—¿Estás diciendo que Tuck se ha mudado? —"Nando", quien ahora portaba encanto femenino, le preguntó a una mujer de mediana edad.
A causa de que estaba cerca de las minas, el cielo de la ciudad de Holsava estaba cubierto de polvo durante todo el año, lo cual lo hacía oscuro y gris. En ese momento estaba en el centro de un valle oscuro, donde el estilo arquitectónico tendía más hacia lo misterioso y el tono sombrío que preferían los hechiceros.
La mujer de mediana edad a la que Fernando preguntó era una persona corriente. Vaciló y preguntó.
—Sí, Señora Hechicera. Tuck se mudó hace un mes.
El respeto y el miedo por los hechiceros se habían grabado en la sangre de los civiles del Imperio Mágico.
Fernando echó un vistazo a su alrededor. Los edificios eran veteados, pesados, con trazos del envejecimiento en todas partes. Al percatarse de que Tuck no parecía haber disfrutado de su vida en ese lugar, siguió preguntando.