En el salón principal, Xiao Zhan y los tres ancianos del clan estaban conversando emocionadamente con el anciano extraño. El invitado parecía tener algo que le pesaba en la mente, pero cada vez que estaba a punto de llegar al tema, se tragaría sus palabras y lo cambiaría. Cada vez que lo hacía, la delicada chica a su lado le dirigiría al anciano una mirada sutil, pero firme…
Tras escuchar su conversación por un tiempo, Xiao Yan se aburrió y su cabeza estaba decayendo lentamente…
—Xiao Yan-gege, ¿sabes quiénes son?
Justo cuando Xiao Yan estaba a punto de quedarse dormido por el aburrimiento, Xun Er, quien estaba a su lado, abrió su libro antiguo y le preguntó a Xiao Yan.
—¿Los conoces?
Xiao Yan miró a Xun Er con curiosidad.
—¿Viste el símbolo de una espada plateada con nubes en el puño de sus túnicas?
Xun Er dijo con una pequeña sonrisa.
—¿Oh?
¡Xiao Yan miró los puños de los tres y vio claramente el símbolo bordado de una espada que brillaba en las nubes!
—¿Son de la Secta de las Nubes Brumosas?
Xiao Yan preguntó con perplejidad.
Aunque Xiao Yan nunca había salido al mundo real, había leído libros sobre esta Secta. El clan de Xiao Yan vivía en una ciudad llamada Ciudad Wu Tan, la cual era parte del Imperio Jia Ma. Aunque esta ciudad era una de las ciudades más grandes del Imperio Jia Ma, aún era eclipsada por el tamaño del imperio a pesar de tener a la Cordillera de Monstruos Mágicos en su detrás.
Dentro de la ciudad, el clan de Xiao Yan era el más grande. Además del Clan Xiao, había otros dos clanes que competían con él, pero, incluso después de veinticuatro años de sangre y conflicto, eran incapaces de superar al clan Xiao…
¡Si el clan Xiao era la mayor potencia de la Ciudad Wu Tan, entonces la Secta de las Nubes Brumosas sería la mayor potencia de todo el Imperio Jia Ma! La diferencia entre el clan Xiao y la Secta de las Nubes Brumosas era enorme hasta el punto donde el padre de Xiao Yan, Xiao Zhan, quien mantenía un rostro estricto y áspero, era extremadamente respetuoso frente a estos invitados.
—¿Por qué están aquí?
Xiao Yan susurró.
Los delgados dedos de Xun Er se detuvieron.
—Tal vez está relacionado contigo, Xiao Yan-gege…
—¿Yo? ¡Pero no tengo ninguna relación con ellos!
Escuchando la respuesta de Xun Er, Xiao Yan pausó antes de sacudir su cabeza y susurrar.
—¿Conoces el nombre de la chica de allí?
Xun Er miró a la chica.
—No, ¿tú sí?
Xiao Yan arrugó sus cejas y observó el rostro de la chica que Xun Er señaló. No recordaba haberla visto antes.
—¡Ella es Nalan Yanran!
Una expresión curiosa apareció en el rostro de Xun Er.
Xiao Yan se tensó.
—¿Nalan Yanran? ¿La nieta de Nalan Jie, el comandante Corazón de León del Imperio Jia Ma? Es ella… ¿es ella es mi prometida que acordaron nuestras familias antes de que yo naciera?
—Jeje, el abuelo y Nalan Jie eran como hermanos de sangre y, en esa época, tú y Nalan Yanran nacieron casi al mismo tiempo, así que ellos decidieron que ustedes se casarían. Pero, desafortunadamente, tres años después de que naciste, el abuelo murió en una batalla con un enemigo del clan y, mientras el tiempo pasaba, la relación del clan Xiao con la familia Nalan se debilitó…
Xun Er pausó y miró a Xiao Yan, quien estaba atento a su historia.
