Xiao Yan sonrió y dijo:
—Relájate, déjame la Secta de las Nubes Brumosas a mí. Les haré pagar muchas veces más la deuda de sangre que le deben a nuestro Clan Xiao. Claro, también está la desaparición de padre… les haré pagar el precio por todo eso, un precio que es peor que la muerte.
—Actualmente eres el pilar que apoya a todo el Clan Xiao. Siempre y cuando permanezcas de pie, el Clan Xiao se parara con orgullo. ¡Por eso, debes tener extremo cuidado cuando actúes! —dijo Xiao Li con suavidad.
Xiao Yan asintió ligeramente. Colocó en su corazón el recordatorio de Xiao Ding antes de alzar la mirada y pasarla lentamente a su alrededor. Los miembros del clan actualmente ya no eran tan cautelosos y ansiosos como estaban antes. Una especie de expectativa y confianza inusuales llenaban sus rostros. ¡El origen de esa confianza llegaba de él!
En ese momento, Xiao Yan volvió a sentir que la carga pesada en sus hombros realmente era pesada…