El salón completo quedó en silencio cuando Yin Shaojie dijo esas palabras.
Los estudiantes pensaron que habían escuchado mal. Algunos incluso se frotaban los ojos para confirmar que lo que habían visto era real.
¿Qué dijo el Joven Maestro Jie?
¿Le dijo a Mu Xiaoxiao que no necesitaba explicar nada?
Todos estaban estupefactos, sin hablar de Bai Meijiao, quien estaba tan sorprendida que incluso se olvidó de rascarse.
¿Era éste el mismo Yin Shaojie que ella había conocido?
¿Por qué… por qué mima tanto a Mu Xiaoxiao?
Y aunque Bai Meijiao había sufrido varias humillaciones, esta fue lejos la peor.
—No, esto no está bien… No puede estar bien…—parecía estar sufriendo y quejándose mientras agitaba la cabeza en negación.
Me pica mucho la cara. ¡Me pica mucho!
Se rascó la cara sin cesar, porque no podía aguantar la comezón. La piel en su rostro estaba rota por sus uñas y se podían ver rastros de sangre.