este mundo donde se separa en lo correcto y lo malo, ver a alguien que se aprovecha de los demás, es considerado lo peor, si, presidentes de Latam y congresistas, son unos joputas malparidos, y lo peor, es que nosotros tenemos la culpa por creer en ustedes desde un principio, aprovecho para decir aquello aunque no tiene nada que ver. El perro se lanzo contra Nori para poder matarla, sin contenerse mostraba sus dientes y garras, pero antes Nori no pudo defenderse el ataque de un animal, ahora que se armo de valor, luchaba para poder devolverle su gran resentimiento y mentira todo este tiempo, el resultado, Nori uso a Mr.Chochi como escudo, donde el perro lo desgarro sin más y como una escena de su madre, este arrancaría la pata del peluche de forma brusca y se lo tragaría, se había vuelto totalmente loco al final. Cuando los padres llegaron, encontraron a su hija peleando con el perro, y como era de esperarse, los padres protegieron a su hija mientras que echarían a la calle al animal.
Los padres también se sentían disgustados por este perro, que no les dolía lo más mínimo botarlo a la calle, al lugar donde pertenece, el perro toda esa noche, se desahogo con sus ladridos, diciendo también todo lo que piensa respecto a aquella familia y teniendo un odio grande hacía Nori. Pero no acabo solo en esa noche, este perro se quedo ladrando varios días frente a esta casa, desgastando su voz, sin comer ni beber nada, lo único que podía hacer para almenos alimentarse, es vomitar una y otra vez la pata de Mr.Chochi, quien tenía grabado el nombre de Nori en ella, mirar ese nombre le hacía recordar que todo lo que hizo, al final lo le sirvió para nada, su destino era la calle para siempre.
En su rabia, ya estaba totalmente loco, su pelaje se caía, sus sentidos empeoraron, no era ni la sombra de lo que era antes, cuando era un cachorro ganaría fácilmente a su yo de ahora, sus ladridos se detuvieron al ver un gato pasar, era el mismo gato que la jauría estaba persiguiendo.
『Comida.....comida.....COMIDAAA!!!!!』
Usando todas sus fuerzas, pasaría a perseguir al gato quien este lo guiaría hacía Kenzo, y todo este resentimiento, lo pagaría con aquel niño. Y hablando de Kenzo, volviendo a la normalidad, ambos humanos, Kenzo y M habían descubierto la ubicación del tesoro, ahora mismo esta lloviznando así que se puede caminar sin ningún peligro, el mapa los llevo a un lote vacío, no había nada, solamente pilas de concreto.
『Ya me dio sueño, oye mocoso, encuentra rápido el tesoro』
『Se supone que debería estar por acá....pero como acaba de llover, toda la tierra se convirtió en barro....no queda de otra Onii-san azul, hay que excavar en todos los lugares y rincones』
『Bien! Eh??.....Ya que....solo espero que el tesoro no sea algo emocional o sentimental, ya sabes, "el tesoro es el viaje y las amistades" blahh.... si es eso me voy a pegar un tiro en la cabeza, todo menos un mensaje positivo porfavor』
Kenzo intentaba reír ante los comentarios de M, pero entre las columnas, se escucho un ladrido, ambos volteamos a ver que era lo que estaba pasando, cuando vimos, era el perro callejero del inicio de nuestro viaje, rápidamente con su cola se comunicaba con nosotros, parece que no la vamos a tener fácil.
『Acaso piensan dejarme fuera de todo esto? Y eso que yo fui el de la idea para divertirnos todos, yo también quiero divertirme antes de que se acabe el día. No se olviden de mí, conmigo empezó y conmigo terminara, yo seré su último desafío antes de que consigan lo que han estado buscando!』
-------------------------------------------→ Continuara