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No quería volver a experimentar el momento en el que lo dejó y cómo lo condujo a una loca búsqueda por ella.
Así que en realidad se sintió bien cuando ella lo abofeteó. Al menos, lo primero en lo que pensaría cuando se enfrentara a un evento tan perturbador era buscarle una explicación en lugar de dejarlo abruptamente.
Mu Xiaoxiao no estaba segura de si reír o llorar. —No soy irremediablemente tonta. Es sólo una foto. No me cuenta toda la historia, ¿verdad?
Sin embargo, fue porque confiaba en él que sabía que él no la traicionaría.
Después de haber pasado por estos pocos eventos, se habían vuelto más estables en su relación.
Yin Shaojie besó su palma de nuevo. Entonces la luz se volvió verde, él bajó la mano y encendió el auto.