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Luego, un ayudante trajo a alguien y se inclinó ante ella, diciéndole: —Señorita Mu, el doctor está aquí.
Mu Xiaoxiao se volvió sombría en el momento en que vio al médico, su rostro se arrugó y dijo: —Estoy casi recuperada. No necesito al doctor, ¿verdad? No quiero tomar otra inyección...
Ya no quería seguir usando goteaderos. Además, estaba tomando medicamentos todos los días, tanto que su boca sabía a medicina. Todo lo que comía sabía mal, e incluso su leche de fresa favorita tenía un sabor diferente.
Ye Sijue dijo: —Le pedí a Shaojie que llamara al médico y revisara a Xiaomeng.
—Xiaomeng, ¿estás enferma? —Mu Xiaoxiao miró a Xiaomeng con preocupación.
Xiaomeng sacudió la cabeza y dijo con inquietud: —No, es sólo un poco de tos. Sólo quería que un médico me revisara. En realidad, no necesito ver a un médico.
Tampoco le gustaba ver médicos.
