S: Pohan
Con un testigo menos… pudo ser un buen ayudante.
Además, se escapó mi oportunidad de poder extraer tal poder de la Nébula.
Sin duda era una de ellos. Esos rasgos, con esos ojos tiernos, su amabilidad, ese color inusual color en su cabello ondulado. ¿¡Qué mierda pienso!?, no debo tener en cuenta eso. Haré lo que sea por esa paz de la que me hablaban cuándo pequeño. Después de llegar hasta aquí, lo menos que puedo hacer es cumplir mi principio.
Aunque me duela, no debo ceder. Seguir cómo todo estaba planeado.
Cómo sea… jamás pensé que esto sería así. Ví en sus ojos el infierno por el que ha tenido que pasar, además que yo también contribuí en que pasara eso, ¿Sería misericordia por querer acabar con su sufrimiento?¿Ó la haría sufrir más? ¡Maldita sea!, no debo de…
Una chica pasó corriendo al lado de mí, vaya, parece muy apresurada¿Eh?¿En qué iba? Mm… no importa, encontraré alguna razón. Tal vez deba relacionarme con ella o… tomarla en el instante. Ya.
Sólo tomaré un descanso en la habitación.
[…]
Estaba agotado, tampoco estaba tranquilo con lo que hice. Pero estaba en mi camino hacia la paz.
—Pensé que tomarías tu tiempo afuera aún más enserio— había olvidado que estaba un tercer compañero, pero estaba ahí, mirándome desde su cama— sé lo que hiciste desde que entraste y te veo aquí, arrepentido— frunció el ceño.
—¿Qué quieres? Que no te importe lo que hago— intenté imponerle.
—Cállate farsante. A mi no me engañas. Imbécil. Conozco tú misión, y tú principio.
No tuve manera de contestarle, me amedrenté por oír cómo me conocía.
—Sé tu plan para la paz, no es muy listo de tu parte lo que quieres hacer por ello, aunque aprecio el sacrificio tan grande que haces. Tu amor… por un bien común.
—¿¡Cómo sabes eso!?— se lo dije con furia— estoy decidido sobre lo que voy a hacer, nadie me detendrá.
—Ni yo, ni siquiera tú podrías pararte, pero, ¿qué tal sí es la misma Berry?
—¿Berry?
—La chiquilla que buscas, además que no eres el único que la busca.
—¿Quién más?
—La Institución misma. Por eso mismo está aquí. La tomarán tan pronto tenga un principio.
—¿¡Qué planean hacerle!?— Lo tomé del pecho intentando amenazarlo— ¡Dime!
—Convertirla en el arma más poderosa creada— me lo impuso, con una serenidad inhumana— además, cuándo pierda toda utilidad, no será más que lo mismo que su familia. Un montón de polvo estelar.
Lo empujé hacia atrás.
—Ya presentó la primera fase de su poder tan inmenso, será cuestión de tiempo para que no esté aquí.
—Mierda… Berry… Haré lo que pueda para salvarla primero.
—¿Y volver a llevarla a ser esclava para tus propósitos? Qué egoísta.
—Cállate. Sólo me queda buscarla.
Corrí tan rápido cómo pude al candado y para buscarla en toda la academia. Tan pronto cómo cayera la noche sería tarde, empezaríamos a tener las clases. Estábamos a casi nada de la oscuridad.
S: Agy.
Apenas despertaba, estaba en una cama, era la de Mirenal. No sé por qué… sólo recuerdo a ella dándome algo de tomar. Ni idea de que habría sido. Y estaba al lado de Mirenal, esta tan hermosa. ¿Cómo no me había dado cuenta? Por mero impulso me puse sobre ella y le di un beso. Pero Mirenal se despertó. Y me quité tan rápido como pude.
—¿Qué haces?— me preguntó algo extrañada Mirenal.
—Perdón… yo… yo
Mirenal se acercó a mi a devolverme el beso, mientras tenía una sonrisa plantada en la cara.
No pude estar en mis sentidos enteros en eso beso, sentía que se me caía la cara de la emoción y la pena. Tampoco sé describir cómo me sentí en ese momento.
Estuve otro tiempo sobre ella, derritiéndome de la pasión, lentamente entregándome a Mirenal.
Sin darme cuenta, me estaba quedando dormida sobre ella.
Mi mente quedó en blanco y terminé tirada sobre ella. Pero ya estaba feliz. No necesito nada más.
A nadie más.
Aquí es donde debo estar.