William era muy consciente de su reputación en otras escuelas. A pesar de que hubo ciertos incidentes de los que no era responsable, era demasiado perezoso para explicarse. De todos modos, esto redujo que lo molestaran también, lo que él sentía que era genial.
William apretó los puños y se acercó, parecía querer castigar a la chica.
Al ver su postura, la chica se asustó. Pensó que Mu Xiaoxiao la había delatado para que ambas fueran castigadas y huyeran.
Mu Xiaoxiao no quería que William golpeara a la chica, pero antes de que pudiera contenerlo, la chica ya había comenzado a correr.
«¡No!»
«¡¿Cómo pudo dejarla escapar?!»
Mu Xiaoxiao le gritó a toda prisa a William :—¡Persíguela! ¡No la dejes escapar!
—¡Sí señora! —William sonrió siniestramente. Sus largas piernas se dispararon, su velocidad impactante imitaba la de un disparo de flecha con arco mientras corría.