Al caminar hacia mi habitación, me dí cuenta, de nuevo, que Damira no me seguía. Ella observaba a la idiota. Alice y ella charlaban mientras Damira las observaba descaradamente. Avancé algunos pasos, pero me detuve. Camine en reversa dos pasos y repare mi postura para verlas directamente. Alice detuvo su conversación para verme. Me observaba. No sabía exactamente qué hacer. Realmente no pensé mucho en qué hacer en el momento. Avancé algunos pasos y no pude contener la risa. Con mis mangas cubrí mi rostro. Sabia que podia escuchar pequeños sonidos que escapaban. Pensé en iniciar una conversación, darle una excusa a mi risa pero, despues pense, por que razón? no todos tienen que entender la broma."
Alice se percata de estas risas. Parecían burlas hacia ella, un comportamiento digno de castigo. La niña continuaba hablando. Alice no podía evitar desviar su mirada a Vermothel. Sin ruptura de carácter de ningún tipo, Alice se mantuvo en calma. Damira, quien observaba, rompió en risas. Vermothel aún no se percataba de la atención que Alice le daba. Lágrimas comenzaban a surgir de sus ojos. De igual manera usó sus mangas, esta vez para limpiarlas. Mientras lo hacía logró ver como Alice lo veía. En ese momento su risa se detuvo por completo. Comenzó a caminar con dirección a su habitación, con pasos cada vez más largos. Estaba demasiado consciente de cada paso, cuidaba tanto de los movimientos naturales que el cuerpo hace que se volvió irremediablemente rígido. Sus manos no podían balancearse, parecían ajenas a el. Sin pensarlo demasiado comenzó a morderse las uñas. Rasgaba la uña desde los bordes libres hasta la lúnula provocando pequeños sangrados.
"Mierda, mierda, mierda, mierda, mierd…."
-Alice- Zalem, la entrevista tendrá que esperar, esta bien si mejor voy a tu casa después? No tiene que ser hoy verdad? Si lo es entonces muy mal! Debes de ser responsable con tus proyectos.
-Zalem- no no, no es tan urgente.
-Alice- bien,entonces te voy a pedir que te vayas a casa.
-Zalem- de hecho esperaba que tu me llevaras, es algo tarde y pues..
-Alice- eso no va a pasar.
Zalem- p..pero, per..
-Alice- llama a alguien, no saldré por algunas horas…
-Zalem-...bien..
" no hay nada que deteste más que el sentimiento de perder el control de mi propio cuerpo. El de no saber con exactitud lo que sucede y depender por completo en alguien más. El no poder pensar antes de actuar y ser guiado por la euforia del momento. El terror de no comprenderme a mí mismo y saber que cualquier cosa que haga sin mi consentimiento sigue siendo parte de mí. El terror de saber que no hay nada que yó pueda hacer. Pero me dá más terror el pensar que yó pueda llegar a escojer ser esa versión de mi. Eso significaria renunciar a mi mismo. Eso significaría que yo dejaría de ser una persona. Me convertiría en nada más que una bolsa flotando en la mierda guiada por la locura que me rodea. Seria uno más de ellos. Significaria que todos tenían razón. Que no soy más que un desquiciado."
"Mientras yacía recostado me daba cuenta de cómo mis entornos se distorcionaban. La luz y la sombra se movían como si la fuente de luz bailara a mi alrededor. Sentía como mi cabello crecía y se enrredaba alrededor de mi cuello. Mis extremidades se hacían cada vez más pesadas. Mis dedos parecían estar enrredados en hilo, no podía moverlos sin sentir piquetes de agujas. Mi voz, casi hundida entre mi respiración, no podía siquiera salir de mis labios. Gritaba con todas mis fuerzas, pero solo me sentía más pesado. El oxígeno a mi alrededor se perdía, el vapor que emanaba de mis adentros entraba y salía de mi, asfixiandome con calor. No lograba escuchar nada más que los latidos de mi corazón. Fue tan fuerte que me percaté de que poco a poco latía más rápido. Estaba muriendo.