El loto de fuego púrpura verdoso se expandió rápidamente en los ojos de Luo Hou. La energía terriblemente caliente, la cual penetró el aire y lo rodeó, hizo que el sudor frío que apareció en su frente se vaporizara en un instante.
En el suelo, la hierba verde oscuro se marchitó rápidamente en donde el loto de fuego pasaba. Finalmente, la hierba se convirtió en cenizas negras que esparcieron con el viento.
Un terror de ser inútil para enfrentar la fuerza destructiva se alzó tranquilamente en el corazón de Luo Hou mientras sentía que se disparaba explosivamente hacia él. Esa clase de energía era demasiado grande. Incluso tuvo una leve intuición de que, si era impactado directamente por ese hermoso loto de fuego, era probable que fuese convertido en nada más que polvo como la hierba verde.