Aleja llegó para consolarme despues de la forzada separación con Dayana, el mismo año a finales; no fue una relación, eramos como amigos, pero si tuvimos historia un corto tiempo, ya que ella debia irse del país para progresar.
-Soy poderoso cuando estoy contigo, quisiera ser omnipresente y observar cada respirar en ti y omnipotente para darte el mundo como tanto lo quieres; solo así sería feliz, por que la felicidad en ti es mi mayor premio.
¿Desde cuando quiero eso? Desde que llegaste para darme una mano y colorear las etapas grises, no fueron malas intenciones tuyas, fueron unicamente tus ganas de verme bien. Por eso te agradezco y a pesar de no alcanzar a ser una relación por razones inevitables, quiero desearte el éxito y la felicidad, no olvides que estaré aqui pensandote desde la lejania, para cuando te sientas sola, recuerdes que tu nombre tiene en mi un pedestal.
*Le di la carta el mismo dia antes de que ella se fuese, en la mañana y despues le di un beso, engañandola pidiendole que hiciese una mueca con los ojos cerrados, le gustó y me devolvio un beso muy largo. Luego de unos minutos se hacía tarde, me despedí con lagrimas en los ojos.*