En éste mundo, su padre era la única persona que realmente la amaba y no la lastimaría.
Papá Mu nunca la había oído llorar así. Escuchar su llanto le dolió. ¿Cómo podría negarse?
—Está bien, bueno, bueno. Lo que quieras, Papi estará de acuerdo. Si quieres volver, entonces hazlo. Si no quieres comprometerte, entonces no lo hagas. Lo que quieras. No llores, cariño. Papi está muy preocupado por ti.
—Papi... —Mu Xiaoxiao se conmovió mientras lloraba. Era verdad que la única gente que la alojaría y mimaría incondicionalmente era su familia.
Ahora sólo quería regresar a América tan pronto como fuera posible para volver con la persona que realmente la amaba.
—Papi... no le digas nada a la familia Yin... nada en absoluto... ¿Está bien?
—Sí, Papi no dirá nada. Papi no preguntará nada. Cuando estés de vuelta al lado de Papi, puedes hablar de ello cuando quieras.