El reino demoníaco ahora estaba combinado con el reino inmortal, haciendo que el pánico se extendiera en todas partes de este último. Los demonios siempre han sido el flagelo de la existencia del reino inmortal. Se podría decir que eran archienemigos.
Ese día, en el momento que los temblores se detuvieron, los inmortales en las cercanías salieron para averiguar lo que pasaba. Quizás debido a que Negrillo era estricto con sus demonios, no había movimiento en el reino demoníaco. Ningún demonio salió a ver. Por eso ninguna lucha ha estallado todavía.
Pero los inmortales que averiguaron lo que pasó se estremecieron. Esto no era solo la aparición de las puertas al reino demoníaco, la raza de demonios entera había migrado a su puerta.