Detrás de la puerta de madera, había una habitación espaciosa que estaba cubierta por una leve luz fosforescente. Xiao Yan caminó lentamente mientras miraba por todas partes. La sorpresa apareció gradualmente en su rostro. La pared interna de toda la habitación estaba repleta de una capa de jade blanco crema. Incluso el suelo bajo sus pies estaba conformado por pedazos bien ordenados de jade blanco sin la presencia de grietas. La leve luz fosforescente estaba siendo emitida por esos pedazos de jade blanco.
—Qué gran obra maestra.