Había dejado la bomba anti-espíritu que su padre le había dado como su verdadero último recurso. Un trueno ensordecedor retumbó en el aire cuando la bomba anti-espíritu explotó. El anciano del reino Nascent Soul se retiró frenéticamente, lanzando hechizos y artefactos en el aire como defensa. Pero se había parado demasiado cerca de Zhao Yameng.
No importa cuán rápido reaccionó, incluso si tuviera que teletransportarse, aún habría llegado un momento demasiado tarde. La Bomba Anti-Espíritu era el arma más poderosa que había inventado la Federación. El agujero negro que se había creado a partir de la explosión y las propiedades de sellado que tenía para el cultivo de uno provocaron un grito furioso del anciano cuando su cuerpo fue destrozado ante los ojos de Zhao Yameng.
