-Señor Binzor, atienda- Le dijo el profesor dando un golpe en el borde de su pupitre.
El sacó la cabeza de entre los brazos y miro a la pizarra. Habían pasado cinco años desde la masacre aunque también cinco años desde su llegada ala academia.
- Señor Binzor- Le volvió a gritar el profesor al ver que no respondía.
-¿Sí?- Dijo poniéndose en pie mientras lo miraba inexpresivo
- ¿Que clase es usted señor Binzor?- Le preguntó el profesor.
- ¿Clase?-Le pregunto confundido.
- Sí, por ejemplo la señorita Leblanc es una rastreadora- Le explicó señalando a una chica de cabellos rojizos y destellos anaranjados que al moverse por la leve brisa se asemejaba a una hermosa e indomable llama. Sus ojos aunque no eran especialmente grandes llamaban la atención debido al intenso color verde que la caracterizaba. Vestía una camiseta blanca levemente trasparente que dejaba entrever un tatuaje en su hombro izquierdo semioculto por su cabello. La muchacha le sonrió dulcemente.
- Soy un carroñero- Le susurró.
- Que extraño he visto muchos tipos en mi vida y nunca había oído hablar de esos.¿En que se caracterizan velocidad, fuerza, agilidad tal vez...?
- Lo he creado yo, señor- Le contesto antes de que terminara de enumerar las características.
- Eso si es interesante- Dijo mientras se le iluminaban los ojos y colocaba las manos en la mesa de Eric y lo miraba intensamente para tras unos segundos recobrar la compostura y alejarse de la mesa del muchacho-podrías compartir con toda la clase que caracteriza a tu "nueva clase"
- Veamos, por usar hechizos de invisibilidad y otros que quitan el sonido.
- Una vil útil para sorprender a tu presa y asesinarla algo típico de los asesinos ser ágil y rápido...- La campana que daba final a la clase comenzó a sonar.
- Bueno espero que la próxima vez nos hagas una demostración- dijo el maestro sin poder contener su felicidad antes de coger sus libros de texto y salir de la clase.
- Creo que te malinterpreta- Le dijo la chica pelirroja sentándose en la mesa de al lado.
- Sí, pobre-
- Una cosa Eric, si te pide una demostración ¿le harás la de desaparecer y quitarle la cartera o la de tratar de desnudar a una compañera?
- Tienes que admitir que fue divertido- Le dijo sonriente.
- Sí divertidísimo, pero no dejas de andar pegado a la pared, para ver venir la bofetada ¿me pregunto cuando te la dará?.
-Tranquila,resonará por toda la escuela- Le aseguró Eric esbozando una sonrisa.
Lucía era su mejor amiga,fue la primera persona con la que se relacionó tras el desastre y era una de las pocas personas que conocía su lado dulce y amigable ya que la cara que mostraba al resto del mundo era mucho mas fría y silenciosa.
- Admito que la clase que me he creado no sirve para mucho pero me mantiene vivo y me permite robarles las presas a otros, para mi, es suficiente.
En el pasillo
- Le aseguro que en nuestra academia solo entra la élite- Le aseguró el director mientras acompañaba por los interminable pasillos a una chica bajita a la que le caía un mechón negro junto al ojo izquierdo, hacia sintonía con su piel levemente pálida y sus ojos canela que transmitían una sensación de calidez. Su cabello era corto quedándose a la altura de los hombros, sus finos labios sin pintarle daban un aire relajado junto con su sudadera negra con un gato blanco bordado en el hombro lo mas curioso eran sus guantes en los cuales había bordadas unas enormes flores extrañas a parte de esto también lucía unos vaqueros y unas botas con hebillas con forma de delfín.
- Y ¿cuando podría empezar las clases?.
- Mañana,aunque ahora puedes ir a conocer a tus compañeros si te apetece, tu clase es la setecientos veintiuno- Le dijo el director. La muchacha le hizo una pequeña reverencia antes de irse.
Cuando la nueva estudiante giro la esquina el director se percató de lo que había hecho y salio tras ella lo más rápido que le permitieron sus cansadas y ancianas piernas.
- ¿De qué crees que será el próximo examen?- Le preguntó Lucía.
- No se pero estoy ansioso... el chico dejó de hablar cuando la desconocida entró en el aula con paso tranquilo.
Sophie con total indiferencia echo un vistazo al aula. La clase estaba organizada en forma de teatro. En el pequeño pasillo central se encontraban un grupo de chicos hablando, sentados sobre sus pupitres,se les veía felices pero en cuanto se percataron de la presencia de la muchacha sus expresiones cambiaron radicalmente. Algunos se mostraban confusos mientras otros la miraban asqueados.
- ¿Es una... ?
- Sí, lo es-Un murmullo inundo el aula.
- Un examen sorpresa ¿quizás? -murmullo en la clase.
- Que iba a ser si no- Todos comenzaron a levantarse de sus sitios y la miraron de una forma muy siniestra antes de recoger cúteres, tijeras etc y lanzarse sobre ella.
La joven los esquivó sin demasiado esfuerzo soltando golpes a diestro y siniestro lanzando a los alumnos por los aires.
- Eric,¿vamos?¿Eric?- El chico había desaparecido.
- ¡Acaben con esa puta bruja!- Gritaban los alumnos restantes tratando de cortarla con sus armas siendo esto en vano ya que acabaron por los suelos. La muchacha dirigió su atención a una mesa cercana.
- Te tengo zorra- le gritó Eric volviéndose visible y lanzándose sobre ella con su cúter.
La joven dio un paso a la derecha esquivando el primer corte que fue seguido de una patada que la tiró al suelo, rodó por este para impedir que el muchacho la apuñalara.
Cansada de huir se llevo la mano al cinturón y salio corriendo hacia el, Eric la imitó.
- !Ya basta¡-ambos se quedaron paralizados cuando entró un hombre alto con barba y cabello cano que llevaba una camiseta de tirantes y un bastón.
- Buenos días,señor director-Dijeron a coro.
- Buenos días,veo que ya habéis conocido a vuestra nueva compañera de clase- todos quedaron anonadados.