¿Creía que podía hacer que regresara con él obedientemente sólo diciéndole algunas palabras?
¡Ya quisiera!
Tomando sus mejillas, Yin Shaojie se inclinó para acercarse a su cara como si fuera a besarla, viéndola a los ojos con una mirada llena de dulzura.
Mu Xiaoxiao sintió que su respiración en su cara era un poco caliente, así que se encogió, avergonzada.
¿Por qué éste imbécil no podía hablar con normalidad?
Tenía que tocarla.
Se acercaba de una forma tan provocativa ¿Estaba intentando besarla de nuevo?
Pensar en eso la hizo sonrojarse de oreja a oreja y su corazón se aceleró.
Aunque no le gustaba reconocerlo... parecía estarlo esperando.
«¡Cielo santo!»
«¿Cuánto se volvió tan caliente?»
Mirándola intensamente, la respiración masculina de Yin Shaojie que la rodeaba le estaba empezando a parecer extraña. Las densas feromonas en su respiración parecían estar tentándola.
