Frontera de Manhuang…
Dos figuras fisgoneaban por las cavidades del lugar a escondidas.
—Este lugar es relativamente más seguro. Aunque nos topemos con bestias, deberíamos poder lidiar con ellas teniendo en cuenta nuestra fuerza actual —a pesar de que la fuerza de Qiu Zhanyu no era tan espectacular, tenía bastante sabiduría de la calle.
Un lugar como ese sería más seguro que la mayoría del resto de lugares.
La mayoría de las veces, los artistas marciales no se molestaban en cruzar la Frontera de Manhuang, el motivo principal era que aquel lugar estaba bastante abandonado y no poseía ningún objeto de calidad.
—¡Ains! ¡Me pregunto qué le pasa al Hermano Mayor, tío! —Jin Zhengu comentó con preocupación.
—No te preocupes por eso. Estoy seguro que el Hermano Mayor estará bien. Aún puedo sentir los latidos de su corazón. Debería estar luchando en algún misterioso estado de conciencia o algo así ahora mismo —respondió Qiu Zhanyu.