Regularmente me veía muy seguido con Dani, relativamente no pasaba un día sin que nos vieramos, aunque fuese por muy poco tiempo. A decir verdad el tiempo con él para mi es uno de los más bonitos que tengo, y desearía que todos los días nos viéramos más y hablaramos de cualquier cosa, simplemente para ver ese color avellana de sus ojos y esa sonrisa única.
Un día, salimos a un centro comercial, fue después de que él terminará sus clases, como no había mucho dinero y casualmente estaba lloviendo a cántaros, decidimos sentarnos un rato en una de las mesas de la zona de comida. Yo recordé tener unas cartas en la mochila y pregunte si quería jugar, accedió y saque la cajita de cartas de mi mochila.
Jugamos un par de partidas para ensayar, nos reímos un poco, hasta que él decide hacer apuestas en medio del juego, no soy de hacer apuestas en juegos de azar, pero supuse, siendo él, sería muy divertido, así que accedí. No recuerdo bien cuantas partidas perdí y quise intentar doblar, pero él era muy bueno, la suerte siempre estuvo de su lado, yo gane un par de juegos, pero él ganó la mayoría, y eran varios.
Cuando empezó a escampar un poco, le dije para ir al depa, ya que estaba relativamente cerca de donde estábamos, él dijo que si, asi que caminamos muy cerca el uno del otro por la pequeña sombrilla que tenía, mis manos estaban helando y sentía todo mi rostro arder, Dani llevaba la sombrilla y me hablaba de muchas cosas, en especial de anime, a lo cual también respondía para que no notase mi nerviosismo.
Llegamos al depa y preparé un poco de chocolate caliente para el frío, seguimos jugando cartas, obviamente apostando, quería superar sus apuestas, pero me fue imposible, al final él tenía que irse, ya había dejado de llover, ninguno de los dos había decidido el premio de la apuesta, y yo estaba nerviosa por eso.. lo acompañe afuera del edificio para despedirme, a lo cual caminamos un rato más y me dijo que ya sabía que pedir para su apuesta, al final de todo me dijo que quería una cita conmigo.. obviamente estaba de los nervios, en toda mi vida había salido con un chico en una cita.. pero no tenía más alternativa que aceptar y eso incluía sus condiciones. Luego llegamos a la esquina de la carrera (avenida, cuadra, manzana) y me preguntó que iba a ser lo mío, de los nervios que tenía no sabía que pedir, pero me siguió preguntando hasta que salió de mis labios unas sencillas palabras "kissu desu" (algo asi como beso en japonés >////<) al momento de decir eso, me apene mucho y aleje un poco de él a lo que él simplemente asiente y se va acercando poco a poco a mi, recuerdo que al principio negaba con la cabeza y caminaba hacia atrás, muy sonrojada, pero él me atrapó con sus manos y se acercó mas a mi.. Cuando sus labios tocaron los mios me envolvió un escalofrío que subió desde la parte baja de mi espalda hasta los párpados de mis ojos, fue un beso corto a lo que él responde "no estuvo mal.." supuse que para él mismo.. a lo que yo digo sin pensar "eso no fue un beso..", cuando recobró postura él sonríe y vuelve a acercarse a mi, un poco menos apenada, dejo que se acerque y vuelva a besarme, esta vez cerré mis ojos y disfrute el momento, fue un poco mas largo y estuvo mejor, quedé sin aliento cuando nos separamos, me toma de la mano y se despide, hago lo mismo y al momento de irse veo como mi mano se desprende de la suya y lo veo alejarse, con esa alegría en mi corazón por aquel beso.
Cuando subi al depa me encerré en mi habitación y me acosté en la cama aún con el sabor de sus labios en mi boca, sonreí como cual niña hasta quedarme dormida.
Fin