—Nalan Jie no solo es arrogante, también pone demasiado énfasis en las promesas. Él decidió el matrimonio, así que, aunque tu nombre ha estado en mala posición durante los últimos años, él nunca ha pensado en anular el matrimonio…
—Ese viejo es muy es obstinado…
Xiao Yan sonrió.
—Nalan Jie tiene la última palabra en todos los asuntos de la familia, así que, aunque aprecia mucho a su nieta, nadie de la familia se ha atrevido a oponerse al matrimonio…
Los hermosos ojos de Xun Er miraron levemente a Xiao Yan antes de continuar.
—Pero, hace cinco años, Nalan Yanran se volvió una estudiante del líder de la Secta de las Nubes Brumosas. En esos cinco años demostró un talento increíble. Cuando una persona tiene el poder suficiente para cambiar el camino de su vida, se esforzaría al máximo para cambiar las cosas que no le agradan y, por desgracia, ¡ella odia su matrimonio prometido con Xiao Yan-gege!
—Estás diciendo que… ¿vino a CANCELAR el matrimonio?
El rostro de Xiao Yan se oscureció. ¡Estaba furioso en este momento, no porque Nalan Yanran no lo quería como esposo, sino, más bien, porque Nalan Yanran estaba tratando de cancelar el matrimonio con todo el clan presente! ¡Si eso ocurría, su padre perdería mucha de su dignidad y respecto dentro del clan!
Xiao Yan inhaló lentamente y el aire frío calmó sus pensamientos enfurecidos. En su manga, Xiao Yan apretó su puño, pensando: «Si yo fuera un Dou Shi, ¿quién se atrevería a pisotear mi dignidad?»
Era cierto, si Xiao Yan fuera un Dou Shi, entonces, incluso si Nalan Yanran tuviera el respaldo de la Secta de las Nubes Brumosas, no sería capaz de hacer algo así. Un Dou Shi de quince años, solo había unos pocos que tuvieran unos logros tan elevados en toda la historia del Continente Dou Qi. Y las pocas personas que estaban en ese nivel cuando eran jóvenes ahora eran algunas de las personas más influyentes de todo el mundo Dou Qi.
Una pequeña mano frágil evitó las mangas de Xiao Yan y sujetó sus manos. Xun Er dijo suavemente.
—Xiao Yan-gege, si realmente cancela el matrimonio, entonces es su propia pérdida. ¡Creo que, en un par de años, se arrepentirá de sus decisiones de hoy!
—¿Arrepentimiento?
Xiao Yan resopló.
—Con mis capacidades actuales, no tengo esa clase de lujos.
Xiao Yan pausó antes de cambiar el tono de su voz.
—Espera, Xun Er. ¿Cómo estás tan familiarizada con ellos? Las cosas que has dicho, ni siquiera mi padre las sabría todas. ¿Cómo sabes todo esto?
Xun Er se tensó, pero no dijo nada.
Viendo la evasión del tema de Xun Er, Xiao Yan solo pudo sonreír impotentemente. Aunque Xun Er también era parte de la familia Xiao, ella y Xiao Yan no tenían ningún vínculo sanguíneo. Además, Xiao Yan nunca había visto a los padres de Xun Er y, cada vez que le preguntaba a su padre sobre ellos, Xiao Zhan sacudía su cabeza y no hablaba. Pronto, los padres de Xun Er se volvieron un tema prohibido, algo que ellos parecían temer.
Para Xiao Yan, la identidad de Xun Er siempre estuvo rodeada de misterio. Sin importar lo mucho o lo astuto que lo pensara, Xun Er siempre guardaba silencio.
—Ugh, como sea, si no quieres decirlo, no lo hagas.
Sacudiendo su cabeza, el rostro de Xiao Yan se oscureció repentinamente otra vez. El anciano invitado se puso de pie finalmente tras las repetidas señales de Nalan Yanran…
—Je, ¿usando a la Secta de las Nubes Brumosas para presionar a mi padre? Esta Nalan Yanran ciertamente está utilizando tácticas desvergonzadas…
La furia empezó a acumularse en el corazón de Xiao Yan.