Dentro de la caja más interna de Green Lake Agricola, Song Donglai, junto con Ao Wei y Gong Quan, estaban discutiendo planes para organizar el Blood Python Array y cómo organizar la mano de obra para cazar fácilmente a su poderoso enemigo. Eran perfectamente conscientes de la enorme apuesta que se avecinaba y de lo que significaba para ellos el éxito o el fracaso.
Si tuvieran éxito, se convertirían en carpas que saltaron a través de la puerta del dragón y volaron hacia el cielo, aunque un fracaso los enviaría directamente al camino sin retorno para dirigirse al Inframundo.
