El padre de Yu Minmin caminó rápidamente hacia el auto y lo golpeó. Sin embargo, cuando la ventanilla del coche finalmente se bajó, se quedó inmóvil al instante.
Porque la persona ante él era el señor presidente en persona.
Por supuesto, el padre de Yu Minmin no había imaginado que esto sucedería.
Inmediatamente, retiró apresuradamente su mano y retrocedió un paso.
Nunca se le había ocurrido que se encontraría así con el Sr. Presidente.
Por un momento, el padre de Yu Minmin no se atrevió a hablar. Pensando que esta persona antes que él era el todopoderoso señor presidente, inmediatamente se inclinó y dijo: —Encantado de conocerlo, señor presidente.
Yu Minmin miró a su padre. —Si no hay nada más, deberías irte.
—Por cierto. Sí, sí. Me voy. Tómense su tiempo conduciendo.
Yu Minmin miró la actitud cautelosa de su padre en ese momento. Sacudió la cabeza y se metió en el coche de GuJingming.
