Mu Xiaoxiao agitó su cabeza. —No voy a dormir más porque se supone que hoy saldremos a divertirnos. Iré a lavarme los dientes. Ni siquiera he empacado…
Ellos habían planeado pasar la noche en la villa termal, así que ella debía preparar un montón de ropa para cambiarse.
Mu Xiaoxiao dio un gran bostezo antes de irse de la habitación con sus pantuflas.
Ella sintió el aroma del desayuno a medida que salía del baño después de refrescarse. Su estómago rugió protestando.
—Tengo tanta hambre…
La mesa para cenar estaba llena de alimentos para el desayuno. Ella disparó sospechosas miradas a Yin Shaojie mientras comía. —Hoy estás actuando extraño —murmuró con la boca llena.
No sólo había tomado la iniciativa de prepararle el desayuno, sino que también estaba de muy buen humor para ser tan temprano.
¿No había dormido en el sillón la noche anterior?
¿Cómo podía ser que él pareciera estar de mejor ánimo que ella?