La voz un tanto vieja del anciano Su reverberó lentamente, haciendo que todas las batallas se detuvieran en ese momento. Esos estudiantes mayores de la academia interna en la pendiente de la montaña abrieron sus bocas un poco. Quisieron decir algo, pero fueron incapaces de hacerlo.
—¡Oh!
El silencio afuera del bosque siguió por un rato antes de esos estudiantes inmóviles ya no pudieron resistir la energía salvaje de sus corazones. Soltaron una ovación en voz alta. En su emoción, a algunos de los estudiantes nuevos ni siquiera les importó el género mientras abrazaban a sus compañeros que estaban a sus lados. Sus cinco a seis días de batallas difíciles habían dado frutos al fin. ¿Cómo no podían regocijarse?