Sun hee no podía decir nada, sentía que en cualquier momento explotaría por lo nerviosa que estaba.
Los latidos de su corazón comenzaron a aumentar de velocidad rápidamente, ¿como había terminado en esa situación solo por un simple abrazo?
"Quizás fue muy inesperado, seguro que es eso"
No podía liberarse del brazo de su esposo, realmente parecía que no la iba a soltar.
Sun hee buscaba cualquier manera de liberarse, si seguían así para ella sería imposible dormir.
Ya que no podía liberarse por su fuerza decidió poner alguna excusa sencilla.
—L-la luz del baño esta encendida, deja que me levanté para poder apagarla, no creó que sea bueno que este encendida toda la noche.
Enseguida intentó volver a quitar el brazo de Seong-Jin, casi gritó de la impresión al darse cuenta de que la volvió a agarrar y esta vez todavía más fuerte.
Ahora era imposible quitar su brazo.
—No estoy ciego, se puede ver perfectamente que la luz está apagada, al menos intenta decir algo lógico—dijo sin quitar su brazo.
—...
—No intentes quitar mi brazo, te agarrare más fuerte si es necesario.
Sun hee no dijo nada, era mejor quedarse en silencio ya que seguramente no tendría respuesta para cualquier pregunta que le hiciera.
La respiración de su esposo en su cuello hacía que fuera imposible dormir.
***
Por la mañana Sun hee se despertó todavía con sueño, sentía que no había podido dormir en toda la noche por la incómoda posición en la que estaba.
Todavía con los ojos medio cerrados giro la cabeza para poder ver a su esposo, suspiro aliviada cuando pudo ver que él no estaba allí.
Solía levantarse muy temprano para poder ir a reuniones, viajes... su horario siempre estaba completo, era inusual que pudiera tomar algún descansó, aunque algunas veces hacía algunas excepciones, cuando no le apetecía ir simplemente se quedaba en la mansión como si no hubiera ningún problema por saltarse el trabajo.
A partir de ahora él dormiría diariamente con ella ahí, ella no estaba acostumbrada, sabía perfectamente que le esperarían noches en las que casi no podría dormir por la incomodidad.
Poco después de haber estirado su cuerpo y intentar abrir completamente sus ojos por fin pudo levantarse.
Fue al baño y lavó su cara para mantenerse despierta.
Un rato después salió del baño y cogió la tarjeta que le dió el director, aquél era el mejor momento para llamar, además, si tardaba mucho sería peor.
Marcó el número rápidamente y espero a que alguien contestase, pocos segundos después alguien aceptó la llamada. Una voz femenina se escuchó desdé el teléfono:
—¿Hola, puedo saber quién llama?— preguntó la mujer con una voz suave.
—Soy Sun hee, el director de una serie me dió está tarjeta, dijo que contactara con usted.
—Creo que sería mejor hablar de esto en persona, el director ya me aviso, los horarios ya están listos, están en el edificio donde se harán las grabaciones, ¿puedes ir allí dentro de una hora?
—Sí, gracias.
La mujer le dijo cual era la dirección del edificio y le pidió que esperará en la entrada, por ahora parecía que sería una manager bastante amable. Sun hee se sentía aliviada por eso, en un día había conseguido que alguien la odiara, le preocupaba que Kim Hyun hiciera algo para intentar arruinar su protagónico, ella era bastante famosa por lo que podría hacer comentarios negativos sobre ella y arruinar completamente su carrera, Sun hee todavía era una novata, no podría defenderse mucho.
Intentó olvidar todos los pensamientos negativos y se preparó para poder ir al lugar acordado con su nueva asistente.
Cuándo terminó, bajo rápidamente por las escaleras y salió de la mansión, un chofer ya estaba esperándola dentro del auto, parecía que podían leer sus pensamientos, realmente era aterrador.