—Y dado tus heridas actuales, aunque tu tasa normal de recuperación podría ser asombrosa, ahora la velocidad de tu cicatrización de las heridas todavía debería estar afectada —Shu Ruanyu volvió a mirar el lugar por el cual había atravesado la lanza. Si ese lanzamiento de hubiera sido un poco más exacto, o si Qin Wentian hubiese sido un poco más lento para matar a su oponente, ya habría muerto.
La recuperación de Qin Wentian era realmente muy poderosa, la sangre dentro de su cuerpo gorgoteó, sus heridas ya habían dejado de sangrar.
Qin Wentian echó un vistazo al arma de cuarto nivel en sus manos, lo que Shu Ruanyu dijo era cierto, tratar de usar esta arma en su estado actual de hecho sería una carga inmensa para su cuerpo. Con una ligera intención de su voluntad, Qin Wentian mantuvo la lanza de sombra, sus acciones aturdieron un poco a Shu Ruanyu.
Ella lo miró mientras una luz arrogante brillaba en sus ojos.