Mo Huiling miró a Gu Jingming y vio la confusión en su cara. Ella dijo sorprendida: —Señor presidente, soy Mo Huiling. Ya me ha visto antes.
No había manera de que no hubiera conocido al hermano mayor de Gu Jingze cuando estaban juntos. Es más, seguía siendo la joven señorita de la familia Mo. Sin embargo, Gu Jingming simplemente la miró y se detuvo antes de decir: —Oh... encantado de conocerla.
Obviamente se había olvidado de ella...
La cara de Mo Huiling se puso inmediatamente roja de ira y comentó: —Señor presidente, solía estar con Gu Jingze todo el tiempo. Incluso comí con usted cuando aún estábamos juntos.
Gu Jingming continuó mirándola y le dijo suavemente: —Lo siento, mi memoria es bastante mala. No me acuerdo muy bien.
…
Mo Huiling estaba tan enfadada que casi escupe sangre. Sin embargo, cuando vio que había mucha gente alrededor, simplemente sintió que se avergonzaría aún más si seguía allí.
