La atmosfera de la habitación bien iluminada contenía un leve olor a pólvora. Había más de diez personas de pie alrededor o sentadas dentro de esa habitación. En ese momento, había cierta ira en los rostros de esa gente.
—Jefe, esa Puerta Pan realmente no sabe lo que es bueno para ellos. En realidad se atrevieron a golpear a Fu Ao hasta dejarlo en ese estado. Si no nos vengamos de ellos, ¿cómo nuestro Grupo Blanco sobrevivirá en el futuro en la Academia Interna? —un hombre en la habitación de repente no pudo evitar controlarse mientras golpeaba la mesa con su palma, y gritaba con furia.
—Es cierto, jefe, no podemos dejar que el hermano mayor Fu Ao sufra esta derrota —la voz de ese hombre acababa de sonar cuando las personas restantes en la habitación la siguieron y demandaron uniformemente.
