—¡Maestra! —Yi Qing fue el primero en notar el regreso de Shen Ying, pero fue bloqueado por más de 10 emperadores cuando trató de acercarse.
El tiempo que Shen Ying estuvo ausente no fue corto y la batalla de la Secta Invencible se volvía difícil. Aunque las discípulas no fueran débiles, la otra parte simplemente tenía demasiadas personas, sobre todo cuando el Conjuro Protector de la Montaña se rompió, no tenían dónde retirarse. Con el tiempo, hasta los inmortales se cansaban y hasta había discípulas heridas.
—Buen Corazón —Lan Hua usó su Qi demoníaco para proteger a unas discípulas Inmortales Terrenales que eran más débiles. Luego se volteó y preguntó—: Por qué solo volviste tú, ¿Qué pasó?
—…
—Oye, ¿Estás bien? —viendo que no contestaba, Lan Hua la empujó—. ¿Por qué estás tan distraída?
—¿Qué está pasando?