El enorme campo abierto estaba totalmente en silencio. Tras un largo rato, ondas de suspiros arrepentidos sonaron desde los asientos de la audiencia en ambos lados.
—Ah —la Pequeña Princesa sacudió suavemente el polvo que había salido disparado hacia sus mangas. Ella levantó su cabeza, vio la niebla blanca impregnando desde el lugar en que Xiao Yan estaba y con un suave suspiro sacudió su cabeza. Nadie había esperado que el caballo negro más grande de la Gran Reunión de esa temporada, quien pudo competir contra ese joven misterioso, en realidad terminaría fracasando por una razón tan ridícula.
—Esta vez, la reputación de la asociación realmente sufrirá una gran pérdida.
