Yin Shaojie miró su auto deportivo. Silbando alegremente, se giró hacia ella y le preguntó: —Ya es fin de semana, ¿quieres hacer algo divertido?
—¿Dónde? —Mu Xiaoxiao, a quién usualmente le gustaba salir a divertirse, parecía desinteresada.
Yin Shaojie pensó por un momento antes de responder. —No has estado aquí por mucho tiempo estos últimos años. Hace poco abrieron una nueva villa termal, no has estado ahí, ¿verdad?
—¿Villa termal? Es sólo un lugar para sentarse en una tina caliente.
Ella aún parecía desmotivada mientras miraba por la ventana, concentrada en su propio mundo.
Yin Shaojie continuó: —Eso no es todo, por supuesto. También hay rosas o algo más que puedes elegir personalmente y ponerlo en la tina. He escuchado que es popular entre las chicas. Además, tienen comida deliciosa, como fresas que puedes elegir y comer. Tambiénhay un montón de otras cosas que se pueden hacer, pero de todos modos, esta villa termal es muy popular.