Como ese cachorro había sido llevado por Yun Shishi, y también había sido ella quien había dicho que quería cuidarlo. Naturalmente, todas las necesidades diarias del cachorro tendrían que ser manejadas por ella.
Por razones de higiene, el cachorro tenía que ser criado en el segundo piso. Su perrera sólo podría estar allí, y tenía prohibido siquiera poner un pie en el primer piso. En cuanto a las comidas, sólo podría comer en el segundo piso.
¡El baño o la alimentación del cachorro naturalmente tenía que ser hecho por ella!
¡Aparte de todo eso, no debía encontrar ningún pelo de perro en su casa!
Ningún rasguño de perro debería aparecer en el primer piso. No hacía falta decir que tampoco debería verse ninguna defecación.
¡Si viera alguno de esos, cada vez recibiría cincuenta golpes en la palma de la mano!