"Sólo estamos dando un paseo, y no es que estemos haciendo algo malo", dijo el pequeño monje.
Si la parte opuesta fuera un cultivador moralmente recto, no tendrían que preocuparse por hacerse daño... e incluso si la parte opuesta era un cultivador malvado, no debería haber ningún problema mientras fueran lo suficientemente cuidadosos. Sin embargo, en caso de que algo inesperado realmente sucediera, el pequeño monje tenía a su disposición un tesoro mágico que salvaría vidas, así como otro tesoro que podía usar para invocar al Hermano Tres Reinos.
La chica un poco mayor todavía estaba un poco preocupada, y dijo: "Todavía estoy de la idea de que es mejor no dar lugar a más complicaciones".
