—Oh, no están aquí. Pero esta área se siente importante —murmuró Dorian mientras miraba a su alrededor, sus ojos brillaban con interés.
Había aparecido en lo que parecía ser una gran mansión u hogar, llena de habitaciones que estaban conectadas por largos corredores blancos. Las paredes estaban cubiertas de líneas de energía destellante, lo que le daba una apariencia misteriosa a todo.
Justo en frente de Dorian había un gran globo amarillo brillante. Las chispas de energía revoloteaban de este orbe mientras giraba lentamente, rotando. Podía sentir una tranquila y pacífica aura saliendo de éste.
—Es posible que no pueda encontrarlos rápidamente si este lugar es tan grande como ese laberinto... así que podría destruir cualquier cosa que parezca importante. —se encogió de hombros—. ¡Luz táctil, actívate!
ZUMBIDO
