—¡Esto no tiene sentido!
Lin Fan era algo escéptico en ese momento. ¡No había esperado que las cosas salieran de ese modo! Todo el tiempo, la Chavala Shen Wu había estado exponiendo una expresión de: "¡Tu Mamaíta no lo va a dejar pasar hasta que te ponga las manos encima!" ¡Pero pensar que admitiría la derrota de repente! Aquello hizo que Lin Fan se quedara estupefacto.
Lin Fan detuvo el movimiento de sus manos y echó un buen vistazo. Quería determinar si la Chavala Shen Wu estaba fingiendo. Pero daba igual por qué lado lo mirara, no pudo distinguir ni un ápice de engaño en ello.
En ese momento, la expresión de la Chavala Shen Wu era de aturdimiento. De hecho, incluso había dos torrentes de lágrimas bajando por ambos lados de sus mejillas. Era como si esas fueran lágrimas de un corazón roto después de ser maltratada por alguien.