Dentro de la silenciosa habitación, Xiao Yan, que estaba sentado de piernas cruzadas sobre la cama, abrió sus ojos lentamente. Un brilló destelló en sus ojos oscuros. Aire turbio se movía por su garganta mientras él exhalaba. El rostro de Xiao Yan ligeramente emitía un brillo débil. Claramente, el Dou Qi en su cuerpo había aumentado grandemente luego de esa sesión de entrenamiento.
—La energía contenida en este Veneno Abrasador ciertamente es muy grande. Aunque la he refinado un gran número de veces, aún posee una energía tan sustancial —mientras sentía su Dou Qi que se estaba volviendo más denso y poderoso, Xiao Yan no pudo evitar murmurar suavemente.