No había necesidad de hacer las tareas domésticas, ya que esas cosas las hacían las empleadas domésticas.
Además, no había un problema con su cintura. Cualquiera se cansaría si se doblaba de esa forma, ¿no?
Entonces, ¿de qué estaba hablando?
Mu Xiaoxiao no podía molestarse por él. Ella le pasó el vaso de agua de la mesita de noche y le dijo: —Todavía tienes fuerzas. Sostenlo y bebe tú solo.
«¡No me hagas alimentarte de nuevo!»
Al principio, Yin Shaojie quería que ella le diera de comer, pero como ella había visto a través de él, sólo podía olvidarse de ello.
Tomó el vaso y bebió lentamente.
Terminó el vaso de agua rápidamente.
Mu Xiaoxiao extendió la mano para tocarle la frente. Después de confirmar que su temperatura no había vuelto a subir, sintió un ligero alivio.
Le quitó el vaso y lo colocó de nuevo en la mesita de noche, ella lo miró y le preguntó: —¿Quieres seguir durmiendo o te gustaría comer algo?
