—Ese chico… ¿en realidad invocó una llama púrpura? No me digas… ¡¿Es una Llama Divina?! ¿Cómo puede ser?
Todos los alquimistas dentro el salón miraron con shock la crecida y ardiente llama púrpura en el caldero medicinal. Ya que había una cortina de luz separándolos, ellos no podían estar seguros de los detalles exactos de la llama. Sin embargo, el color de la llama, definitivamente, no era una Llama Dou Qi ordinaria creada por el Dou Qi condensado.
—¿Llama Divina? —Frank y Ao Tuo intercambiaron miradas e inmediatamente sacudieron sus cabezas.
—No lo parece… es más, con la fuerza de ese chico, ¡él no debería ser capaz de controlar a la intensa Llama Divina con tanta facilidad! —Ao Tuo miró fijamente la Llama Púrpura que estaba creciendo bajo el control de la Percepción del Alma de Xiao Yan mientras decía con voz profunda.
