Han Qiqing de repente reconoció quién era el chico. —¡Eres tú!
Song Shijun también entró arrastrando dos equipajes y preguntó: —¿Qué pasa? ¿Quién es él?
—Es nuestro esclavo. ¿Por qué no lo vimos anoche? —dijo Han Qiqing mientras señalaba a la persona.
Song Shijun se rio entre dientes, apartó a Han Qiqing a un lado y le susurró algunas palabras al oído.
Han Qiqing se echó a reír.
—Así que es por eso. Ustedes son muy traviesos.
Resultó que habían dejado deliberadamente al chico en la villa. Cuando Su Lin descubrió que no estaban en la villa y no pudo encontrarlos, no tuvo más remedio que quedarse sola con éste chico.
Luego, Han Qiqing miró adecuadamente la cara del chico. Su cara tenía mucho acné...
Cuando Su Lin se despertó en medio de la noche al verlo, ¿se murió de miedo?
Sin embargo, en éste caso, ¡aparentemente fue difícil para ella dormir bien!
