—¿Cómo es posible?
¡En un abrir y cerrar de ojos, el Ancestro Tiburón descubrió que cada tesoro y puerta cerrada dentro de la Raza del Tiburón Colosal había sido forzado por un poder misterioso! Como si no estuvieran bajo ninguna restricción, todos los tesoros del interior salieron volaron por su cuenta.
La serena superficie del agua empezó a moverse un poco. Uno tras otro, puntos de luz se elevaron desde las profundidades del océano y aparecieron, densamente compactados.
—¡Estas…! —Cuando el Ancestro Tiburón divisó esos puntos de luz, su expresión cambió—. ¡Estas son las píldoras Shengyang!
Cuando Ling Wuwei vio aquello, él también estaba igual de perplejo. ¡No había esperado que esos tesoros aparecieran por su cuenta!